La fuente cristiana fundacional del Ejército de Liberación Nacional puede facilitar al Vaticano ser sede de nuevas conversaciones de paz En Colombia, la diplomacia del Vaticano y de la sociedad civil avanza para abrir caminos de diálogo con el ELN

Iris Johanna y Ana Alejandra Quiñones Parada eran hermanas, vivían bajo el mismo techo en una humilde casa de tablas, en zona rural del Catatumbo (Norte de Colombia, frontera con Venezuela). Ambas enfrentaron juntas el horror del fuego cruzado producto de los enfrentamientos entre las disidencias del Frente 33 de las Farc y el Ejército de Liberación Nacional (Eln), quienes desataron una lluvia de balas el viernes 14 de febrero, convirtiendo el hogar de estas hermanas en un campo de batalla. Una semana antes, la familia había retornado después de huir desplazados de esa guerra.

Con 18 años, Iris Johanna murió un día después del ataque al recibir dos disparos, uno de ellos en su cabeza; mientras que Ana Alejandra a sus 24 años, no pudo seguir luchando por sobrevivir y ante la falta de atención especializada en el hospital Erasmo Meoz de Cúcuta, un infarto se la llevó la mañana del Sábado Santo, 19 de abril de 2025.

¿Qué ha pasado? Era una mañana como cualquiera. Alrededor de las 9:00 a.m., la familia Quiñones Parada estaba reunida preparando el desayuno en la parcela, que ubicada a la orilla de la vía principal de esa zona rural, tenían una pequeña construcción de tablas de madera. De repente, el sonido seco y brutal de los disparos interrumpió la calma.

“Se escuchó un disparo… luego otro… y después muchísimos. Todos nos tiramos al suelo. Fueron como tres horas de disparos, pero media hora estuvieron junto a la casa”, relató una familiar. En la parcela estaban la madre de las jóvenes, cuatro niños pequeños, dos de ellos hijos de Ana Alejandra —de entre tres y cinco años—, y las dos hermanas, quienes protegieron a los niños, pero no pudieron salvarse a ellas mismas. Tras el cese del tiroteo, la madre de las jóvenes se levantó y fue entonces cuando Ana Alejandra, con voz débil, le dijo: “Mami, estoy mal…”, dejando entrever que estaba herida. Pero Iris Johanna no pudo pronunciar palabra. Había sido alcanzada casi que fatal pero aún respiraba. Entonces, al oír y reconocer el ruido de tres tanquetas del Ejército, la madre de familia suplicó por ayuda y logró que las trasladaran a un centro médico y las llevaron a Tibú. “Tenían que trasladarlas a Cúcuta y lo hicieron por tierra. No hubo helicóptero para ellas” contó la familiar.

Frente a la crueldad de la guerra en el Catatumbo, ¿qué propone la Iglesia Católica?

El Presidente de la Conferencia Episcopal de Colombia, monseñor Francisco Múnera, misionero de la Consolata y Arzobispo de Cartagena (sucesor del profético misionero de la Consolata, Monseñor Augusto Castro, referente de la búsqueda de paz en Colombia, falleció en 2022, autor del libro “El corazón de las víctimas: Aportes a la verdad para la reconciliación en Colombia – Descarga el libro aquí – (1), ha subrayado que “ahora en el consejo de ministros que el presidente Petro realizó en febrero de 2025 después de haber declarado el estado de conmoción interior, ha previsto este programa de “Pacto por el Catatumbo”, que apunta a la transformación social del territorio en varios escenarios: la paz, las vías, la salud y los proyectos productivos en una meta muy ambiciosa que lo hemos escuchado de trabajarle muy fuerte al tema de la erradicación total, son 25.000 hectáreas que, entiendo, están implicadas, pero él lo quiere hacer mediante un proceso de diálogo y de acuerdos con los campesinos, con las comunidades. Pues me parece que eso está bien, no será fácil y esperamos que se pueda llevar a cabo”.

Diálogos pastorales: una estrategia para la paz desarmada y desarmante

El Pbro. Jorge Ernesto Zapata Ochoa ha analizado los “Diálogos Pastorales”, una experiencia iniciada en la década de 1980 y que ha permitido mitigar conflictos e involucrar actores armados en dinámicas de paz y reconciliación.

El p. Zapata ha subrayado que “esta estrategia de los Diálogos Pastorales impulsada desde la misión del Episcopado Colombiano, es un servicio a la reconstrucción del tejido social, aportando las luces del humanismo cristiano que valora los tiempos, las circunstancias y las condiciones de los seres humanos involucrados en los conflictos y brindando la posibilidad para que en la relación víctimas - actores de violencia, sea posible la cultura del encuentro, fortaleciendo la aceptación y aplicación del Derecho Internacional Humanitario (DIH) y la distinción humanitaria, dando así pasos hacia el restablecimiento de la paz desde la protección de la vida

Esta estrategia se hace cada vez más necesaria, dado que la realidad nos muestra el desplazamiento y crecimiento de los conflictos en diversas zonas del territorio nacional, y el Chocó no es la excepción, por los confinamientos en sus propios territorios a individuos y comunidades, afectando las actividades laborales, comerciales, educativas, incluso poniendo en riesgo la salud y la vida, ya que las confrontaciones, dejan en medio a niños, niñas, adolescentes, jóvenes y adultos, con familias destruidas por afectaciones emocionales y de hechos de muerte, ya sea en comunidades negras o indígenas, sin embargo, gracias a los diálogos pastorales en las jurisdicciones eclesiásticas de Quibdó e Istmina-Tadó, se ha logrado disminuir la cantidad e intensidad del conflicto.

Esa puerta que permita construir una solución dialogadacon las organizaciones al margen de la ley nunca debe cerrarse.

Todo lo anterior es razón suficiente para proponer y acoger los diálogos pastorales como una posibilidad de acercar las partes para el reconocimiento de las razones del conflicto, con una actitud “de paz desarmada y desarmante” (León XIV), que identifique y recupere puntos comunes, ideales compartidos, razones justas, ideales lógicos y emocionales, valoración de los intereses y los fines con un enfoque diferencial, involucrando así a todos, de manera comprometida y constructiva, en la superación de los conflictos.

Esta estrategia cuenta ahora con un nuevo impulso, gracias a la creación de la Comisión Episcopal de Perdón, Reconciliación y Paz, que acrecentando el camino recorrido por la Comisión de Conciliación Nacional (CCN) se propone seguir fortaleciendo las claves para los diálogos pastorales, ya que además de evidenciar conjuntamente las deficiencias, busca mediante el diálogo pastoral identificar las fortalezas en los territorios y zonas de conflicto, generando mayor aplicación del DIH”, concluyo el p. Zapata Ochoa.

El encuentro del Presidente Petro y el Papa Prevost en el Vaticano

El pasado lunes 19 de mayo, el presidente Gustavo Petro se reunió con el papa León XIV, como uno de los primeros jefes de Estado en tener una audiencia privada con Su Santidad luego de la misa de entronización.

Un tema de discusión, fue sobre la masacre del ELN, en el que presidente Petro aseguró que a este grupo se le olvidó su teoría del amor eficaz que vino también de sacerdotes católicos y que ahora el ELN está matando a los pobres y a los campesinos del Catatumbo. “Cambiaron estas banderas por los traquetos”, dijo el presidente.

"Ellos (ELN) quieren mantener las reuniones en Cuba y Venezuela. Pero yo creo que es aquí en el Vaticano donde se puede recordar la teoría del amor eficaz. ¿Cómo podría ser el Vaticano ser la sede de las nuevas conversaciones de paz? Bajo la teoría del amor eficaz cubra la codicia", sentenció el presidente Petro.

Lo que sí es cierto es que las raíces e influencia religiosa que tiene la guerrilla cuyo origen se dio hace 60 años podría ser una de las razones por las que el Gobierno Petro ha insistido en esta propuesta del Vaticano. El ELN tiene en su ADN la herencia de la insurrección de los Comuneros, pero también la revolución cubana y, sin duda, la suma del cura colombiano Camilo Torres, conjuró cierta unión entre la religión y las ideas marxistas.

De hecho, el presidente apeló a esos orígenes ideológicos del ELN, con una fuerte influencia de la teología de la liberación, para reactivar los acercamientos. “Yo creo que es aquí donde se puede recordar la teoría del amor eficaz, en el Vaticano”, dijo Petro, refiriéndose a un concepto filosófico sobre el compromiso con los pobres desarrollado por el sacerdote Torres.

Hay que recordar las afirmaciones del Presidente Petro del día 4 junio 2024: "En Roma hablamos de una posibilidad que le transmití al Papa Francisco, que es poder realizar una ronda de Paz, de diálogos sobre la Paz con el ELN, que siempre se ha atribuido una fuente cristiana en su fundación; me pareció que eso podría juntar el deseo de Paz de tantas gentes en las regiones de Colombia martirizadas y un buen lugar podría ser allá, bajo el cobijo diplomático del Estado Vaticano", dijo Petro, durante la ceremonia del saludo al fuero diplomático residente en Colombia y al Nuncio del Vaticano, Mons. Radaelli.

Hizo escuela el mito de que el cura guerrillero Camilo Torres fundó el ELN. Más que teólogo, fue sociólogo, cofundador en la Universidad Nacional de Bogotá de la primera Facultad de Sociología de América Latina.  Nunca defendió la teología de la liberación. El libro de Gustavo Gutiérrez que dio nombre a esa corriente de pensamiento es de 1971, cinco años después de la muerte del guerrillero Camilo en combate.

Helena Uran Bidegain, hija de un magistrado asesinado en la toma del Palacio de Justicia y colaboradora de la Cancillería, enfatiza que “hay que ser claros: Una cosa es la teología de la liberación, con intelectuales y movimientos sociales que interpretan la fe de Cristo desde la realidad de los más pobres y oprimidos en América Latina, para lograr la justicia social y la dignidad de todos; y otra cosa es una guerrilla que ha asesinado, secuestrado, destrozado el medioambiente y violado mujeres, lo que definitivamente no es compatible con los valores de la no violencia. No hay nada que justifique este horror”.

El presidente Petro ha explicado el tránsito de las guerrillas insurgentes hacia las organizaciones narco-armadas, en un mensaje de Pascua, afirmando que “la guerra es el fracaso total. Pero mi amor personal y estratégico por la paz, no debe tomarse como ingenuidad. Se equivocan si lo piensan (dirigiéndose al Eln). Catatumbo debe ser una zona de paz y de unión entre dos pueblos, una zona para producir alimentación para los seres humanos.

El ELN escogió el camino de la crucifixión, yo quiero para Colombia el camino de la Resurrección. Ustedes señores del ELN tenían los dos caminos ante sí. Hace unos días, las autoridades venezolanas, capturaron 11 alcaldes del Zulia, entre oficialistas y de la oposición, todos prestaban sus vehículos a ustedes, señores del ELN, para transportar las armas y la cocaína. El camino de los alcaldes era el camino de la crucifixión. Así no se hace una revolución. Recuerden: la codicia tiene la propiedad de enceguecer al ser humano. La codicia es peor que la cocaína, vuelve el ser humano ciego porque le quita la razón. Si juntan ambas, codicia y cocaína, se acaba la revolución. Es la crucifixión de nuestro pueblo. Hay que emancipar, liberar los pueblos.

Hoy Jesús se recuerda en nuestra cultura, ese Jesús que crucificaron, se transforma en liberación. La paz en Colombia es la liberación del pueblo, su emancipación. No porque yo sea moralista, no lo soy, sino porque el poder en el mundo al dictaminar la prohibición de la cocaína, nos condenó como nación a la violencia. Han muerto más de un millón de latinoamericanos bajo la condena de la prohibición. Al Poder del mundo no le importa, pero a nosotros sí. Nosotros no tenemos que permitirlo, y el camino rápido y fácil es cultivar alimentos y selva, donde se usa el suelo para lo que hoy, está prohibido. 

Le hemos dado drogas al mundo: oro robado por europeos, quinua, medicinal, tabaco, café, ahora con el café, démosle alimentación, inteligencia, poesía y oxígeno al mundo. Que nuestros campesinos no sufran más; ellas y ellos son el verdadero sustento de la Nación. Escojan (refiriéndose al Eln) el camino de la Resurrección, personal y nacional”, destacó el mandatario colombiano.

La diplomacia del Vaticano y de la sociedad civil avanza para abrir caminos de dialogo con ELN

Ernesto Samper - ex presidente de Colombia (1994-1998) y Secretario General de UNASUR (2014-2017) ha comentado: “bienvenida la participación del Vaticano en la reactivación del proceso de paz del Gobierno con el ELN, que hasta ahora ha dejado algunos resultados importantes en: territorialización de la paz, identificación de canales para la participación popular y una mayor conciencia sobre la aplicación del Derecho Internacional Humanitario en medio del conflicto armado. Ahora el ELN tiene la palabra. Los invitamos a que respondan con la sensatez, humanidad y la rapidez que muchos esperamos”.

Acá en Bogotá, el establishment-elites neoliberales ya han empezado a atacar esta mediación del Vaticano.

Por ejemplo, el diario “El Nuevo Siglo” (2) escribió que “No creo que el mandatario hubiese informado a los voceros del Eln que le formularía esa petición al Papa, pienso que la Iglesia Católica no accederá a un encuentro de tal naturaleza en el presente caso ni en cuanto concierne a conflictos como los de Israel y Hamas, por ejemplo. Imprudente la solicitud de la cual tampoco se encontraba enterado el Cardenal José Luis Rueda Aparicio ni el Nuncio Apostólico en Colombia, monseñor Paolo Rudelli, observamos que el protocolo en el gobierno del Pacto Histórico sobra. ¿No habría sido necesario informar al gobierno italiano?”.

Una fuente que pide no ser identificada por razones de seguridad, me ha explicado que “el silencio del Comando Central del ELN solo puede significar dos cosas. Que sí está contemplando retomar las tratativas y cambiar de sede, o que hay una mediación fuerte de la Iglesia Católica, otros sectores y hasta de países amigos o acompañantes del proceso que está avanzada y se le quiere dar el suficiente espacio para ver si fructifica. Esas dos circunstancias pueden explicar porque no hubo un portazo inmediato a la propuesta de Petro tras su reunión con el Papa León XIV hace casi dos semanas”.

Tania Luna, directora del Doctorado en Ciencias Jurídicas de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, explicó que el Vaticano no solo tiene la legitimidad, sino también la capacidad logística y simbólica para desempeñar un rol clave en una mediación con el Eln. “En términos de viabilidad, SI, es posible. El Vaticano tiene una de las redes diplomáticas más grandes del mundo, con autoridad moral y capacidad de movilizar a millones de fieles. Además, históricamente ha jugado un papel importante en la mediación entre Estados, sobre todo desde una perspectiva de derechos humanos. Sin embargo, la pregunta clave no es si puede hacerlo, sino que se va a mediar y sobre qué base”, detallo Tania Luna a El Tiempo.

Ahora la diplomacia de la Santa Sede puede ser caracterizada por “prudente” …Hay que mencionar que el Cardenal Pietro Parolin está al frente de la Secretaria de Estado del Vaticano, fue nuncio del Papa en Venezuela durante el gobierno del comandante Hugo Chávez. Conoce muy bien esa realidad, la del gobierno bolivariano venezolano y también la realidad de la guerrilla del Eln en la frontera. Por eso, la actitud del Cardenal Parolin - es heredero del bergoglismo y con ganas de continuar con la agenda católico-progresista del cardenal Silvestrini y del cardenal Agostino Casaroli, con quien colaboró estrechamente en la realización de la Ostpolitik – seguirá siendo prudente.

Otro actor estratégico (ya experimentado durante los diálogos con la Farc) es “la diplomacia del Trastevere” animada por la comunidad internacional de Sant’Egidio.

Al respecto, el ex viceministro italiano de la cooperación internacional, Mario Giro (que el día 26 de septiembre de 2016 representó el gobierno italiano en Cartagena en la firma de los acuerdos de paz con las Farc) ha señalado que “el domingo 18 de mayo el presidente de la República de Colombia, Gustavo Petro, visitó la Comunidad de Sant’Egidio. Durante el largo encuentro que mantuvo con algunos responsables de la Comunidad, además de hablar de varios temas asociados a la colaboración y al desarrollo de iniciativas en el ámbito social y cultural, abordó especialmente el problema de cómo agilizar la reanudación del Proceso de paz de Colombia”.

Un representante de la Comunidad Sant’Egidio ha encontrado el Presidente Maduro en Caracas, después de la muerte del Papa Francisco, que me ha comentado: “El Presidente Maduro tenía una relación directa con papa Bergoglio, hay mucha popularidad del Papa Francisco en Venezuela, donde mucha gente ha llorado su muerte. El sucesor de Hugo Chávez reconoce la relevancia de la Iglesia Católica en el país y de la necesidad de colaborar con las autoridades eclesiales, comprometidas a facilitar caminos de dialogo, como ya ha pasado en Chile y en Polonia.

Hemos logrado la liberación del italo-venezuelano Schiavo, que estaba detenido en Caracas desde hace cinco años. El indulto fue una señal de abertura del Presidente Maduro y lo agradezco por eso. Con Maduro he hablado de varias cosas, como la liberación de Schiavo, la situación de los presos políticos y la crisis del país”.

También la sociedad civil en Bogotá está trabajando sobre estos temas, inspirados por las palabras del Papa Prevost del pasado 17 de mayo de 2025: “las personas comprometidas con la mejora de la sociedad, los movimientos populares y las organizaciones católicas de trabajadores son expresión de las periferias existenciales en las que la esperanza resiste y siembre brota de nuevo. Hagan que se escuche la voz de los pobres”.

Al respecto, la lucha por la defensa de los derechos humanos, de la economía campesina, de la participación y construcción del poder popular, para construir paz en las zonas rurales del Catatumbo, como expresión de la teología del pueblo, en su versión campesina, sigue inspirándose en el Papa Francisco, que afirmó: “Para conseguir la paz, se necesita mucho valor, mucho más que para hacer la guerra. Se necesita valor para decir SI al encuentro y NO al enfrentamiento, SI al dialogo y NO a la violencia, SI a la negociación y NO a la hostilidad, SI al respeto de los pactos y NO a las provocaciones, SI a la sinceridad, y NO a la doblez. Para todo esto se necesita valor, una gran fuerza de ánimo”.

El fracaso estatal del ICBF (ministerio del welfare en otros países) versus el protagonismo infantil de Malala

Carlos Medina Gallego - profesor de la Facultad de Derecho, Ciencias Políticas y Sociales de la Universidad Nacional de Colombia (UNAL), ha evidenciado que “lejos de una agenda popular, el ELN ha convertido el secuestro, la extorsión, la minería ilegal y su relación ambigua con el narcotráfico en los pilares de su sostenimiento territorial y militar. Dicen combatir el narcotráfico, pero lo administran en regiones enteras: cobran gramajes por el procesamiento de la hoja de coca, controlan rutas, negocian con narcos locales y manejan corredores fronterizos como el Catatumbo, la tercera región con más cultivos de coca (43.867 hectáreas en 2023), con una eficacia que nada tiene de revolucionaria y sí mucho de empresa criminal. 

En los últimos años el ELN ha expandido su presencia en regiones estratégicas para el narcotráfico. Por ejemplo, en la región del Catatumbo, que produce alrededor del 15 % de la coca de Colombia, el ELN y otros grupos armados han protagonizado enfrentamientos violentos por el control de los cultivos de uso ilícito, la producción de clorhidrato de cocaína y las rutas del narcotráfico. Estos conflictos han dejado centenares de muertes y el desplazamiento de decenas de miles de personas. El discurso antiimperialista y de lucha por los oprimidos se ha sustituido por una racionalidad mafiosa que acumula capital en comandancias específicas que concentran el control de los recursos y los territorios. La guerra del ELN ya no es política: es una guerra por el control de las rentas ilegales disfrazada de causa popular. La lucha de clases ha sido reemplazada por una lucha de clanes armados por la captura de economías ilícitas.

El caso del Catatumbo es revelador. En esa región el ELN ha desplegado una estrategia de aniquilamiento contra el Frente 33 de las disidencias de las FARC, en nombre de una supuesta limpieza ideológica y de defensa de la población, que dejó 147 muertos y el desplazamiento forzado de más de 50.000 personas para asegurar el dominio exclusivo del territorio y las rentas derivadas del narcotráfico y la minería ilegal. El exterminio del adversario no se hace para consolidar un proceso de paz sino para eliminar la competencia en un negocio criminal en expansión, unido a un proceso de repoblamiento con comunidades afines venidas de otras regiones del país.

Las consecuencias para la población civil son brutales: comunidades sometidas a presiones cruzadas como en los paros armados del Chocó (dos en 2025 en la región del San Juan y el Bajo Baudó); 26 niños reclutados entre 2024 y 2025 según la Defensoría del Pueblo; campesinos extorsionados; amenazas constantes; movilidad restringida y una imposición autoritaria que ahoga cualquier posibilidad de autonomía local. En nombre de una supuesta revolución, el ELN somete a las poblaciones con prácticas que imitan, y en algunos casos superan, las lógicas del paramilitarismo”, concluyo el profesor Medina.

En entrevista con El Espectador, Andrey Avendaño, miembro del equipo negociador del Estado Mayor de Bloques y Frente (EMBF) en el proceso con el Gobierno y jefe del Frente 33, habló desde Catatumbo sobre la crueldad de la guerra, afirmando que “hay días en los que nos han mandado más de 50 bombas por día a los lugares donde estamos nosotros y viceversa, porque también nosotros los utilizamos, no lo podemos negar. Esa es la dinámica de la guerra hoy en el Catatumbo, en la mayoría del territorio nacional. La dinámica de la guerra de hoy hace que usted se convierta en presa fácil del otro. Eso lo operan dos personas que van en una moto y desde el dron tiran cuatro o cinco granadas, se mueven de sitio y vuelven y hacen la misma operación. Es una guerra demasiadamente peligrosa porque el ELN utiliza las viviendas de la población civil para refugiarse y se debe verificar que no haya civiles para atacar.

(…) Y en el tema de los menores de edad nosotros hemos sido muy enfáticos en que tenemos que buscar una alternativa y todas las posibilidades para que los jóvenes no tengan que recurrir a la violencia y mucho menos estar con armas sobre sus hombros. En la actualidad dentro de las filas frente 33 quedan muy poquitos menores de edad. No podemos darles la espalda a ellos porque muchos de los que están han sido los familiares los que nos los entregaron para que los ayudáramos a formar. No podríamos ser irresponsables y dejarlos botados. No podemos repetir los errores del pasado. En el 2016 los menores los entregaron a Bienestar Familiar y terminaron por allá trabajando en los paramilitares o de raspachines. Queremos que tengan alternativas de estudiar. Hace poco entregamos cuatro muchachas al CICR y a la MAPP OEA y a las 2 horas estaban de regreso a los campamentos” (3), ha concluido Andrey Avendaño.

¿Cómo el protagonismo de los niños, niñas y adolescentes puede desafiar el conflicto armado?

Este articulo representa una actualización del anterior reportaje “Atravesado por las pequeñas 'Malalas' del Catatumbo, el presidente Gustavo Petro propone al Papa reactivar los diálogos de paz con el ELN en el Vaticano” (4) – que ha sido difundido por el diputado italiano Paolo Ciani (vicesecretario del Partido Democrático –Demos),  del articulo “Por qué el Movimiento por la Paz rechaza las propuestas de la lideresa indígena y Senadora Aida Quilcue de enfocarse en el reclutamiento forzado de niños/as?”(5), que serán presentados en la X Conferencia Latinoamericana y Caribeña de Ciencias Sociales CLACSO2025 “Horizontes y transformaciones para la igualdad - Democracias, resistencias, comunidades, derechos y paz” (en Bogotá, del 9 al 12 de junio de 2025).

María Fernanda (nombre ficticio), la Malala del Catatumbo, ha agregado que “en los sectores rurales de un país señalado por el conflicto, como lo es Colombia, la búsqueda de la Paz, se basa de forma pacífica desde la transformación del pensamiento educativo que aporta a la incidencia protagónica por la igualdad y la equidad en la defensa de los derechos de hombres y mujeres.

Gracias por la comprensión a la realidad de una persona, a la que la vida, le ha permitido el sentir por la defensa de los derechos. También agradezco el valor que le das a la resiliencia para resaltar el coraje a una persona del común que trata contrarrestar a través de la defensa de los derechos la violencia en diferentes sectores del Catatumbo. yo trato de que estos procesos tengan un sentido más humano, ya que nosotros en el territorio promovemos la paz y la igualdad de los derechos salvaguardando nuestro proceso de formación con los niños, niñas y adolescentes”.

Para entender estas categorías del protagonismo infantil, es útil el libro del académico de la Universidad de Berlin, Manfred Liebel, “Infancias dignas, o cómo descolonializarse, Ed. Ifejant. Lima, 2020” (descargar el libro aquí (6).

En este libro, se presentan pensamientos postcoloniales críticos, y se muestra de qué manera se pueden aprovechar para la investigación de las infancias de hoy. Con ejemplos concretos, se muestra cómo las y los niños tanto del Sur como del Norte Global se ven afectados de las relaciones de poder desiguales postcoloniales, cómo las enfrentan en la vida cotidiana, y cómo surgen nuevas formas de infancia y su agencia. Se presta especial atención a los movimientos sociales liderados por niños, niñas y adolescentes (NATs), la importancia y los dilemas de los derechos de la infancia, y cómo sus prácticas disputan el paternalismo heredado del colonialismo.

Concluyo este artículo con el pedido de varias organizaciones sociales de niños, niñas y adolescentes del Catatumbo: “Solicitamos al gobierno nacional la NO militarización de la región del Catatumbo ya que esto traería una profundización del conflicto, y por ende del desplazamiento y el derramamiento de más sangre en nuestros campos y veredas, y que por el contrario la presencia del Estado se sienta con inversión social para construir escuelas, hospitales, vías, acueductos y demás acciones que busque resarcir la ausencia del estado que durante décadas ha tenido en el olvido esta región.

Solicitamos a los distintos actores armados y al Gobierno Nacional reactivar las mesas de diálogo para poner fin al reclutamiento y utilización de menores de edad en el marco del actual conflicto. Es importante que estas mesas de diálogo cuenten con la participación de la sociedad civil para llegar a un pronto acuerdo que ponga fin al actual conflicto y que estructure las bases para la ejecución del “Pacto Catatumbo” como única apuesta para la consolidación de la Paz Total”.

NOTAS

[1] chrome-extension://efaidnbmnnnibpcajpcglclefindmkaj/https://dev.comisiondeconciliacion.co/wp-content/uploads/2021/05/DEJA-DE-CORRER-LA-RECONCILIACI%C3%93N-DESDE-LAS-VICTIMAS_compressed.pdf

[2]https://www.elnuevosiglo.com.co/columnistas/el-eln-en-el-vaticano

[3]https://www.elespectador.com/colombia-20/paz-y-memoria/zona-de-ubicacion-en-catatumbo-andrey-avendano-jefe-disidente-del-frente-33-del-embf-advierte-ataques-del-eln/

[4]https://www.sur.org.co/atravesado-por-las-pequenas-malalas-del-catatumbo-el-presidente-gustavo-petro-propone-al-papa-reactivar-los-dialogos-de-paz-con-el-eln-en-el-vaticano/

[5]Morsolin C. ¿Por qué el Movimiento por la Paz rechaza las propuestas de la lideresa indígena y Senadora Aida Quilcue de enfocarse en el reclutamiento forzado de niños/as? - https://www.sur.org.co/por-que-el-congreso-nacional-de-paz-rechaza-las-propuestas-de-la-lideresa-indigena-y-senadora-aida-quilcue-de-enfocarse-en-el-reclutamiento-forzado-de-ninos-as/  - Agradezco el respaldo de la ex ministra Carolina Corcho.

[6]https://otrasvoceseneducacion.org/wp-content/uploads/2020/05/Infancias-dignas_texto-completo.pdf

*Cristiano Morsolin, investigador y trabajador social italiano radicado en Latinoamérica desde 2001, autor de 10 libros en 5 idiomas. Analiza las relaciones entre derechos humanos, movimientos sociales, políticas emancipadoras y la geopolítica de Papa Francisco. Fue recibido por el Papa Francisco en audiencia en Vaticano en octubre de 2017. Co-fundador del Observatorio sobre la Región Andina SELVAS (Milán, 2001), del Observatorio sobre las mafias “Liberande” (promovido por la red LIBERA, Roma, 2007). Es comentarista invitado por los mass-media internacionales: SIR-Servizio Informazioni Religiose (Vaticano), Religión Digital (Madrid), Cipsi (Roma), Vita (Milán), Corporación Latinoamericana Sur (Bogotá). Colabora con el Instituto de paz IPAZDE de la Universidad Santo Tomas de Bogotá. Su último libro: “Nunca Mas Estado Genocida. El boicot europeo en contra de las armas y de las mafias de Colombia” (Ediciones Antropos, 2023, comentario final del Cardenal Michael Czerny).  30-05-2025