Pide a los curas “ser ministros de la esperanza, ser esos ministros de dar un consuelo” Brenes, a los sacerdotes: "No se cansen de perdonar"

Brenes, a los sacerdotes: "No se cansen de perdonar"
Brenes, a los sacerdotes: "No se cansen de perdonar" captura de pantalla

“El perdón no es humano, el perdón es divino, pero qué hermoso este proceso que hemos venido viviendo nosotros como presbiterio de la Arquidiócesis, forjando una verdadera fraternidad sacerdotal y esta celebración bella en este momento”

“Siento que esta Semana Santa la hemos vivido como algo muy, pero muy especial, no dudo que cada uno de nosotros comenzando con mi persona, hemos vivido intensas horas de oración, hemos tenido la oportunidad de ser misericordiosos como el padre a través del sacramento de la reconciliación”

“El demonio seguirá trabajando, querrá apartarnos para que no seamos discípulos, sino que seamos protagonistas, somos discípulos, no protagonistas de la obra de Dios”

El Cardenal Leopoldo Brenes, Arzobispo de la Arquidiócesis de Managua, celebró este jueves santo la misa crismal, en donde participó el clero. Durante su mensaje central que estuvo dirigido a los sacerdotes, el obispo los invitó a perdonar.

Las palabras del cardenal llegan en un momento en que la Iglesia Católica es perseguida y atacada por la dictadura de Daniel Ortega, que ha prohibido las procesiones de Semana Santa en Nicaragua.

“El perdón no es humano, el perdón es divino, pero qué hermoso este proceso que hemos venido viviendo nosotros como presbiterio de la Arquidiócesis, forjando una verdadera fraternidad sacerdotal y esta celebración bella en este momento”, dijo el Cardenal Brenes durante la misa crismal.

Todos los jueves santos, el clero de la Arquidiócesis de Managua se congrega en catedral de Managua para participar de la misa de crismal, en donde el Arzobispo prepara y bendice los óleos que son utilizados a lo largo del año para bautizos, unción de enfermos y unción de manos al momento de ordenación sacerdotal.

“No se cansen de perdonar, sí, porque tenemos esa misión que Dios nos ha dado a nosotros, ser esos ministros de la reconciliación y que hermoso ver a nuestros fieles de manera humilde y sencilla acercarse a nosotros, yo diría, hasta tímidamente, pedirnos ´me puede confesar´, que pensaría que le lleguemos a decir no, pero que hermoso que han encontrado esa respuesta positiva que es parte de los sentimientos del Señor”, exhortó el Cardenal a sus sacerdotes.

Semana Santa especial

Ante la persecución policial que el régimen ha desatado contra Jesús de Nazareth y los Cirineos en Nicaragua, en donde varios jóvenes católicos de los municipios de Nindirí y San Juan de La Concepción, en el departamento de Masaya y en Nandaime, en Granada, que recreaban las estampas de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo, denunciaron en redes sociales asedio policial, el prelado dijo que esta Semana Santa ha sido “especial”.

“Siento que esta Semana Santa la hemos vivido como algo muy, pero muy especial, no dudo que cada uno de nosotros comenzando con mi persona, hemos vivido intensas horas de oración, hemos tenido la oportunidad de ser misericordiosos como el padre a través del sacramento de la reconciliación”, dijo Monseñor Leopoldo Brenes.

Además pidió a los curas “ser ministros de la esperanza, ser esos ministros de dar un consuelo”, agregó.

“Miles de nuestros fieles están viviendo esta Semana Santa con gozo y alegría, es los insumos que nos ha dado el señor, la oración, el ayuno y el perdón”, continuó el Cardenal.

Ante los ataques de la dictadura, que se ha ensañado contra obispos y sacerdotes, Brenes pidió a los sacerdotes seguir firmes en la fe.

“El demonio seguirá trabajando, querrá apartarnos para que no seamos discípulos, sino que seamos protagonistas, somos discípulos, no protagonistas de la obra de Dios”, finalizó.

Nicaragua vive una Semana Santa inusual, porque Monseñor Rolando Álvarez Lagos, obispo de la Diócesis de Matagalpa se encuentra detenido en las celdas de La Modelo, después que el nueve de febrero, la justicia sandinista lo condenó a 26 años y cuatro meses de prisión.

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