(AICA).- Del 2 al 4 de junio se llevó a cabo el Encuentro Nacional de Sacerdotes de las Villas y Barrios Populares de la Familia Grande del Hogar de Cristo en la casa de ejercicios espirituales Mama Antula, en la ciudad de Buenos Aires.
Durante tres días, los curas villeros compartieron momentos de oración, reflexión y fraternidad pastoral. La actividad comenzó con un repaso del magisterio del papa Francisco, destacando sus gestos y mensajes surgidos desde las periferias, y su insistencia en una Iglesia abierta a todos.
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Uno de los temas centrales fue la fuerza de la piedad popular y su expresión en los barrios, con referencia al Documento de Aparecida y Evangelii gaudium. También se valoró el rol de los centros barriales como espacios comunitarios donde se desarrolla una pastoral centrada en el encuentro.
En trabajos por regiones, los sacerdotes compartieron experiencias de los dispositivos del Hogar de Cristo en distintas diócesis, destacando el acompañamiento a procesos comunitarios en contextos de vulnerabilidad.
La misa del segundo día fue presidida por el obispo emérito de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, quien instó a los curas a mantener la cercanía con el pueblo, guiados por la creatividad y la escucha.
El último día se dedicó a la lectura compartida de una carta del papa Francisco en el aniversario de la muerte del Cura de Ars, con un llamado a renovar la vocación y fortalecer los vínculos comunitarios.
El encuentro concluyó con una misa en la parroquia Cristo Obrero, en la villa 31, donde los sacerdotes reafirmaron su compromiso de caminar junto a las comunidades y seguir construyendo una Iglesia presente en las periferias.