Desaparecidos desde el 1 de mayo, tras un accidente aéreo La Iglesia colombiana convoca una jornada de oración por el regreso de los cuatro niños perdidos en la selva

Convocatoria de oración
Convocatoria de oración

A través de un sentido mensaje,  monseñor Rueda expresó su solidaridad con los familiares de los niños; pidió igualmente orar por ellos y por quienes se han unido a su búsqueda

"Mantener la esperanza puesta en el Señor y en la Virgen para que Lesly de 13 años; Soleiny de 9 años; Tien Noriel, de 4 años, y Cristin Neriman Ranoque Mucutuy, de 11 meses, todos hermanos, puedan regresar sanos y salvos al seno de su familia"

"Agradecemos al Ejército colombiano y a las entidades indígenas de nuestro país que están en la búsqueda permanente, incansable, en medio de las selvas amazónicas"

(Conferencia Episcopal Colombiana).- La Iglesia Católica colombiana, a través del arzobispo de Bogotá y presidente de la Conferencia Episcopal monseñor Luis José Rueda Aparicio, convoca una campaña de oración en todas las parroquias del país, para encomendar a Dios y a la Virgen María la vida y el pronto regreso a casa de los cuatro niños perdidos desde el pasado 1 de mayo, tras el accidente aéreo presentado en el departamento del Caquetá. 

A través de un sentido mensaje, difundido en la tarde de este sábado 20 de mayo, monseñor Ruedaexpresó su solidaridad con los familiares de los niños; pidió igualmente orar por ellos y por quienes se han unido a su búsqueda. “Acompañamos en este momento de dolor a las familias y también a todas las autoridades que están rastreando y buscando por todos los medios a estos cuatro niños que nos pertenecen, niños indígenas del sur de Colombia. Agradecemos al Ejército colombiano y a las entidades indígenas de nuestro país que están en la búsqueda permanente, incansable, en medio de las selvas amazónicas”. 

Ante este lamentable caso, el prelado pidió mantener la esperanza puesta en el Señor y en la Virgenpara que Lesly de 13 años; Soleiny de 9 años; Tien Noriel, de 4 años, y Cristin Neriman Ranoque Mucutuy, de 11 meses, todos hermanos, puedan regresar sanos y salvos al seno de su familia. “Nos unimos en oración, una oración en camino, oración de pies cansados; una plegaria sedienta, necesitada de agua fresca, oración en la oscuridad suplicando que amanezca. Es nuestra voz dirigida en medio de las fatigas a la Virgen de la esperanza que peregrina junto a nosotros en gozo y adversidad, en pobreza y prosperidad”, puntualizó monseñor Luis José. 

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