También protestan mujeres pidiendo más participación femenina Víctimas de abusos se manifiestan frente al Vaticano en pleno Sínodo

Un grupo de personas que sufrió de abusos sexuales contra menores de parte de clérigos se manifestó este miércoles en las inmediaciones del Vaticano, mientras el Papa daba inicio a una cumbre mundial de obispos dedicada a los desafíos de la juventud en la actualidad.

Alrededor de unas 50 personas se colocaron en la plaza contigua a Castel Sant'Angelo, al inicio de una avenida que une la Plaza de San Pedro con la ciudad de Roma, mostrando carteles y fotografías alusivas a diversos casos de abuso, en su mayoría italianos.

Convocados por la alianza internacional "Fin al Abuso Clerical" (ECA, por sus siglas en inglés), los manifestantes lograron desplegar sus carteles por apenas unos 15 minutos, antes que la policía italiana les obligase a moverse de lugar.

Los uniformados les pidieron ingresar a un parque cercano, donde ya no tenían de fondo la imagen de la Basílica de San Pedro. Allí permanecieron hasta concluir la marcha pacífica.

En realidad esa no fue la única manifestación polémica al inicio de la asamblea plenaria del Sínodo de los Obispos, que fue introducida la tarde de este miércoles por el Papa Francisco con un discurso y se extenderá hasta el próximo 28 de octubre.

Del otro lado de la plaza vaticana, en la zona de ingreso de los 267 "padres sinodales", los obispos que asistieron al encuentro, un grupo de mujeres se manifestó con cánticos pidiendo más participación femenina en la Iglesia.

No más de 30 personas entonaban porras mientras muy cerca de ellas pasaban obispos y cardenales de camino al Aula Nueva del Sínodo, donde comenzaron las discusiones a puerta cerrada sobre el tema "Los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional".


"Knock, Knock! ¡Dejen a las mujeres votar...! ¡Déjenlas votar!", cantaban una y otra vez, agregando a cada repetición el nombre de un obispo o un cardenal. Con esas frases se referían a la escasa participación femenina en la asamblea sinodal, en la cual las mujeres -con presencia minoritaria- sólo tienen derecho a voz y no voto.

Mientras esas manifestaciones tenían lugar, poco a poco iban llegando hasta el Aula Nueva del Sínodo los participantes a la asamblea, que fueron recibidos con un saludo por el mismo Papa quien los recibió uno por uno con un saludo.

Sobre la marcha de las víctimas de abuso Mattias Katsch, líder de la organización "Eckiger Tish", miembro del Consejo de Sobrevivientes de Alemania y de la Alianza ECA, afirmó que ellos no son opositores a la Iglesia.

"No somos enemigos de la Iglesia, yo creo que estamos haciéndole un favor a la Iglesia, estamos mostrándole dónde las cosas andan mal y les estamos dando una oportunidad de cambiar a la Iglesia para bien", indicó, en entrevista con Notimex.

"La Iglesia tiene un papel muy importante en el mundo, sobre todo en la educación de niños y jóvenes. Para servirle bien a ellos en ser un lugar seguro. Los cambios de los cuales estamos hablando sirven para hacer de la Iglesia un lugar así", agregó.

Enumeró entre sus peticiones concretas la escucha de las víctimas, el hacer justicia para ellas, abrir los archivos eclesiásticos a investigaciones independientes y cambiar las leyes de la Iglesia para que tanto el sacerdote abusador como el obispo encubridor pierdan sus ministerios.

Reconoció que con el Papa Francisco se ha dado un avance en la materia porque él usa un "lenguaje fuerte", habla de "un sistema y de una cultura del abuso", pero "le faltan acciones" para que sea realidad una política seria de "tolerancia cero".

Más adelante aceptó que a la sociedad todavía le cuesta abordar el tema de los abusos sexuales contra menores, porque se trata de "actos horrorosos", pero consideró que la opinión pública mundial entiende que este es un problema global de la Iglesia y "en Roma está el centro".

Incluso consideró "muy probable" que en un futuro no muy lejano algunos obispos puedan terminar en prisión porque, sostuvo, "ellos forman parte del sistema" y para hablar de encubrimiento sistemático deben existir responsables de ello: sacerdotes, vicarios generales, obispos, arzobispos y cardenales.

"Queremos llamar la atención de los obispos y los expertos que llegan aquí a Roma de diversas partes del mundo para discutir de la juventud y su vocación. Queremos recordarles que cuando se habla de vocación hay que pensar también en los seminarios", indicó.

"Sabemos que muchos casos en Chile, en México, en Estados Unidos han habido ataques sexuales a jóvenes dentro de los seminarios. El abuso, la violencia sexual es un tema clave, en el centro de la Iglesia y de sus instituciones", abundó.

(RD/Agencias)


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