La diócesis denuncia "el tono provocativo, de sospecha, populista y ofensivo" utilizado por Barrajón El Obispado de Ciudad Real y las hermandades de Almagro se enzarzan por la desaparición del Cristo de las Aguas

Cristo de las Aguas de Almagro
Cristo de las Aguas de Almagro

El presidente de las Cofradías presenta su dimisión, y se despacha a gusto contra el obispo: Seguid vociferando y echando la culpa a los demás de lo que es pura responsabilidad vuestra. Las iglesias están vacías no por culpa de los fieles, sino por culpa de los que se hacen llamar pastores y no saben, ni quieren saber, cómo se lleva un rebaño"

¿Qué sucede en Almagro? ¿Dónde está la talla del Cristo de las Aguas? La polémica se ha vuelto viral en la diócesis de Ciudad Real, después de que José Antonio Barrajón, presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de Almagro, hubiera denunciado la desaparición de la imagen, señalando a la institución como culpable.

La diócesis respondió con un contundente comunicado en el que denunciaba "el tono provocativo, de sospecha, populista y ofensivo" utilizado por Barrajón. "Si se hubiera dirigido a este Obispado se le hubiera podido informar del lamentable estado en que se encuentra la imagen del Cristo de las Aguas, y que a este Obispado sólo le mueve el interés de su conservación, cuidado y futura restauración. La imagen está actualmente expuesta al público en el Museo Diocesano".

El comunicado, inusitadamente duro, tilda en varias ocasiones al denunciante como "quien se dice representante de una institución eclesial", y deja claro que la diócesis es "el único propietario legal del Convento de la Asunción de Almagro, así como de todo lo que se contiene en él". 

El Cristo de las Aguas de Almagro

"Tono populista, envuelto en falsa piedad"

"Su ignorancia o equivocada formación le lleva a afirmar que la comunidad eclesial está por encima o con más derechos que aquellos que se hacen llamar sus pastores. Quien firma el comunicado desconoce que el Obispo y los sacerdotes no se hacen llamar pastores, sino que lo son", resalta la nota episcopal.

Tras las misma, el presidente de la Junta de Hermandades envió una 'carta abierta' al obispo, Gerardo Melgar, en la que anuncia su dimisión y, ciertamente, se queda bien a gusto.

"Quedaros con los Cristos, Vírgenes y santos que queráis. Seguid vistiéndoos de terciopelos, puntillas, sedas, brocados y oros. Seguid vociferando y echando la culpa a los demás de lo que es pura responsabilidad vuestra. Las iglesias están vacías no por culpa de los fieles, sino por culpa de los que se hacen llamar pastores y no saben, ni quieren saber, cómo se lleva un rebaño".

Claustro de los dominicos

Carta abierta al Sr. Obispo y sus legítimos pastores:

Cuando uno ya tiene una edad, y habiendo vivido bastantes situaciones, no tiene por qué callar ni condescender con ciertas situaciones.

Éste que escribe, fue elegido Presidente de la Junta de Hermandades y Cofradías de Semana Santa de la Ciudad de Almagro el pasado mes de Junio del presente año por unanimidad y aclamación, en presencia del Consiliario y responsable de la Comunidad Eclesial de Almagro, D. Ángel Daniel De Toro. No me digo yo, no me autoproclamo ser Presidente. A día de hoy lo soy, os pese o no. Figura en las Actas de la Junta de Hermandades de Almagro, a las cuales simplemente podéis remitiros.

Respecto a mi formación, sólo indicarle que he estudiado en dos de los mejores Estudios de Teología de España, como son el Centro de Estudios Teológicos de Sevilla y la Facultad de Teología de San Vicente Ferrer de Valencia. Probablemente tengo mejor formación que cualquiera que haya estudiado en un Seminario de provincias, llámese Palencia o llámese Ciudad Real. Sólo hay que observar la calidad Teológica y Espiritual de muchos de los pastores de estas tierras, más preocupados de acaparar riquezas, propiedades y obras de arte que de predicar el Evangelio de Jesucristo, que es para lo que están llamados.

Os quedáis cada vez más solos. No es ni más ni menos que lo que merecéis. Y más que os vais a quedar. Llevaos todo lo que queráis a vuestras casas y Palacios Episcopales, siempre lo habéis hecho. Rodearos de riquezas, que es lo que manda el Evangelio de Jesucristo. Seguid abandonando al pueblo de Dios a su suerte, ya daréis cuenta de ello cuando tengáis que darla.

Yo, bautizado como vosotros, tengo la conciencia bien tranquila. Sólo he defendido, sin provocación, ofensa ni populismo, algo que compete a la Iglesia de Almagro: el robo de una imagen de Jesucristo de una de nuestras iglesias. Porque son nuestras, de las gentes de Almagro que con sus donativos, limosnas y colaboraciones han mantenido y mantienen el patrimonio de la Iglesia Local. Vosotros no sois nadie, por mucho que queráis apropiaros de lo que no es vuestro, de quitarnos, por voluntad arbitraria y caprichosa, el patrimonio forjado durante generaciones.

Durante mi vida he dedicado mucho tiempo al servicio de la Iglesia, mucho tiempo y mucho dinero, que ha mantenido lo que ahora decís que es vuestro.

He dedicado más años y tiempo al mantenimiento de la Iglesia de Ciudad Real que ese señor venido hace poco de una aldea de Palencia. He sido catequista de postcomunión, preadolescentes, y confirmación. He sido miembro del Cabildo Apostólico de San Bartolomé el Real, miembro de la Junta Directiva de la Hermandad de Jesús de las Tres Caídas, Secretario de la Esclavitud del Santísimo Sacramento de San Bartolomé el Real. Actualmente, aparte de Presidente de la Junta de Hermandades, dedico tiempo y esfuerzo también siendo Secretario de la Compañía Romana, Secretario del Consejo de Economía de la Parroquia de Madre de Dios y Vicesecretario de la Esclavitud del Santísimo Sacramento. Del mismo pertenezco y colaboro con las Hermandades de San Blas, de San Isidro y San Antón y de Santiago Apóstol de Almagro y benefactor del Monasterio de las Monjas Dominicas. Creo que tan sólo por ello, merezco un respeto.

Que Él os perdone, porque yo, no.

Y para no malgastar más mi tiempo en beneficio de estos santos y refinados pastores, anuncio mi dimisión de todos los cargos en los que sirvo y he servido a esta institución, con el único fin y mérito de beneficiar, ayudar y mantener a la Iglesia de Almagro y sus hermandades.

José Antonio Barrajón Gascón

Cristo de las Angustias

Volver arriba