"Nunca he sido obispo", apunta el nuevo prelado de Huesca y Jaca Pedro Aguado, ante las palabras de Argüello y Magán: "Nos hemos metido en un jardín que no deberíamos"

"Cuando se dice desde los obispos se dice una cosa como la que se dijo, que estaban en pleno debate de política partidista en este país; no hay que sorprenderse que después se reciban críticas desde la óptica partidista, porque puede entenderse por parte de algunos que nos hemos metido en un jardín que no deberíamos meternos". El flamante nuevo obispo de Huesca y Jaca, Pedro Aguado, se mostró crítico con las palabras del presidente y el secretario general de la CEE sobre el adelanto electoral en España.

"En estas cosas hay que ser muy prudente, dar tiempo al tiempo, no pedir directamente una opción que está en pleno debate político, para evitar que seamos utilizados", reflexionó. "Corres el riesgo de que te digan que te has metido en una lucha política en un lado, y la Iglesia no tiene que manifestarse o ser interpretada como cercana a un partido u otro".

"Corres el riesgo de que te digan que te has metido en una lucha política en un lado, y la Iglesia no tiene que manifestarse o ser interpretada como cercana a un partido u otro"

Durante una entrevista en Hoy por Hoy Huesca, el escolapio se mostró humilde: "Nunca he sido obispo", y admitió que "no vengo con planes hechos en un despacho". "Mi trabajo es servir a las ciudades, a la gente y trabajar", subrayó el prelado, quien se mostró "contento de haber aceptado" el envío del Papa Francisco, abandonando el liderazgo de la congregación para ser obispo de dos diócesis. 

Aguado tampoco escurrió el bulto a la hora de hablar de los abusos sexuales a menores en la Iglesia, que calificó de "un crimen impresionante que ha lacerado a tantos jóvenes y sus familias, y también a la Iglesia, que ha sufrido y sigue sufriendo por este asunto".

"Estamos hablando de algo que ha ocurrido y que trabajamos para que no vuelva a ocurrir", subrayó, reclamando "una cultura de protección" y "aplicar los criterios de justicia y canónicos" para la reparación integral de las víctimas. 

Sobre la presencia de los gays, Aguado subrayó que "la Iglesia tiene que ser un lugar de acogida para todos, y cualquier persona que quiera vivir la fe cristiana tiene que sentir que la Iglesia es su hogar". Así, pidió "acogida y profundo respeto".