"De las espadas forjarán arados, de las lanzas, podaderas. No alzará la espada pueblo contra pueblo, no se adiestrarán para la guerra" (Is, 2,2-5) Delegaciones de migración de la provincia eclesiástica extremeña ante la masacre de Gaza

Delegaciones  de migración  de la provincia eclesiástica  extremeña ante la masacre de Gaza
Delegaciones de migración de la provincia eclesiástica extremeña ante la masacre de Gaza prensa

No podemos permanecer en silencio ante la barbarie que está aconteciendo y que mancha de sangre a la humanidad, fueta de toda justicia y dignidad. Los cristianos hemos de trabajar por la paz y por la justicia, para ser coherentes con nuestra fe. No podemos permanecer pasivos e indolentes. Queremos visibilizar el apoyo a las iniciativas que luchan por la paz y el desarme.

Oración y gestos por la paz en la frontera de Gaza (Palestina)

Participemos los cristianos en gestos vivos por la paz en Gaza

Marcha a Gaza

Desde el dolor

Las delegaciones diocesanas para la migración en la provincia eclesiástica de Mérida-Badajoz deseamos manifestar nuestro dolor e indignación ante el sufrimiento de la población en Palestina en el conflicto de Gaza. Deseamos sumamos a la manifestación púbica de la Conferencia Episcopal y de la Comisión de Justicia y Paz llamando la atención sobre este problema que preocupa a la Iglesia entera y a la humanidad. Invitamos a los cristianos católicos a unirse a los gestos proactivos que se están organizando en la ciudadanía pidiendo la paz para este conflicto en Palestina. Sentimos que la sangre de estos hermanos está gritando a nosotros desde ese suelo de conflicto y violencia (Cfr. Gn,4) y fieles al concilio que nos anima a contemplar los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de los hombres de nuestro tiempo, sobre todo de los pobres y de cuantos sufren, como propios de los discípulos de Cristo, porque todo lo humano ha de tener eco en nuestro corazón (Cfr., Gs,1).

Somos conscientes de esta “guerra mundial a plazos” donde lo humano pierde su valor ante el mercado, el dinero y el poder, y anhelamos una sociedad en paz para la convivencia, el respeto y la vivencia de los derechos humanos logrados tras siglos de proceso. No podemos ser indiferentes ni cómplices con nuestro silencio ante las guerras activas actuales.

La realidad de sufrimiento que cubre la tierra en las distintas guerras y especialmente en la querida tierra de Palestina, donde, en palabras de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, la escalada militar plantea condiciones de vida incompatibles con la supervivencia de la comunidad palestina, especialmente de la población de Gaza, donde ya están muriendo de hambre. No podemos consentir que la destrucción siga recorriendo la franja de Gaza, necesitamos justicia y paz para quienes viven en esos países, Israel y Palestina, con el respeto total a los derechos en esa tierra sagrada. No podemos olvidar ninguna víctima de ninguna guerra que hoy está sucediendo. Seríamos infieles e incoherentes con nuestra fe cristiana que nos empuja a la fraternidad y a la dignidad de lo humano.

Nos comprometemos

Queremos apoyar con gestos a la Santa Sede, junto al Papa León, para seguir disponibles para el encuentro entre los países y propiciar una mirada mutua que devuelva la esperanza a los que la tienen perdida. Necesitamos que los que ostentan el poder en estos pueblos hagan posible la paz: ¡Encontrémonos, dialoguemos, negociemos! La guerra nunca debe ser inevitable porque en ella nadie gana y todos perdemos; las armas pueden y deben callar, porque no resuelven los problemas, sino que los aumentan; porque pasarán a la historia quienes siembran la paz, no quienes cosechan víctimas.

Pedimos, de una manera urgente e inaplazable, terminar con el asedio a la población, así como con el ataque a los hospitales, con los bombardeos a la población civil, la destrucción sistemática de infraestructuras y vecindarios, y la negación de asistencia humanitaria, lo que supone una violación de los derechos humanos más básicos y del derecho internacional humanitario, actos de ocupación equivalentes a una limpieza étnica.

Reclamamos

Por eso, y por ser un imperativo para la dignidad humana, reclamamos juntos a los que harán peregrinación desde el Cairo de un modo simbólico:

Que se respete el Derecho Internacional Humanitario.

Que se permita la entrada de ayuda humanitaria sin restricciones,

Que se respete la defensa de la vida, especialmente de las personas más vulnerables, infancia, enfermas, mujeres, y se libere a todas las personas secuestradas

Que se abran corredores humanitarios para asistir a la población civil.

Que dirigentes de los Estados sigan imponiendo sanciones a los Acuerdos con quienes no respetan el derecho internacional humanitario y cese el rearme, con un embargo militar integral, en búsqueda de una paz “desarmada y desarmante”.

Que se dé fin a la guerra en Gaza, y se inicie la reconstrucción de las infraestructuras para una vida digna del propio pueblo palestino en su territorio, hasta consolidar una Paz con Justicia y reparación

«¡En un mundo dividido y herido por el odio y la guerra estamos llamados a sembrar la esperanza y a construir la paz!». Con estas palabras de nuestro Papa León XIV, hacemos un llamado a ser constructores de puentes de tolerancia, de diálogo y de plena justicia.

Con los demás colectivos por la paz

Nos unimos en oración incesante, sacrificios, limosnas y ayunos por estos hermanos, a la vez que invitamos y animamos a los cristianos de nuestras comunidades diocesanas a apoyar con su presencia los actos de solidaridad con la peregrinación desde el Cairo hasta Gaza, marcha global que se están organizando en estos días por parte de muchos colectivos ciudadanos. En especial las concentraciones que se celebrarán el Domingo día 15 en Cáceres será, en la Plaza Mayor, a las 20:00 horas; en Badajoz, frente a la Delegación del Gobierno, a las 20:30 horas; y en Mérida, en la Puerta de la Villa, a las 19:00 horas. Miajadas, a las 12 horas y Trujillo a las 20 horas.

Mérida, día 12 de Junio .

Ángel Martin Chapinal. Diocesis Coria-Cáceres

Oscar Sanmamé Guaringa. Diócesis de Plasencia.

José Moreno Losada. Diócesis Mérida-Badajoz

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