“Que los progresos en el desarrollo de formas de inteligencia artificial contribuyan a la causa de la fraternidad humana y de la paz” (Mensaje del Papa 2023) Vivir en Amor y en Libertad es la plenitud del tiempo que inaugura Jesús

Santa María, Madre de Dios. Jornada Mundial de la Paz (2ª lect. 01.01.2024)

Comentario: “Ya no eres esclavo sino hijo” (Gál 4, 4-7)

Único texto de Pablo, y más antiguo del Nuevo Testamento, que cita a la madre de Jesús. Texto cristológico sobre el inicio humano de Jesús. Pablo lo enmarca como irrupción de un tiempo nuevo: “Cuando llegó la plenitud(pléroma) del tiempo, envióDios a su Hijo”. “Pléroma” significa plenitud (a veces del ser divino), cumplimiento, tiempo debido, consumación, realización, totalidad.. Algunos comentaristas lo refieren a la Pax Romana, plenitud del imperio romano. De hecho algunos autores de los primeros siglos (Eusebio de Cesarea, Agustín de Hipona y otros) creyeron revelación divina sucesos o textos paganos, como la égloga IV de Virgilio: “Viene ya el tiempo marcado por la Sibila/ Una edad nueva toda, va a nacer una edad grande/ Ya nos viene la Virgen, y las leyes de Saturno/ Y el cielo nos manda una raza nueva/ Bendiga, casta Lucina, un niño que va a nacer/ Que la edad de hierro debe transformar en edad de oro…”. Valoran el tiempo y la historia que hacen viables hechos con más posibilidades de éxito.

El términopléroma” tiene en Pablo sentido teológico más que histórico. Tiene su origen en la literatura apocalíptica, que intenta intuir y preparar el futuro. La encarnación cumple el proyecto de Dios, que se realiza en tiempo oportuno, en “tiempo debido”, como apunta la carta a los Efesios: “dándonos a conocer el misterio de su voluntad: el plan que había proyectado realizar por Cristo, en la plenitud de los tiempos: recapitular en Cristo todas las cosas del cielo y de la tierra” (Ef 1,9-10). Así lo expresa también san León Magno (s. V): “La plenitud de los tiempos establecidos por los inescrutables y supremos designios divinos” (Oficio de lecturas. 2ª. Natividad).

Pablo divide la historia en antes y después de Jesús. Los judíos han estado sometidos a la Ley (“bajo tutores y administradores”) y los no judíos a “los elementos del mundo” (4,1-3). Es una época nueva: la época del Hijo, época de la libertad de los hijos de Dios. Esta vivencia marca la vida de Jesús, ungido y guiado por el Espíritu de Amor.

Nacido de mujer, nacido bajo la ley. Verdadero ser humano, grande y limitado, sano y enfermo, necesitado, tentado... También la Ley es una determinación cultural importante, que supondrá en ocasiones un impedimento para el Espíritu del Padre, que es Amor. Desde la libertad, guiada por el Amor, Jesús superará la Ley y orientará su conducta en favor de sus hermanos.

Quienes creen en Jesús se creen adoptados como hijos de Dios, reciben su mismo Espíritu que les hace llamar “¡Padre!” a Dios. “Ya no eres esclavo, sino hijo; y si eres hijo, eres también heredero por voluntad de Dios”. Esta buena noticia es presentada como “rescate” o “liberación” (exagorádso: sacar de la plaza pública, del mercado, del sometimiento a la oferta y demanda; no se vende, poder disponer de sí, ser libre).

Al creer en el amor incondicional de Dios, entramos en una situación nueva: somos hijos de Dios. Todos con la misma dignidad, libres para construir una vida digna de los hijos de Dios. No es la fuerza bruta quien debe organizarnos. Hay que dialogar y construir desde abajo la fraternidad. Así empezó Jesús llamando a personas que quisieran vivir sin violencia, sin acumular egoístamente, sin creerse superiores, compartiendo lo que tienen, curando y alimentando a todos. Vivir en Amor y en Libertad es la plenitud de los tiempos que inaugura Jesús.

El mensaje del Papa para la Jornada Mundial de la Paz incluye en estas ideas: “El progreso de la ciencia y de la tecnología debe ser camino hacia la paz. El futuro de la inteligencia artificial discurre entre promesas y riesgos. La tecnología del futuro... no es garantía de confiabilidad. Fin y significado de sus operaciones continuarán siendo determinadas o habilitadas por seres humanos que tienen un propio universo de valores. El riesgo es que los criterios que están en la base de ciertas decisiones se vuelvan menos transparentes, que la responsabilidad decisional se oculte y que los productores puedan eludir la obligación de actuar por el bien de la comunidad. Temas candentes para la ética: el respeto fundamental por la dignidad humana postula rechazar que la singularidad de la persona sea identificada con un conjunto de datos... ¿Transformaremos las espadas en arados?... Desafíos para la educación. Desafíos para el desarrollo del derecho internacional. Espero que esta reflexión anime a hacer que los progresos en el desarrollo de formas de inteligencia artificial contribuyan, en última instancia, a la causa de la fraternidad humana y de la paz”.

Oración: “ya no eres esclavo sino hijo” (Gál 4, 4-7)

Jesús, Hijo de Dios, nacido de mujer, libertador de todos:

en la octava de Navidad, miramos a tu madre, María de Nazaret;

ella y José te van integrando en las instituciones populares:

eres circuncidado y te asignan un nombre.

Hoy también celebramos el inicio del año en occidente:

renovamos los deseos de paz para todo el mundo;

el Papa Francisco nos invita a construir la paz:  

“Que la  inteligencia artificial contribuyan a la causa

de la fraternidad humana y de la paz”.

Inspiramos hoy la oración en la carta de Pablo a los Gálatas:

tu venida inicia “el tiempo de plenitud”;

es la época del Hijo de Dios, enviado a todos;

tú, Jesús, eres el Hijo del Padre, con su mismo Espíritu;

vives nuestra vida desde el amor del Padre;

aceptas nuestro mundo como casa de los hijos del Padre.

Como nosotros, “naces de mujer”, de María de Nazaret:

una mujer que comparte tu mismo “Dios”:

- que se fija en la humillación,

- que da su corazón a todos, incluso al miserable;

- que quiere que nadie pase hambre;

- que no quiere que existan arrogantes y poderosos;

- que trabaja con los que procuran la felicidad de todos.

Como nosotros, “naces sometido a la Ley” de tu pueblo:

peregrinas al templo, te circuncidan, te nombran Jesús...;

tu conciencia de Hijo de Dios trasciende la ley y el templo;

lo importante para ti es la vida humana:

- su dignidad de hijos del Padre,

- su alimentación y salud,

- su libertad y su dicha.

Toda ley o religión que perjudica la vida:

no puede venir del Amor del Padre,

- que no quiere la separación y el enfrentamiento,

- que no fomenta la intolerancia y la violencia...

Tu libertad ante el templo y la ley surgedel Amor:

que respeta la dignidad personal;

que renuncia a la venganza, al insulto;

que sostiene la igualdad de derechos de la mujer;

que propone el amor al enemigo, al extranjero, al pecador;

que rechaza la acumulación egoísta de riqueza;

que trata con todos: publicanos, pecadores, infieles, prostitutas, mujeres...;

que quebranta el sábado para curar enfermos, quitar el hambre...

Jesús, Hijo de Dios, hijo de María, hermano de todos:

queremos compartir tu misión;

ponemos nuestros bienes y talento al servicio de tu reino;

nos comprometemos a “ser sujetos creativos en la Iglesia y la sociedad”.

aceptamos tu Espíritu de amor y perdón constante,

para trabajar por la vida y la dignidad de todos;

para acompaña en toda situación y buscar el bien;

para sembrar fraternidad, paz y alegría.

Preces de los Fieles (Santa María, Madre de Dios y Jornada Mundial de la Paz. 01.01.2024)

Hoy, primer día de 2024, miramos a María, la madre de Jesús. Ella “perseveró unánime en la oración con la primera iglesia, implorando con sus ruegos el don del Espíritu Santo” (LG 59). Con ella pedimos hoy lo mismo, diciendo: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por las comunidades cristianas:

- que alegren la vida de la sociedad por su amor y libertad;

- que en ellas haya creatividad, cooperación, fraternidad...

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por las intenciones del Papa (enero 2024):

- que “el Espíritu Santo nos ayude a reconocer los diferentes carismas en las comunidades cristianas;

- y a descubrir la riqueza de las diferentes tradiciones rituales dentro de la Iglesia Católica”.

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por los dirigentes de los pueblos:

- que sean elegidos por su valía y honradez;

- que trabajen honradamente por el bien de los ciudadanos.

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por los migrantes y refugiados:

- que sean acogidos, protegidos, promocionados...;

- que su familia sea cuidada, sobre todo los niños...

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por los países en guerra:

- que cese la barbarie, la locura de arreglar las cosas de forma inhumana;

- que seamos solidarios con la víctimas.

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por el maltrato de género:

- que cambie la mentalidad contraria a la dignidad y libertad de todo ser humano;

- que acertemos con las medidas adecuadas para evitar el maltrato y la muerte.

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Por esta celebración:

- que sintamos el Espíritu de Jesús que nos lleva a amar a toda familia;

- que nos hermane y active con la alegría de la navidad.

Roguemos al Señor: que nos dejemos llevar por tu Espíritu”.

Creemos, Señor, que nuestros dones son para el servicio de todos. Con esta mentalidad queremos vivir todo este año nuevo. Bendícenos y danos fuerza para seguir tu camino. Tú, Jesús, que vives por los siglos de los siglos.

Amen.

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