El ex sacerdote, participante en realities televisivos, sigue presentando como cura ¿Cuáles son los puntos oscuros de los procesos contra curas acusados de abusos? El 'caso Otoniel Cruz Tirado'

El 'caso Otoniel Cruz Tirado'
El 'caso Otoniel Cruz Tirado'

El personaje no es sacerdote de la Iglesia Católica y dejó de serlo como consecuencia de una investigación por delitos contra el sexto mandamiento con un menor de edad

En su parroquia, confirman que Otoniel ya no es sacerdote, pero no se había informado a los fieles de manera abierta o directa

Muchos de los que van a ser condenados con la expulsión del estado clerical aceptan pedir ellos la renuncia... lo que implica que en su comunidad nadie sabe realmente por qué ha sido condenado

El ex sacerdote continúa mostrándose en las redes sociales como "Presbítero Católico, apostólico Ecuménico"

La protección de los menores en la Iglesia es una de las más fervientes luchas que ha emprendido el Papa Francisco y, junto a él, muchos jerarcas, clérigos, religiosos y laicos que han comprendido que el terrible flagelo de los abusos sexuales a los niños y niñas es el peor de los males que han tenido que enfrentar los creyentes en nuestro tiempo. Que nuestra Iglesia, sus eventos, sus estructuras, sus procesos y sus representantes sean realmente un Hogar Seguro para los más pequeños es una tarea inaplazable en la que deben comprometerse todos los bautizados, y en especial los consagrados que tienen responsabilidades en la dinámica del catolicismo.

Esta tarea queda incompleta si los procesos de los sacerdotes investigados, sancionados o juzgados, no son conveniente y debidamente comunicados a sus antiguas comunidades, pues en caso de que éstos elijan continuar realizando actividades similares a las de un presbítero católico, la comunidad quedaría expuesta a confusión, e incluso puesta en situación de peligro inminente de tratarse de alguien que ha cometido delitos contra la integridad y dignidad de los menores.

Nuevo perfil de FB
Nuevo perfil de FB

Tal es el caso de Otoniel Cruz Tirado, quien fue sacerdote de la diócesis de Fontibón en la ciudad de Bogotá, e incluso llegó a desempeñarse como delegado de la pastoral juvenil de la diócesis según consta en la página web de la misma (Ver: http://diocesisdefontibon.com/portal/conaljo2017/). El reconocido “Padre Oto” y quien hoy aparece enigmáticamente en su perfil de Facebook como “Odarit Leinoto” (Ver foto de perfil en Facebok), aunque en su página de la misma red social aún conserve el “Padre Otoniel Cruz Tirado” (Ver foto página de Facebook), no es sacerdote de la Iglesia Católica y dejó de serlo como consecuencia de una investigación por delitos contra el sexto mandamiento con un menor de edad.

Foto de Información Facebook
Foto de Información Facebook

En ocasiones los casos de sacerdotes que son acusados de abusos sexuales a menores culminan con la expulsión del estado clerical de aquellos que han sido encontrados culpables en un juicio canónico, pero en otros casos, cuando se inician las investigaciones preliminares, los acusados aceptan solicitar la dimisión o dispensa del estado clerical, como un procedimiento similar a la “sentencia anticipada” de los procesos penales, en los que se asume la pena que conllevaría canónicamente el proceso, en este caso: ser expulsado del sacerdocio, pero como una petición del acusado.

Otoniel Cruz Tirado fue suspendido en mayo de 2019 como consecuencia de una investigación preliminar por estos hechos, que fueron conocidos por otros sacerdotes de la diócesis y personas cercanas a la parroquia, y tras acogerse a esta “sentencia anticipada” solicitó la dispensa de sus compromisos sacerdotales, dispensa que le fue concedida en diciembre de 2019, con lo que se dio por terminado el proceso canónico.

Así lo expresa el tribunal eclesiástico de la diócesis:

“El padre Otoniel Cruz fue suspendido del estado clerical por el obispo de Fontibón desde mayo de 2019. El padre Otoniel solicito la dispensa clerical a la santa sede y ya le fue concedida por el santo padre.

Es decir el Padre Otoniel ya no es sacerdote de la iglesia católica. El padre Otoniel cortó cualquier comunicación con la iglesia católica y no hay ningún contacto con él”.

Sin embargo este hombre, que alcanzó cierto reconocimiento en la ciudad por haber participado en un reality show de canto, e incluso haber participado como intérprete musical en los actos llevados a cabo en la visita del Papa Francisco al país, se identifica en su perfil de Facebook como alguien que trabaja en la parroquia San Efrén y que estudió en el Seminario Mayor de Bogotá, información que con seguridad logra engañar a los seguidores que no conocen la situación sucedida (Muchos de sus contactos en Facebook son líderes y músicos católicos).

En sus redes sociales continúa haciendo misas, llevando a cabo toda clase de actividades aparentemente pastorales, y comparte con frecuencia información del Papa Francisco, de la diócesis, de otros grupos católicos, o antiguas publicaciones de la parroquia a la que perteneció.

Cuando se le preguntó al Tribunal Eclesiástico de la Diócesis de Fontibón por qué el tribunal no continúa la investigación tras la solicitud de dispensa del acusado, esto respondió:

"Hizo parte de una INVESTIGACIÓN PRELIMINAR que llevaría a un proceso penal canónico,  dependiendo de la posición y actitud del Padre Otoniel ante las pruebas recogidas. Al decidir él pedir la dispensa y el Papa  habérsela concedido, el proceso eclesiástico contra el Padre Otoniel termina. Y si no hubiese dispensa el proceso eclesiástico terminaría con la expulsión del estado clerical y otras penas contempladas en el Derecho Canónico...  Y lo que corresponde a la autoridad civil, la iglesia informó a su debido tiempo a las instancias civiles pertinentes y allí darán información de sus procesos y actuaciones....” (sic)

Cuando consultamos con la Parroquia San Efrén, el Párroco, padre Humberto Toro nos confirmó que Otoniel Cruz Tirado no tiene ninguna relación con la parroquia, y que ya no es sacerdote. Cuando se le preguntó qué tipo de información había recibido la comunidad sobre el caso de quien fuera su antiguo presbítero, expresó que se les había comunicado a los miembros del consejo parroquial y encargados de grupos parroquiales, pero que no se había informado a los fieles de manera abierta o directa.

El ex sacerdote, dando misa
El ex sacerdote, dando misa

Sucede que al concluir la investigación y proceso con la dispensa de Roma, bien podría el acusado afirmar que su separación del clero es fruto de una decisión personal y una revisión de su propia vocación que nada tiene que ver con ningún tipo de dificultad canónica.

Incluso, puede que se dé el caso de que un hombre que perteneció al clero y recibió dispensa como consecuencia de una investigación por delitos canónicos, use esa dispensa como coartada de su versión para continuar desempeñando un rol activo como guía espiritual de personas que, desconociendo la situación, le conceden aún la credibilidad que tenía al ser el responsable de una parroquia, o al tener un cierto nivel de reconocimiento mediático.

Se supone que los pasos que debe seguir la diócesis en estos casos, sea que la separación del estado clerical se dé como consecuencia de un juicio canónico, o, como en el caso de Otoniel Cruz, por la solicitud de la dispensa como forma de asumir responsabilidad por los hechos; es comunicar a las víctimas involucradas en el proceso, luego comunicar a los responsables de la parroquia, y luego a la comunidad, e incluso, en un caso como este, en el que la persona tiene un cierto protagonismo mediático, hacer una explicación pública del origen de la dispensa solicitada por el acusado. Esto para promover tanto la protección de la comunidad como la de posibles nuevas víctimas.

No encontramos en la respuesta de la parroquia San Efrén, ni en la respuesta del Tribunal Eclesiástico, ni en las noticias de la página de la diócesis, ninguna referencia a una comunicación explícita a la comunidad sobre la pérdida del estado clerical de Otoniel Cruz Tirado, ni una referencia a la investigación preliminar de la que fue objeto y que no continúo por la solicitud de dispensa como se ha explicado. Tampoco se encuentra rastro digital de ningún tipo de información sobre este caso en noticias de la Iglesia en Colombia, lo que le ha permitido al señor “Odarit Leinoto” continuar con aparente normalidad su actividad como presbítero sin ofrecer claridad a quienes son sus seguidores en redes sociales o en estas actividades, sobre su estado frente a la Iglesia Católica, y solo confundir con un extraño título de “Presbítero Católico, apostólico Ecuménico” en sus perfiles de redes sociales (Ver foto de su información en Facebook).

Es preciso aclarar que contra el Señor Otoniel Cruz no cursa ningún proceso penal, porque según versiones de las personas de la diócesis que conocieron el caso y que pidieron reserva en su identidad, el caso por el que se investigó preliminarmente en el proceso canónico, culminó en la parte penal sin cargos, ya que la familia de la persona involucrada habría accedido a reconocer que la relación con la menor de edad fue consentida, relación de la que habría nacido un hijo. Y aunque se espera que otras posibles víctimas que en algún momento habrían expresado su deseo de colaborar con otros testimonios presenten sus denuncias, ciertos fundados temores no les han permitido llevar a cabo el respectivo proceso.

El obispo de Fontibón

En nuestro seguimiento a este caso no fue posible establecer comunicación con Monseñor Juan Vicente Córdoba, Obispo de la Diócesis de Fontibón, aunque se le comunicó tanto por medio de la parroquia como del tribunal eclesiástico el deseo de conversar con él sobre este caso. Sería sumamente pertinente que la comunidad, no solo parroquial sino digital, que en algún momento tuvo cercanía con Otoniel Cruz, fuera enterada de la causa de la investigación y la consecutiva petición de dispensa, de modo que cada creyente pueda tomar decisiones con criterio sobre si acompañar o no a este personaje en su rol de aparente presbítero de una nueva iglesia “católica apostólica ecuménica” inventada para casos como el suyo. Se enseña que las penas del derecho canónico tienen como finalidad la reducción de los daños y la prevención de los escándalos, pues bien, en el griego bíblico el escándalo del que debemos proteger a los pequeños no es que conozcan la identidad de un impostor, sino que les sucedan cosas que les hagan imposible la fe.

Es muy difícil creer que la intención de la Iglesia en Colombia de ser un Hogar Seguro es legítima y auténtica, si se expone a los fieles a casos como éste por una inexplicable falta de comunicación entre la jerarquía y el pueblo.

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