La bondad de servir a la Virgen

Eso es básicamente lo que nos relata la cantiga n.º 59 del rey Alfonso X el Sabio. Como todas las que estamos escuchando, obviamente, pertenece a las Cantigas de Santa María.

El epígrafe a modo de resume que tenemos es Como o Crucifisso déu a palmada a honrra de sa madre aa monja de Fontebrar que poséra de s' ir con séu entendedor. Había una doncella que era muy hermnosa y también monja. Amaba mucho a Dios y a la Virgen pero quería dejar las órdenes junto con su amante. Ella quiso despedirse de la estatua de la Virgen antes de su marcha y la imagen se puso a llorar de repente. Un crucifijo también se liberó un brazo. La monja cayó en trance y otra compañera de comunidad se la encontró. Todas alabaron a Dios por el milagro.

Puede encontrarse más información sobre la cantiga haciendo clic aquí.

La interpretación es del Ensemble Jehan de Channey.

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