Extraido de "Trazos de evangelio, trozos de vida" (PPC) Las de Belorado y muchos más... O Dios o el dinero

Las de Belorado y muchos más... O Dios o el dinero
Las de Belorado y muchos más... O Dios o el dinero Jose Moreno Losada

Suma y sigue...aún continúa  la historia en los tribunales civiles, la leyenda y el escándalo público. La punta de un iceberg que vuelve a poner sobre la mesa de la historia al tentación permanente del tener y el poseer, frente al ser y la gratuidad de un vivir en la confianza y en la fraternidad... se vive en un convento y a nivel mundial con los aranceles... qué importante vivir según el Espíritu para discernir bien lo que nos conviene y lo que agrada a Dios.

XVIII DEL TIEMPO ORDINARIO

religiosas

Lucas 12,13-21

En aquel tiempo dijo uno del público a Jesús: «Maestro, dile a mi hermano que reparta conmigo la herencia». Él le contestó: «Hombre, ¿quién me ha nombrado juez o árbitro entre vosotros?».

Y dijo a la gente: «Mirad: guardaos de toda clase de codicia. Pues, aunque uno ande sobrado, su vida no depende de sus bienes».

Y les propuso una parábola: «Un hombre rico tuvo una gran cosecha. Y empezó a hacer cálculos: “¿Qué haré? No tengo donde almacenar la cosecha”. Y se dijo: “Haré lo siguiente: derribaré los graneros y construiré otros más grandes, y almacenaré allí todo el grano y el resto de mi cosecha. Y entonces me diré a mí mismo: ‘hombre, tienes bienes acumulados para muchos años; túmbate, come, bebe y date buena vida"'. Pero Dios le dijo: “Necio, esta noche te van a exigir la vida. Lo que has acumulado, ¿de quién será?” Así será el que amasa riquezas para sí y no es rico ante Dios».

La sed de tener o vivir

La confusión aconteció al comienzo. Todo había sido creado para la vida y los cauces del agua viva para saciar la sed de vivir  pasaban por la armonía, la circularidad, la comunión y el cuidado. El paraíso no era un lugar, era un modo de relación y un estilo de vivir que producía paz y bondad, que emanaba del Padre y pasaba por todas las criaturas donadas a la humanidad, para volver a Dios convertidas en alabanza y acción de gracias, en la oración feliz del ser humano satisfecho. Pero el afán de poseer y dominar la vida rompió la unidad y lo que era valle de gozo comenzó a ser valle de lágrimas por la ruptura del hombre con el hombre.  Desde ahí vino la desconexión con Dios y el enfrentamiento con todas las criaturas con el deseo de dominarlas y explotarlas, sin más horizonte que el propio ego. El individualismo insufló su espíritu y atacó lo común y lo unitario. El grito se hizo fuerte por el dolor de una herida fruto de la ceguera y el amor se hizo difícil, atacado por la envidia y el orgullo.

El que amasa riquezas para sí

Acaba de ocurrir y llena todas las páginas y pantallas de las noticias, la actitud de una comunidad de religiosas clarisas. Un grupo de 16 monjas de Belorado, en Burgos, han puesto el grito en el cielo y han decidido romper con Roma para unirse a un sacerdote que fue excomulgado en el año 2019 porque se ordenó a sí mismo obispo y fundó la 'Pía Unión del Apóstol San Pablo', una orden a la que se han adscrito estas clarisas que cerraron a cal y canto el convento para sorpresa de los fieles que pretendían este lunes ir a misa allí.

Las religiosas son conocidas por sus famosas trufas y se han rebelado al negarles la Santa Sede la posibilidad de comprar un convento en Orduña, en Bizkaia, lo que les ha llevado a preferir la excomunión y pasar a estar bajo tutela de Pablo de Rojas, rompiendo con Roma y renegando, incluso, del papa Francisco.

Orduña es, casualmente, la única localidad que tiene el título de ciudad en la provincia de Vizcaya y esta semana vuelve a estar destacada en el mapa por un polémico contrato de compraventa que unas monjas clarisas de Belorado, en Burgos, firmaron en octubre de 2020, en plena pandemia, con el objetivo de adquirir el convento del municipio por una suma de 1,2 millones de euros y una cláusula en dicho acuerdo para realizar pagos de 75.000 euros cada seis meses, pero cuando llegó el primero de ellos, dos años más tarde, no se pudo proceder por la falta del beneplácito del Vaticano para que vendieran el convento de Derio.

Este jaleo inmobiliario ha provocado una auténtica ruptura y en la Iglesia ya se habla de cisma, ya que las clarisas, que pertenecen a la orden de 'Hermanas Pobres de Santa Clara', pretenden pasar a la jurisdicción del sacerdote que fue excomulgado en 2019 porque quería nombrarse a sí mismo obispo, Pablo de Rojas. "Nos mandaron una serie de documentos a través de 'whatsApp' y nos enteramos que abandonan la Iglesia conciliar y todo lo que ello contenía, así que efectivamente estamos altamente sorprendidos e incrédulos", ha confesado el alcalde de Belorado.

La Archidiócesis de Burgos ha emitido un comunicado en el que explica que se ha puesto "en conocimiento este asunto a la Santa Sede y se procederá según sus indicaciones", pero no se queda ahí, ya que también "se exhorta" a los fieles "para que no participen en ningún acto litúrgico del monasterio de Santa Clara, en Belorado ni en el de Orduña".  El arzobispo Mario Iceta, que fue precisamente quien excomulgó a Pablo de Rojas, asegura que "se juntan varias cosas", porque "es un tema a explorar si todas dicen que quieren abandonar la Iglesia" y ha querido corregir la información de las propiedades, "porque aquí el arzobispado ni entra ni sale", según sus palabras.

Hay un problema hace ya años en el ámbito de las monjas con el tema de los bienes por cómo mantenerlos y el enfrentamiento con los arzobispados en más de un caso –aunque ninguna es igual-, que ya hemos visto. Una vez más estamos ante la radicalidad de la propuesta de Jesús que no engaña: “O Dios o el dinero, no se puede servir a dos señores”. Sin palabras.

Decrecer para crecer

"Decrecer para crecer" es un lema alternativo que para los cristianos hunde sus raíces en la estructura fundante de la construcción del Reino de Jesús de Nazaret. Las claves cristológicas de encarnación, pasión y resurrección son pilares de un modo de entender la existencia que nos invita a revisar la cultura que ha fomentado un bienestar cuestionando el bien ser. Se presentan alternativas que no van por la producción sin más, ni por el tener por tener, sino más bien por recuperar fuentes de vida que se asientan en la centralidad de lo humano y en la riqueza de la interioridad que sabe "tener menos para vivir y ser más". Creemos que hay una pobreza liberadora que enriquece, la que pone a Dios y su amor por encima del dinero y la riqueza.

 La situación actual de nuestras sociedades en crisis está siendo un aldabonazo en la conciencia personal y colectiva para recuperar lo más genuino de lo humano y de la utopía de la fraternidad. Hoy se nos está pidiendo "saber perder para ganar, arriesgar para vivir, darse para ser, empobrecernos para enriquecernos”. Las personas tocadas por el Reino tienen labor seria por la demanda de lo que llevan como tesoro en vasijas de barro. No podemos permanecer dormidos cuando la necesidad del Reino es tan acuciante: "Venga a nosotros tu Reino".

Estamos llamados a un estilo de vida y de iglesia que vibre con las inquietudes y necesidades que el mundo se está planteando - como está pidiendo el Papa Francisco-, y que las personas y colectivos más concienciados están ofreciendo como caminos alternativos y fecundos. Se trata de sumarse en la perspectiva paulina de la propiciación de los sentimientos de Cristo como fuente de vida para el mundo actual y colaborar en "el lío de la misericordia activa" que el Papa está proponiendo continuamente. De fondo está la clave cristológica: "Cristo, siendo rico, se hizo pobre para enriquecernos con su pobreza" (2 Cor 8,9).

El evangelio, en la alternativa "Dios o el dinero", nos propone vencer la tentación de la posesión como elemento de seguridad; esta opción es condición básica para poder vivir lo comunitario y ser comprometidos. Jesús habla claro cuando proclamaba que “no sólo de pan vive el hombre sino de toda palabra que sale de la boca de Dios". La seguridad del dinero, la seguridad del capital, del tener más y el currículum ("Di que estas piedras se conviertan en pan"- Mt 4,3), pueden matar la auténtica vocación y grandeza de una persona, y llevarse así lo mejor de sus sueños, en especial la dimensión comunitaria, fraterna y la capacidad de compromiso.

Jesús invita a atesorar tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni la carcoma los corroen. El texto evangélico nos avisa para que no nos vaya a pasar como aquél señor de la parábola que se pasó toda la vida almacenando y cuando creía que ya tenía lo suficiente, aquella misma noche se tuvo que ir para siempre, y no pudo llevarse nada porque todo lo que tenía era externo, donde la polilla y la carcoma sí corroen. El que es así se empobrece, pierde toda la vida que hay a su alrededor e incluso llega a ver a sus vecinos y hermanos como competidores. Jesús nos propone la alternativa de aquella mujer pobre que en el cepillo del templo echó “lo que tenía para vivir”.

Notas hilvanadas

Dinero

“Eso es lo que necesito, y quiero nada más, aparta de mi camino, hágase mi santa voluntad”

(Los punsetes- Dinero)

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