Agradecidos por el padre y la madre

Sigue en mi interior el runrún del evangelio dominical con el leproso agradecido y recuerdo dos oraciones sencillas que ese día llegaron ante Dios padre, de dos parroquianos jóvenes con motivo del cumpleaños de alguno de sus progenitores, de Manuel Coba y Juan Carlo Bru, su padre y su madre respectivamente.

En el caso de Manuel Coba, casado con María Ángeles y padre de tres hijos -Manu, Adrián, María- muy integrados en nuestra comunidad parroquial desde el ámbito catequético y de acompañamiento a jóvenes. Profesional de la enseñanza muy comprometido en su instituto, viven con sentido cristiano su vida y transmiten la alegría, el sentido y el valor. En su proceso el estilo scout le ha marcado profundamente en valores inolvidables.

Remedios, es madre de dos hijos, casada con Pedro, y es una verdadera cuidadora, ha hecho de ello el sentido de su vida, se deshace para construir a su alrededor. A mí me ha cautivado lo que ha sido el cuidado de su madre hasta los 94 años, falleció recientemente. Creo que ha sido un cuidado excelente lleno de vida y de luz, donde ha brillado más el gozo que el sacrificio, la luz que la confusión, la delicadeza y el amor que la exigencia. De ello han bebido los suyos y así lo agradece su hijo menor Juanca.

Traigo a colación la oración sincera de estos hijos ante Dios agradeciendo el don del padre y de la madre, en sus respectivos cumpleaños. Volvieron a dar gracias a Dios por este tesoro tan gratuito como bello y necesario.

Oración de los hijos: 

De Manu Coba: Por el padre

“En este domingo queremos dar gracias al Padre por todo lo bueno que tenemos cada día.   Hoy en especial doy gracias por tener una familia maravillosa que nos quiere y nos enseña a descubrir las cosas bonitas y sencillas de la vida y nos acompañan en nuestro camino de vida como cristianos.   Hoy es el cumpleaños de papá y toda la familia celebramos juntos esta gran alegría.   Gracias por ayudarnos y entendernos en los momentos difíciles.   Gracias por hacernos felices, por querernos siempre, por buscar siempre nuestra felicidad, por hacernos reír y disfrutar siempre unidos.   Gracias por enseñarnos a crecer en valores, a disfrutar de la amistad verdadera y enseñarnos a caminar en la vida con tu mismo corazón Scout, siempre listos para servir. Disfruta de tu día hoy y siempre.   Para terminar, gracias por en esta comunidad en la que todos nos sentimos como una gran familia.”

De Juan Carlos Bru: Por la madre

“Bueno. Ya le di gracias a Dios esta tarde en la eucaristía por la madre que me ha dado. Gracias, madre por ser una mujer que reúne valores de vida como el cuidado, la protección, el amor a sus hijos y seres queridos, la capacidad de acoger y de darse a los demás con transparencia y cariño. Gracias por inculcar una educación sencilla y humilde pero a la vez con tanta riqueza que no quiero otra cosa que parecerme a ti, porque eres puro corazón. Me siento muy afortunado por tenerte. Gracias Señor por Remedios Martín Luna, mi madre.”