El todavía obispo de Almería, Adolfo González Montes, ha desvelado en rueda de prensa que él solicitó un obispo auxiliar, y no un coadjutor, el pasado mes de mayo, a Roma. Tras anunciar la designación de Antonio Gómez Cantero, que lo sucederá en el cargo cuando en noviembre de 2021 cumpla 75 años, el prelado subrayó que la solicitud tenía que ver con "la creciente extensión poblacional" de su diócesis, y no con escándalos financieros, que provocaron una investigación del Vaticano.
"La respuesta fue favorable, indicándome la Congregación para los Obispos que cuando faltaban apenas dos años para que se cumpliese el tiempo de mi ministerio, la Santa Sede consideraba que era mejor contar con un obispo coadjutor para que conociera la diócesis y se fuese preparando para la sucesión en la sede de Almería", señaló González Montes, quien definió a su sucesor como "un hombre preparado y gran educador".
El nombramiento de obispos coadjutores, ha expuesto el obispo, es "bastante habitual en otros países europeos", si bien no es una práctica extendida en España. "Se prevé para razones de tipo personal como las que yo he presentado", incidió, destacando que su sucesor tiene "una especial dedicación a la infancia, la juventud y las vocaciones sacerdotales", lo que "ayudará a potenciar la pastoral de este campo hoy tan difícil" en Almería.