¡Feliz sábado! Reconozco que música barroca francesa no es del gusto de todo el mundo. Hay quien la encuentra bastante irritante; a mí me encanta. La grandiosa obra de hoy quizá reconcilie a alguien con esta bella música, llena de maravillas.

Nos lo trae Michel Richard Delalande (1657-1726), compositor francés nacido en París. Trabajó al servicio del Rey Sol, Luis XIV. Su padre se ganaba la vida como sastre y su tío un famoso astrónomo: Joseph Jérôme Lefrançois de Lalande. Nuestro compositor, ya con nueve años, era miembro de la escuela real en Saint-Germain l'Auxerrois en París, donde también estudió. Tras cambiarle la voz dejó la escuela y se dedicó a tocar el violín. Precisamente intentó ser contratado en la orquesta de Lully pero fue rechazado por lo que se dedicó en esta vez al órgano y a la música religiosa; fue organista de iglesias importantes de París como San Gervasio. En 1683 fue nombrado superintendente de la Capilla Real al cargo de la música de la corte, además de ser profesor de música de las hijas del rey.

Escuchemos su antífona Regina Coeli, S. 53. Ciertamente es una obra destinada al tiempo de Pascua pero creo que no importa demasiado escucharla ahora, en este sábado dedicado a la Virgen. A lo largo de las cuatro secciones de las que consta la obra, Delalande nos muestra era alegría de la Pascua, que ahora anticipamos. Como siempre, vemos momentos más camerísticos frente a otros con más fuerzas, siempre todo con una delicada melodía.

La interpretación es de Ex-Cathedra dirigido por Jeffrey Skidmore.