Abre los ojos y las entendederas Imprescindible para entender Adviento, Navidad y toda tu Religión

Noria
Noria

Para nada nos servirá el Adviento, ni la Navidad de fosforito si no somos capaces de escuchar desde dentro "hay que nacer de nuevo", no Jesús, sino tú, yo y todos

Por favor, abrid los ojos y las entendederas: Dios NO se puede mover. Es inmutable y perfecto, acto puro. Si no fuera así, no sería Dios. Lo tiene TODO hecho y bien hecho. Todo concedido y perdonado desde la eternidad.

Tampoco le puedes ofender. Recuerda la imagen que te mostré hace tiempo: ¿Te ofenderías porque una hormiga te saque la lengua? Ni a eso podemos llegar.

Tus errores, tus limitaciones son INEVITABLES, precisamente porque ni eres, ni puedes ser como Dios.

Lo que realmente te perjudica es el estancamiento, el enanismo, el no desarrollar tus facultades superiores, empezando por las básicas: INTELIGENCIA, VOLUNTAD y LIBERTAD. 

Creemos. Crecemos. Contigo

Dios
Dios

Es inútil insistir en pedir perdón. Todo está perdonado desde la eternidad donde Dios habita fuera del tiempo. Por eso la instaurada "Redención por la sangre" es una mentirota de origen humano y judío, que no nos conduce al Abba, sino a un "dios sádico" que asusta e incita a la rebelión o a la huida. ¡Vaya manera tan incoherente de hacer discípulos! ¡Vaya forma de cumplir ser "pescadores de hombres" espantando al personal!

Mejor pide perdón a quien ofendiste o a ti mismo por tirar piedras en tu propio tejado. Aumenta tu autoestima y apóyate en los tesoros que llevas dentro, regalos de Dios, para caminar con equilibrio y solidez. Rectifica continuamente tu conducta, como cuando conduces tu coche. Soltar el volante te puede costar la vida.

Es inútil utilizar intermediarios por muy santos que hayan sido.

Es inútil implorar a la Madre de Jesús que utilice sus poderes, porque NO los tiene.

María
María

Es tan humana como tú, por mucho que la vistan de folclórica o emperadora. De ella solo podemos recibir cariño y ejemplo, lo mismo que recibió Jesús.

En nuestra Iglesia estamos viviendo, de hecho, una irracional, larguísima y monumental "comedia piadosa" que dura siglos.

Nuestros Curas salen idiotizados por una "formación rígida, obsoleta y ciega". La mayoría son como niños buenos dando vueltas y vueltas por una enorme "torre de Babel" de libros viejos e ideas caducadas, sin acertar a contagiar luz, vida y libertad. Pero, claro, ellos piensan que el "hereje idiota" soy yo. Perdonados están. Los ciegos no pueden ver, ni verse.

¿Por qué todo eso? Porque nos han encerrado en una falsa "Religión Pasiva" en la que TODO consiste en querer obtener de Dios lo que debemos conseguir nosotros mismos. ¿O conoces a algún agricultor que obtenga patatas pidiéndoselas al cielo?

Hombre-avestruz
Hombre-avestruz

No basta creer en un Dios. Es imprescindible indagar meditando (buscando en tu interior) "Quién es y cómo es Dios", porque Él se revela a los que lo buscan. Y hay que rechazar la tentación de identificarle con ÍDOLOS varios, hechuras humanas, impuestos incluso por guías erráticos

O nos pasamos a la "Religión Activa" aceptando conscientemente que somos nosotros los que debemos movernos, construir, crecer, progresar y cambiar el mundo, o todo seguirá igual o peor.

El "convertíos" de Juan y abandonad la inmoralidad es solo el inicio. Detrás llegó la LUZ y la ENERGÍA de Jesús para enseñarnos el "Camino de Humanidad" que seguimos olvidando.

Rezando
Rezando

Nos conducimos como "asnos de noria" que ni ven (les tapan los ojos), ni piensan, ni saben dónde van. Solo damos vueltas y vueltas a las "rutinas impuestas" por gurús irracionales (colgados de la arrugada vejez de los siglos), que nos exigen creer que atados a un largo palo giratorio conservamos la unidad y seguimos a Jesús.

Para nada nos servirá el Adviento, ni la Navidad de fosforito si no somos capaces de escuchar desde dentro "hay que nacer de nuevo", no Jesús, sino tú, yo y todos.

Noria
Noria

A ver si consigues ser de verdad tú mismo, el "dios pequeñito" que llevas en tus entrañas.

Ése que quizás ni siquiera tienes sobre un pesebre, sino abandonado en un rincón de la cuadra de tu vida.

Os deseo LUZ, mucha LUZ. La de dentro.

Libros de Jairo
Libros de Jairo

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