¡Feliz Sábado Santo! Hoy es día de espera el pie de la cruz, de acompañar a la Virgen en su soledad mientras llora la muerte de su hijo, a quien había llevado en sus entrañas. Hoy es día de música serena y meditativa. Hoy es día de escuchar un stabat mater, que vendrá de la mano de un maestro actual y cuya música es especialmente bella.

Acudamos a la música de Gabriel Jackson (1962), compositor bermudeño nacido en Hamilton. Estudió composición en el prestigioso Royal College of Music, con Richard Blackford y luego con John Lambert. Se terminó graduando en 1983. Desde entonces centró su atención en la música coral y litúrgica, de forma que sus composiciones están presentes en el repertorio de la gran mayoría de coros de Inglaterra, así como en las celebraciones litúrgicas de los grandes templos del país. Es más, en 2003 se instauró el Premio Británico de Compositores y lo ganó en la categoría de música litúrgica. Desde entonces, le han sido encargadas una buena cantidad de piezas que van interpretando los coros por todo el mundo, a la vez que son cada vez más grabadas.

Escuchemos su Stabat Mater. Se trata de un encargo de The Marian Consort por su décimo aniversario y fue estrenado en 2018. La orquestación sigue la de la obra homónima de Scarlatti. Está escrita en un único movimiento aunque cada estrofa adquiere su propia entidad. Jackson las trata de una forma distinta, a veces más realista y a veces más alusiva. La obra está llena de continuidad y presenta diversos motivos que, al final de la misma, reaparecen a modo de mirada hacia atrás. El texto es especialmente sombrío pero también presenta un cierto éxtasis que también está perfectamente plasmado en la música, luminosa y llena de la incipiente resurrección.

La interpretación es de The Marian Consort.