La capilla ardiente se instalará en el Seminario , y el funeral se celebrará el viernes Consternación en Astorga y en el Episcopado español tras el repentino fallecimiento de Juan Antonio Menéndez

Juan Antonio Menéndez
Juan Antonio Menéndez Agenias

El prelado estaba "abrumado" por el caudal de trabajo y la crisis de la pederastia en la Iglesia española, resaltan sus conocidos

El prelado fue el primer obispo nombrado por el Papa Francisco, y dirigía la Comisión Antipederastia y la Comisión de Migraciones de la CEE

Consternación. Esta es la palabra que mejor define a la diócesis de Astorga y al Episcopado español tras la repentina muerte, por un infarto fulminante, de Juan Antonio Menéndez. El prelado, de 62 años, falleció poco después de las cinco de la tarde mientras se dirigía al Obispado.

"Con mucho dolor y tristeza la diócesis de Astorga comunica el fallecimiento repentino, en la tarde del miércoles 15 de mayo de 2019, del Sr. Obispo de Astorga, Mons. Juan Antonio Menéndez Fernández, a los 62 años de edad", comunicaba anoche la diócesis en una breve nota, en la que anunciaba que la ca capilla ardiente quedará instalada a partir de las 16h de este jueves en la Capilla Mayor del Seminario de Astorga.

El funeral, el viernes

El funeral se celebrará en la catedral de Astorga este viernes, a las seis de la tarde. "Rogamos que en todas las parroquias y comunidades cristianas se ofrezcan oraciones por su eterno descanso al Dios de la Vida", finaliza la nota de la diócesis. El obispo, también responsable de Migraciones, fue el primer obispo nombrado por el Papa Francisco.

En las últimas semanas, el prelado estaba "abrumado" por el caudal de trabajo motivado por la crisis de la pederastia. A la espera de que la Santa Sede aprobara el proyecto que convertiría a la CEE en el primer Episcopado del mundo en tener capacidad coercitiva sobre diócesis y congregaciones para hacer cumplir los protocolos antiabusos, el goteo de denuncias llegaba a monseñor Menéndez.

Uno de los últimos acontecimientos dolorosos en este campo fue la reciente entrevista en Diario de Valladolid a Ángel Sánchez Cao, uno de los sacerdotes acusados de abusos en su diócesis -en el Seminario de La Bañeza-, en la que se mostraba sumamente crítico con la figura del obispo.

El párroco de San Lorenzo

Menéndez tenía previsto desplazarse la misma tarde de ayer a Gijón para acudir a la capilla ardiente del también sacerdote Herminio González Llaca, párroco de San Lorenzo, al que le unía una gran amistad desde que coincidieron en el seminario (de hecho tenían la misma edad) y que había fallecido por la mañana. 

Entretanto, continúa el goteo de pésames en las diócesis españolas. Así, el arzobispo de Oviedo (donde fue ordenado Menéndez", Jesús Sanz, recalcaba cómo "la bondad natural de este querido hermano era patente en su buen hacer como persona y como obispo". 

Por su parte, Vicente Jiménez Zamora, arzobispo de Zaragoza, lo definía como "un hombre bueno, fiel servidor de la viña del Señor en la diócesis de Astorga (...). Que Dios premie su entrega". También la Conferencia Episcopal.

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