"Descanse en paz y que Dios le conceda la paz para siempre" Cardenal Omella: "Casaldáliga es un ejemplo de hombre que quiso vivir con los pobres y que se entregó a ellos"

Casaldáliga
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La Conferencia Episcopal Tarraconense ha emitido un comunicado en el que los obispos catalanes afirman sentir mucho "la partida hacia la casa del Padre del obispo Pere Casaldàliga"

"Damos gracias a Dios por su larga vida de misionero, sacerdote y obispo encarnado al servicio de su pueblo en Sao Fèlix de Araguaia (Brasil)"

El cardenal arzobispo de Barcelona y presidente de la Conferencia Episcopal Española, Juan José Omella, ha lamentado el fallecimiento del obispo Pere Casaldàliga y ha destacado de él su voluntad de servicio "a los pobres", con los que "siempre quiso trabajar y vivir".

El obispo catalán Pere Casaldàliga, defensor de los derechos de los indígenas y uno de los promotores de la Teología de la Liberación, ha fallecido este sábado a los 92 años en la localidad brasileña de Batatais -dentro del estado de Sao Paulo-, donde estaba ingresado desde hace días por una afección respiratoria grave.

Omella ha lamentado su fallecimiento y, en unas declaraciones enviadas por el arzobispado, ha trasmitido en primer lugar el pésame a los claretianos, que es la congregación de Casaldàliga.

Sobre el llamado "obispo de los pobres", el cardenal Omella ha afirmado que "es para los catalanes, pero también para todos los miembros de la Iglesia, un ejemplo de hombre que quiso vivir con los pobres y que se entregó a ellos".

misa-capilla-Casaldaliga
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"Descanse en paz y que Dios le conceda la paz para siempre", ha añadido el cardenal Omella antes de leer un fragmento de un texto de Casaldàliga dedicado a Santa María.

La Conferencia Episcopal Tarraconense ha emitido un comunicado en el que los obispos catalanes afirman sentir mucho "la partida hacia la casa del Padre del obispo Pere Casaldàliga", de quien destacan que "ha sido profeta y voz de los pobres del Brasil y de todo el mundo".

"Damos gracias a Dios por su larga vida de misionero, sacerdote y obispo encarnado al servicio de su pueblo en Sao Fèlix de Araguaia (Brasil)", añaden los obispos catalanes antes enviar a su diócesis, a su familia y al Instituto religioso de los Claretianos sus condolencias y el compromiso de su plegaria "por su reposo eterno".

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