Tras años de retrasos, la iglesia ortodoxa inicia el día de su patrón Abre al culto San Nicolás de Nueva York, reconstruida por Calatrava tras el atentado del 11-S

La nueva iglesia ortodoxa griega de San Nicolás de Nueva York, diseñada por el arquitecto español Santiago Calatrava, abrió al culto este martes después de años de retrasos, en sustitución y reinterpretación del único templo destruido en los ataques del 11 de septiembre de 2001.

"Ver la Iglesia Greco-Ortodoxa y Santuario Nacional de St. Nicholas finalmente abierta al público es una ocasión emblemática del prometedor futuro y el marcado pasado de Bajo Manhattan", dijo en una nota de prensa Calatrava, que es autor de otro edificio emblemático en la zona del World Trade Center, el Oculus, sede de un gran centro comercial.

El culto se ha iniciado en el día de su patrón, San Nicolás, aunque la iglesia fue consagrada el pasado 4 de julio, Día de la Independencia de EE.UU., y ha abierto en contadas ocasiones desde entonces.

El edificio luce un exterior de mármol del mismo origen que el utilizado en el Partenón de Atenas, una cúpula fabricada con láminas de piedra y paneles de vidrio que se iluminan de manera que la iglesia parece brillar desde dentro, más cuatro torres a su alrededor que le dan una forma de cruz griega típica de los templos ortodoxos.

Se trata de una iglesia de inspiración bizantina, tanto en sus elementos arquitectónicos como en el arte en su interior, y su diseño no tiene nada que ver con el templo original destruido en aquel atentado.

El proyecto, nació en 2013, comenzó el año siguiente con una ceremonia en la que se puso la primera piedra, con la expectativa de que se completara en dos años, pero sufrió retrasos por los problemas financieros de la Archidiócesis Greco-ortodoxa de América, que lo financiaba.

La construcción quedó paralizada entre 2017 y finales de 2018, cuando la Autoridad Portuaria de Nueva York y Nueva Jersey -propietaria del terreno en el que se alza- se ofreció a ayudar con el alquiler y después se sumó una ONG llamada Friends of St. Nicholas, retomándose las obras a mitad de 2020, según medios locales.

• N. de la R.: pese a que la nota es de la agencia Efe, desde el estudio de Santiago Calatrava nos hacen llegar la siguiente apreciación, que publicamos una vez eliminados los datos apuntados por la noticia: 

  "La cifra del costo de construcción han sido entorno a 58 Millones de dólares.

  Más allá de los propios costos de la construcción, la diócesis tuvo que afrontar otro tipo de gastos no relacionados con la construcción: gastos de administración, legales (al comienzo del proyecto afrontó una notoria batalla legal con la Autoridad Portuaria a cuenta de la localización del proyecto), o de otra naturaleza.

  La cifra final de recaudación de donaciones para el proyecto, según las fuentes de la diócesis, sí ascienden a esos 95 millones, pero esta cifra no refleja los gastos de construcción, que se limitan a los mencionados 58 millones"