De las Cantigas de Santa María, del rey Alfonso X el Sabio, escucharemos la cantiga n.º 379.

Su título es: A que defende do démo as almas dos pecadores. El epígrafe a modo de introducción es: Como Santa María do Pórto se vengou dos cossárïos do mar que roubavan os hómees que viínnan pobrar en aquela sa vila.

El rey se había asentado en Santa María del Puerto. Invitó a mercaderes para que se quedasen allí prometiéndoles seguridad. Muchos vinieron de todos los lugares, como Gënova o Chartres. Sin embargo, acudieron piratas catalanes y atacaron a los moros que allí iban. No tuvieron compasión ni con la Virgen, a pesar de que estaban en su territorio. La Señor no dejó que entrasen en la ciudad y obligó a que los piratas fuesen a Sevilla. Devolvieron lo robado y se pusieron al servicio del rey, lo cual fue visto como un milagro.

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La interpretación es de Eduardo Paniagua.