El club de baloncesto Sant Josep y el club de patinaje de Badalona deberán abandonar las instalaciones propiedad de la Iglesia de Barcelona, donde ambas entidades venían desarrollando sus actividades. Así lo ha dictado esta misma semana el titular del juzgado número 4 de Badalona, que da la razón en primera instancia a las alegaciones del Arzobispado de Barcelona en su demanda de desahucio.
En una nota hecha pública el pasado jueves 4 de noviembre, el arzobispado ha mostrado “el máximo respeto por la sentencia judicial que reconoce la parroquia de Sant Josep de Badalona como legítima propietaria de los inmuebles de la calle Enric Borràs, núm. 40-42 de Badalona”.
El arzobispado niega cualquier voluntad especulativa y asegura asimismo que, en sus contactos con el consistorio de badalona durante los últimos meses, ha mantenido la voluntad de “encontrar una salida por el bien del deporte de la ciudad".
La del arzobispado no es la única demanda contra la entidad deportiva. Tal como informó La Vanguardia, también un vecino interpuso una demanda paralela por las supuestas molestias que, en forma de ruido, le provocaría los partidos y entrenamientos del club.
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