Una trayectoria polémica desde San Jorge a Cádiz y Ceuta "Zornoza no tenía piedad": Las otras polémicas del ya obispo emérito

Zornoza, a la derecha, junto a Rouco y Asenjo, en una imagen de archivo
Zornoza, a la derecha, junto a Rouco y Asenjo, en una imagen de archivo Víctor López / EFE

Getafe se convirtió en cuna de vocaciones a la vida religiosa y al sacerdocio, y se abrió la puerta a los nuevos movimientos en la diócesis, algo que continuó en Cádiz, donde funciona un Redemptoris Mater y son habituales los retiros de Effetá, Bartimeo o Emaús. También, a proyectos educativos como los de la fundación Educatio Servanda

En Cádiz ha vivido numerosas polémicas relacionadas con la gestión administrativa, decisiones rígidas y un enfoque en la disciplina del clero y la administración de bienes eclesiásticos. Hasta el Carnaval de Cádiz le dedicó una copla en 2022, en la que se referían a él como "Reverendísimo avaro, señor obispo de Cádiz, con toda mi rabia en la boca. Hoy quiero esta copla cantársela a usted, monseñor de la codicia, del lucro sin fe, y de los pisos vacíos”

"Rafael Zornoza no tuvo piedad con sus enemigos, o con quien le llevara la contraria". Así resume un sacerdote, víctima de una condena canónica por parte del ya obispo emérito de Cádiz y Ceuta, el talante del prelado al que este mediodía el Papa León XIV ha jubilado de forma abrupta, tras la publicación, el pasado día 10, de una denuncia por abusos contra él, cuando ejercía de rector del seminario de Getafe.

Y es que la trayectoria de Rafael Zornoza ha estado marcada por la polémica. Desde sus tiempos como párroco en San Jorge, siempre de la mano de Fernández-Golfín (el primer obispo de Getafe lo llevó consigo a la nueva diócesis del sur de Madrid, convirtiéndole en el todopoderoso líder del seminario, y posteriormente en obispo auxiliar) a su final en la única diócesis presente en dos continentes (Cádiz y Ceuta), el prelado ahora denunciado no ha pasado desapercibido.

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Su carrera fue fulgurante, siempre al lado de Golfín, y con el inestimable apoyo de grupos como Comunión y Liberación y el entorno del cardenal Rouco Varela. Tras San Jorge, el seminario de Getafe, el nombramiento como obispo auxiliar y su obsesión por el control de las cuentas y el impulso vocacional. De su mano, Getafe se convirtió en cuna de vocaciones a la vida religiosa y al sacerdocio, y se abrió la puerta a los nuevos movimientos en la diócesis, algo que continuó en Cádiz, donde funciona un Redemptoris Mater y son habituales los retiros de Effetá, Bartimeo o Emaús. También, a proyectos educativos como los de la fundación Educatio Servanda.

Zornoza dio impulso a la beatificación de su mentor, cerrada abruptamente, lo que provocó su traslado a la diócesis de Cádiz (para cuya sede estaba casi nombrado Ramón del Hoyo). En la tacita de plata ha vivido numerosas polémicas relacionadas con la gestión administrativa, decisiones rígidas y un enfoque en la disciplina del clero y la administración de bienes eclesiásticos. Hasta el Carnaval de Cádiz le dedicó una copla en 2022, en la que se referían a él como "Reverendísimo avaro, señor obispo de Cádiz, con toda mi rabia en la boca. Hoy quiero esta copla cantársela a usted, monseñor de la codicia, del lucro sin fe, y de los pisos vacíos”.

Y es que la diócesis es propietaria de multitud de pisos, muchos de ellos vacíos, que el Ayuntamiento trató, sin éxito, de que se les cedieran para paliar la mala situación de la vivienda en la capital. Zornoza también vivió una polémica al expulsar en 2021 a José Luis García y Marisol Torres, ambos octogenarios, del convento de San Fernando, que habían cuidado durante medio siglo. 

Rafael Vez y Antonio Casado
Rafael Vez y Antonio Casado

Al tiempo, sacerdotes como Rafael Vez denunciaron públicamente lo que consideraban una gestión autoritaria de Zornoza, que incluía despidos arbitrarios y la imposición de medidas disciplinarias sin diálogo. Vez fue apartado temporalmente de sus funciones tras levantar estas críticas. Antonio Casado, otro sacerdote, también sufrió la condena por parte del prelado.

En Ceuta, Zornoza se negó a ceder un antiguo asilo para acoger menores marroquíes en situación de vulnerabilidad. No hay que olvidar que quien fuera el cabeza de lista de Vox para las generales en Cádiz, Agustín Rosetty, era su delegado de Fundaciones.

Las operaciones inmobiliarias del Obispado se convirtieron en otro foco de conflicto. La intención de vender edificios municipales cedidos en usufructo provocó denuncias de ayuntamientos como el de San Roque y avivó la percepción de que la gestión de Zornoza priorizaba intereses estratégicos y financieros sobre el cuidado pastoral. La acumulación de estos conflictos alimentó la narrativa de un obispo distante, centrado en la administración y menos en la cercanía con los fieles, lo que contrastaba con la tradición de una diócesis que había valorado históricamente el acompañamiento pastoral directo, tal y como informa elDiario.es

Entre las críticas, grupos cristianos llegaron a enviar cartas al nuncio del Papa en España solicitando que reconsiderara su apoyo al obispo, alegando que su gestión generaba descontento y erosionaba la confianza en la institución. Estas acciones reflejaban no solo la tensión interna, sino también el grado de insatisfacción de sectores de la comunidad católica con la forma de ejercer la autoridad episcopal. Nunca se les hizo caso. De aquellos polvos...

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