El obispo cumple un año dirigiendo ambas diócesis entre constantes rmores Retana: "La fusión de Salamanca y Ciudad Rodrigo no está sobre la mesa, aunque es una posibilidad"

José Luis Retana
José Luis Retana

"Es verdad que hay cosas que hacemos en común y que las sinergias nos ayudan a poder hacer a la vez, pero no, yo no he traído ninguna consigna en esa dirección. Aunque en Ciudad Rodrigo lo perciben como un peligro. El problema nuestro, de siempre, es la despoblación"

"Creo que debemos confesar que no hemos sabido transmitir la fe a nuestros jóvenes como nuestros padres lo pudieron hacer con nosotros"

"Ha habido una religiosidad muy sociológica. Creo que en el futuro vamos a tener comunidades quizá más sencillas, incluso menos amplias, pero serán más vivas y capaces de seguir al Señor, con más afecto a la Iglesia y, por lo tanto, también más capaces de testimoniar y de ser ejemplo para la sociedad"

"La fusión no está sobre la mesa, aunque es una posibilidad". El obispo de Salamanca y Ciudad Rodrigo, José Luis Retana, cumple un año dirigiendo ambas diócesis, entre constantes rumores de desaparición de la segunda, subsumida por la primera. En una entrevista con Ical, Retana reflexiona sobre estos primeros doce meses, la crisis de vocaciones ("mal, como en todas es un problema general en todas las diócesis de España") y sobre el futuro de la Iglesia.

"Yo creo que no está sobre la mesa (la fusión de diócesis), aunque es una posibilidad", insiste Retana. "Desde luego, yo no he traído ninguna consigna en esa dirección", aclara. "Es verdad que hay cosas que hacemos en común y que las sinergias nos ayudan a poder hacer a la vez, pero no, yo no he traído ninguna consigna en esa dirección. Aunque en Ciudad Rodrigo lo perciben como un peligro. El problema nuestro, de siempre, es la despoblación, realmente", reflexona.

Respecto al futuro de la fe, Retana tiene una visión muy realista de la realidad. "Hay un proceso de secularización grande en la sociedad", sostiene, y "creo que debemos confesar que no hemos sabido transmitir la fe a nuestros jóvenes como nuestros padres lo pudieron hacer con nosotros".

"Ha habido una religiosidad muy sociológica. Creo que en el futuro vamos a tener comunidades quizá más sencillas, incluso menos amplias, pero serán más vivas y capaces de seguir al Señor, con más afecto a la Iglesia y, por lo tanto, también más capaces de testimoniar y de ser ejemplo para la sociedad que pueda vivir al margen de la Iglesia", explica el prelado.

Primero, Religión Digital
Volver arriba