Nuestros padres pecaron

Patres nostri, Cornago

¡Feliz lunes! Empezamos la semana disfrutando de una música que, de alguna forma, fue pionera en su tiempo. Cuando hablamos de grandes polifonistas españoles siempre recordamos a Victoria, Morales o Guerrero (obviamente) pero el de hoy fue toda una institución en su tiempo y actualmente es algo desconocido, aunque poco a poco se está recuperando su exigua obra.

Nápoles

Nos visita hoy Juan Cornago (c. 1400-1474), compositor español nacido probablemente en la localidad riojana de Calahorra. No se sabe muy bien si es Johannes Eximii de Cornago, que llegó a estudiar en París y que en 1453 lo tenemos al servicio de la capilla de Alfonso V el Magnánimo de Nápoles, la cumbre de su carrera ya que era la capilla más importante de Italia y una de las tres mejores de Europa. Tras la muerte de Alfonso Cornago se incorporó a la capilla de su hijo Ferrante y en 1475 era cantor de la de Fernando el Católico. Cornago compuso la llamada Misa «Ayo visto», una de las primeras en usar un cantus firmus de origen profano. Se conserva en un manuscrito que está en la localidad de Trento.

Otra de sus obras sacras suyas conservadas en Italia es el motete Patres nostri peccaverunt, presente en un manuscrito de Montecassino. Como dije en la introducción, es pionera porque es la primera obra polifónica conocida que utiliza como texto las Lamentaciones de Jeremías. Puesto que no se basa en ninguna melodía gregoriana parece ser que no estaría destinada a ser interpretada en la Semana Santa (tiempo litúrgico en el que se usa el texto de Jeremías). Puede ser que se interpretase en una serie de representaciones que tuvieron lugar en Castelnuevo para conmemorar la pasión de Cristo, algo habitual en tiempos de el Magnánimo.

La interpretación es de La Capella Reial de Catalunya dirigida por Jordi Savall.

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