Recordando a Bach
¡Feliz martes! Si inmortal es la obra de Bach innumerables son las composiciones que lo homenajean. Hoy vamos a escuchar una de ellas procedentes de una mujer que siempre nos sorprende y que constantemente nos ofrece una música profunda.
No es otra que Sofiya Gudaidúlina (1931), compositora rusa de nacimiento tártaro en Chístopol. «Soy una persona religiosa ortodoxa rusa y entiendo la religión en el sentido literal de la palabra, como re-ligio, es decir, una restauración de las conexiones, la restauración del legato de la vida. No hay cometido más serio para la música que este». «Siento un gran deseo de realizar mis necesidades religiosas dentro del arte. Todas mis obras son mi fantasía, y así es como (en lo ideal) imagino mi eucaristía. La fiesta de la eucaristía significa mucho para mí. No puedo vivir sin ella y voy a la iglesia sobre todo para experimentar esta gracia. Particularmente en la Iglesia ortodoxa rusa esta gracia aparece no como una colección: antes de eso, hay una parte de la misa llamada epiclesa ['consagración'] que existe en la misa católica también. Es una llamada al Espíritu Santo para que penetre en los sacramentos (pan y vino)».
Vamos a escuchar su Meditación sobre el coral de Bach Vor deinen Thron tret ich hiermit BWV 668. Es una composición para conjunto de cámara formado por dos violines, viola, chelo, contrabajo y clavecín; data de 1993. En realidad son unas variaciones corales aunque vistas desde el punto de vista contemporáneo. La compositora trata el coral de una forma que los comentaristas han calificado como cultural-filosófica. Sitúa las notas de la melodía coral rodeada de una textura que ofrece un fuerte color, a veces transparente y a veces de una concentración que casi está llevada al límite. La obra es un encargado de la Sociedad Bahovsky.
La interpretación es del Playground Ensemble.