Sorprendente homilía del arzobispo de Oviedo en Covadonga Sanz sostiene que los toros están más protegidos que "los niños abortados o los ancianos eutanasiados"

Sanz, durante la misa en Covadonga
Sanz, durante la misa en Covadonga

El prelado, ante el presidente de Asturias, aprovechó para volver a arremeter contra "leyes sin demanda ni debate social alguno", que "siembran crispación y una impuesta transformación al albur de ideologías varias"

Denuncia a los "fundamentalistas sin turbante" que "degüellan sin miramiento a los cristianos ante la indiferencia internacional"

“Ya quisiera yo que niños abortados o ancianos y enfermos eutanasiados tuvieran la legislación protectora que se les brinda a los toros”. Con esta sorprendente afirmación, el arzobispo de Oviedo volvió a ser protagonista del Día de Asturias, durante la homilía en la Eucaristía celebrada ante las autoridades públicas, junto a la Santina de Covadonga.

"Mal asunto cuando la estocada se da en el seno materno, o cuando en el dolor terminal se da la puntilla al enfermo; esto es otra corrida… subvencionada", añadió el prelado, quien aprovechó para volver a arremeter contra "leyes sin demanda ni debate social alguno", que "siembran crispación y una impuesta transformación al albur de ideologías varias".

Ante la mirada del jefe del Ejecutivo asturiano, Adrián Barbón, Sanz criticó a los "fundamentalistas de turbante" o "turbadores de guante blanco" que en lugares como Afganistán vejan a las mujeres y a las niñas "y degüellan sin miramiento a los cristianos ante la indiferencia internacional".
Al tiempo, el prelado llamó "a la prudencia y a la responsabilidad" a causa de la pandemia, "un pulso que ha puesto en jaque tantas cosas". Tras agradecer la gestión del Gobierno asturiano, Sanz apuntó que "hay otros escenarios manos halagüeños como los índices de paro laboral, especialmente entre la población más joven, el pago de la luz cuyas facturas nos apagan, o la tasa de natalidad a la baja haciendo de nuestra región la más envejecida de España”.

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