Un asesor del Papa defendió la negociación de la deuda argentina Stefano Zamagni: "Los acreedores prefieren el default a la curación de la economía argentina"

Stefano Zamagni,  catedrático de la U. de Bolonia y presidente de la Academia de Ciencias Sociales del Vaticano
Stefano Zamagni, catedrático de la U. de Bolonia y presidente de la Academia de Ciencias Sociales del Vaticano

Lo declaró en el seminario "¿La economía al servicio de los pueblos o de los mercados?", organizada en la Universidad de Tres de Febrero por videoconferencia y que congregó a catedráticos y empresarios

"El asesor papal criticó a los fondos y recordó que "a nivel mundial hay un movimiento de intelectuales y empresarios, entre los que hay dos premios nobeles de Economía, diciendo que se acepte la propuesta argentina"

Zamagni pidió "la reforma del sistema financiero, porque es seis veces superior al lado real de la economía"

El economista Stefano Zamagni, catedrático de la Universidad de Bolonia y presidente de la Academia de Ciencias Sociales del Vaticano, presentó propuestas para los problemas económicos que provocó la pandemia de coronavirus, apoyó la negociación de la deuda argentina y criticó a los bonistas por "preferir el default".

"Argentina ofreció refinanciar el cupón al 2,3%, que es bastante alto para garantizar un retorno, pero los acreedores no están dispuestos a aceptar, prefieren el default a la curación de la economía argentina", aseveró Zamagni.

El economista, asesor de los Papas Francisco, Benedictto XVI y Juan Pablo II, formuló esta declaraciones al exponer en el seminario "¿La economía al servicio de los pueblos o de los mercados?", que organizó la Universidad de Tres de Febrero (UNTREF) por videoconferencia y que congregó a catedráticos y empresarios.

En un fuerte aval a la renegociación que llevan adelante el presidente Alberto Fernández y el ministro de Economía, Martín Guzmán, el asesor papal criticó a los fondos y recordó que "a nivel mundial hay un movimiento de intelectuales y empresarios, entre los que hay dos premios nobeles de Economía, diciendo que se acepte la propuesta argentina", en referencia al documento que la semana pasada firmaron 136 economistas e intelectuales encabezados por los nóbeles Joseph Stiglitz y Edmund Phelps.

Por otro lado, Zamagni pidió "la reforma del sistema financiero, porque es seis veces superior al lado real de la economía".

"Las finanzas deben estar al servicio de la producción de bienes y servicios, no es autorreferencial", afirmó y puntualizó que "Argentina antes de la pandemia ya tenía dificultades".

"La posibilidad es la consecuencia de las oportunidades y la esperanza" aseveró Zamagni.

Para el catedrático, la pandemia de coronavirus pone al mundo ante la oportunidad de pensar "cuáles son las cosas que hay que transformar para garantizar la resiliencia" que, según detalló, "es la capacidad que tiene un sistema para hacer frente a una vulnerabilidad".

Siguiendo su línea conceptual, el asesor papal se refirió a la "economía verde" que ya plantea la Unión Europea proponiendo "pasar de una economía lineal a una circular".

Pidió además "combatir la monopolización" y en este punto ahondó en la concentración económica que ostentan cinco empresas: "Google, Facebook, Amazon, Apple, Microsoft son más potentes -económicamente- que un país como Portugal", ejemplificó.

Acto seguido, el economista del Vaticano se refirió a las vacunas y la necesidad de que no estén sujetas a ninguna patente porque "la efectividad se basa en la universalidad, y para eso los gobiernos deben tenerla de forma gratuita".

Zamagni se refirió además a la "gobernancia de los bienes comunes", algo que los departamentos de Economía no enseñan en las universidades, por lo que llamó a "cambiar la filosofía" de enseñanza en las escuelas y facultades para llegar a la "conacción, que es la sumatoria del conocimiento con la acción".

Como panelistas del encuentro estuvieron el ministro de Educación, Nicolás Trotta; el secretario de Asuntos Estratégicos de la Presidencia, Gustavo Béliz; el rector de la UNTREF, Aníbal Jozami, el director de la revista Foro E-Ecuménico Social, Fernando Flores Maiodo, y la secretaria de Estado de Economía del Vaticano, Alessandra Smerelli.

"Tengo la esperanza de que el mundo va a ser mejor siempre y cuando seamos conscientes que los cambios no son individuales, en lo referido a las personas y a los países. Debemos lograr un nuevo esquema de gobernancia a nivel mundial", dijo Trotta tras coincidir con los preceptos expuestos por el catedrático del Vaticano.

En tanto Béliz pidió, "como invita Francisco, a no caer ni en el optimismo ni en el pesimismo porque ambos son absolutos".

"Es tiempo de esperanza activa, de los sueños y las utopías posibles" dijo Beliz y, analizando la frase de Zamagni, pidió "creatividad política para no repetir siempre lo mismo" y cerró su intervención bregando por llegar a la "fraternidad, que es la organización que permite a los iguales ser diversos".

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