¡Feliz viernes! El río Volga es esa fascinante corriente de agua que es el más largo de Europa y que, curiosamente, íntegramente discurre por Rusia. Es tan querido que han surgido una gran cantidad de composiciones alrededor de él, como la de hoy.

Que es de Antón Arenski (1861-1906), compositor ruso nacido en Nóvgorod. En su momento fue un compositor muy apreciado a pesar de que hoy día no es demasiado conocido. Tras estudiar de forma privada, entró en el conservatorio de San Petersburgo, llegando a estudiar con Rimsky-Korsakov, con las calificaciones más altas. Cuando terminó, el propio conservatorio lo contrató como docente. Sustituyó a Balákirev como director de la capilla imperial de San Petersburgo, y prácticamente ahí se quedó lo que le quedaba de vida. Su actividad como compositor se vio complementada y enriquecida con la de pianista y director de orquesta, pero se truncó debido a su repentina muerte por tuberculosis con solamente cuarenta y cinco años. Se dice que la causa pudo verse agravada por su afición a las bebidas y por la ruina y depresión en que cayó debido a las apuestas.

Una de sus obras más conocidas es Un sueño en el Volga, op. 16, con libreto propio y estrenada a comienzos de 1891. La influencia de Chaikovski es evidente y está alejada del nacionalismo musical que tanto circulaba por Rusia en esos momentos. El movimiento que quizá es más conocido es su obertura, que es lo que vamos a escuchar hoy. Esta introducción refleja todo el talento dramático de Arenski, con un uso muy especial de las cuerdas y las trompas. Una perfecta introducción a una estupenda ópera que aún espera su resurrección en los teatros, quizá algo saturados de siempre las mismas composiciones.

La partitura de la composición puede descargarse aquí.

La interpretación es de la Orquesta Filarmónica de la BBC dirigida por Vassily Sinaisky.