Piden que se defina su futuro en la comunidad Los Heraldos del Evangelio abandonan temporalmente Sucumbíos

Atendiendo un llamado de la cúpula de la Iglesia católica, la congregación Heraldos del Evangelio salió de Sucumbíos y, por consiguiente, dejó la administración del Vicariato Apostólico de esa provincia, donde su gestión es rechazada por una parte de población amazónica.

Ocho sacerdotes y diez hermanos religiosos llegaron a la 01:30 de ayer a Quito, confirmó el padre Mauricio Galarza, párroco de la parroquia Divino Niño, de Lago Agrio, quien dijo que dos misioneros aún faltan por arribar y lo harían hoy.

"La cúpula de la Iglesia católica nos pidió venir para acá, a Quito, y ese mismo pedido se lo han hecho a los padres carmelitas. Esa ha sido la orden y estamos cumpliendo. Esperamos que esto se pueda resolver lo antes posible", citó Galarza sobre la tensión que hay en Nueva Loja, sede del Vicariato.

Grupos exigen la salida de los Heraldos del Evangelio porque supuestamente atentan contra el modelo iglesia-comunidad que instauró la orden Carmelitas Descalzos en 40 años de vicariato. Otros les hacen oposición remarcando que los dejen trabajar a la orden religiosa designada por el Vaticano, en noviembre pasado.

Galarza indicó que en las próximas horas habría conversaciones que derivarían en una solución al conflicto. Estarían lideradas por la cúpula de la Conferencia Episcopal.

En tanto, en Nueva Loja, la salida de los Heraldos del Evangelio generó un ambiente de expectativa en los grupos sociales que hacen resistencia en la Catedral y en radio Sucumbíos, pero sus integrantes prefirieron omitir comentarios.

Sin embargo, el padre Édgar Pinos, coordinador de la Asamblea Diocesana, frente de oposición a los Heraldos, opinó que el Vicariato debería asumirlo el delegado pontificio en la provincia, monseñor Ángel Polivio Sánchez. "Debería ser él mientras se nombra a un obispo titular", refirió.

La salida de los Heraldos del Evangelio se dio la noche del jueves en camionetas, a manera de una caravana escoltada por un patrullero, por lo que no pasó desapercibida en Nueva Loja, según habitantes, que contaron cinco vehículos cargados con maletas y enseres.

Hubo la reacción de un grupo carismático que los respaldan que a las 21:30 protagonizaron una marcha por las calles en las que gritaron consignas como: "Únete pueblo, únete a luchar para que los Heraldos puedan regresar...".

Ayer, la policía mantenía su presencia en la catedral, Radio Sucumbíos y en el Vicariato.

Antecedentes

A través de marchas, los pobladores de Sucumbíos han mostrado su respaldo y rechazo a la administración de los Heraldos del Evangelio. La tensión ha derivado en el cierre de la catedral y la celebración de misas paralelas.

Volver arriba