27 de Febrero, I Sábado de Cuaresma
Oración universal
Evangelio
“Yo os digo: Amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos.” (Mt 5, 44-45)
Santos Padres:
“Cree la Iglesia que Cristo, muerto y resucitado por todos, da al hombre su luz y su fuerza por el Espíritu Santo, a fin de que pueda responder a su máxima vocación, y que no ha sido dado bajo el cielo a la humanidad otro nombre en el que haya de encontrar la salvación” (Vaticano II, GS 10).
Consideraciones
- - Nadie queda fuera del ofrecimiento divino redentor. El Creador es solidario de todas las criaturas, y su Hijo, revelación suprema de Dios, ha venido para salvar y redimir a toda la humanidad.
- - Jesús no hace acepción de personas -«Maestro, sabemos que hablas y enseñas con rectitud y no tienes acepción de personas, sino que enseñas según verdad el camino de Dios (Lc 20, 21).
- - Debemos rezar por los que nos gobiernan: “Ruego, pues, lo primero de todo, que se hagan súplicas, oraciones, peticiones, acciones de gracias, por toda la humanidad, por los reyes y por todos los constituidos en autoridad, para que podamos llevar una vida tranquila y sosegada, con toda piedad y respeto.” (1Tm 2, 1-2)
Propuesta
¿Te atreves a rezar por los que te caen mal?