¡Feliz Miércoles de Ceniza! Sí, así con mayúsculas porque hoy empieza la Cuaresma, también con mayúsculas. Es un tiempo privilegiado para hacer más oración, dar más limosna y estar más pendiente de Dios y de nosotros mismos. ¿Qué mejor hacerlo que con música? A lo largo de estas cinco semanas te traeré bastante y hoy, para el pórtico, te traigo una que es breve pero intensa.

La compuso Giacomo Antonio Perti (1661-1756), compositor italiano nacido en Bolonia. Aprendió contrapunto con Franceschini y clave con Laurenti. En 1690 se encargó del coro de la catedral de Bolonia y también estuvo vinculado a la vez con San Petronio, Santo Domingo y Santa María in Galliera. El la ciudad tuvo mucha influencia como profesor puesto que fue elegido cinco veces para dirigir la Academia, en la que estudiaron maestros como Martini o Torelli. Entre los géneros que podemos encontrar en la producción de Perti está la ópera, aunque compuso casi en todos los géneros. También destacan las casi trescientas obras sacras (motetes, misas, salmos,...) que enriquecían enormemente la liturgia boloñesa. Perti tenía una gran invención en cuanto a melodías y en sus obras casi siempre estaba presente el color orquestal, que sabía administrar magistralmente a sus estructuras más diversas. Utiliza habitualmente una orquestación también amplia y variada, por lo que comprobamos así la solides de su arte, lleno de diálogos de lo más interesantes y sugerentes, tanto entre voces como entre ellas y los instrumentos.

Disfrutemos de su motete Inter vestibulum et altare. Es una composición a cuatro voces en la que Perti tiene un estilo conservador más próximo al stile antico de Palestrina que al nuevo de Monteverdi. Ciertamente se trata una obra para un día tan austero (la Iglesia propone ayuno y abstinencia) com el Miércoles de Ceniza, por lo que no ha lugar a demasiadas concesiones. Sin embargo, el compositor está atento al texto y salpica la composición de cromatismos que aluden al carácter penitencial de la obra. Las voces caminan casi continuamente en paralelo, aunque a veces aflora la polifonía libre para dar algo de variedad a la pieza. El texto está tomado de una de las antífonas cantadas en el momento de la imposición de la ceniza.

La partitura de la obra puedes descargarla aquí.

La interpretación es de la Schola Litúrgica de la Basílica de los Padres Franciscanos de Katowice-Panewniki dirigida por Łukasz Kurpas.