La Academia de Líderes Católicos presenta este lunes su proyecto en el Vaticano José Antonio Rosas: "Si los de VOX dicen que están comprometidos con el mensaje de la Iglesia, lo que uno esperaría es respeto al Papa"

"Aquí, en Europa, hay otros desafíos. Están en un contexto de una guerra que es muy complicado. No es lo mismo, además, abrir la Academia en España o en Italia que en Francia o en Alemania. Va a ser un camino largo…"

"En América Latina, lamentablemente, hemos sufrido mucho de eso de partidos políticos que usan el lenguaje religioso, instituciones católicas, se acercan a obispos católicos con la finalidad de instrumentalizarlos para causas políticas"

"Lo primero que nosotros tenemos que entender es, como dice el papa Francisco en Evangelii Gaudium, que no estamos llamados a ser 'generales de ejércitos derrotados con cara de vinagre', solamente denunciando y diciendo todo lo negativo. No estamos para defendernos, estamos para anunciar y proponer nuestra mirada sobre la sociedad porque el evangelio es alegría"

"(Osoro) dice que la primera exclusión de un católico hacia la sociedad es no mirar la realidad, no tocar la realidad porque me incomoda. Y el Papa nos enseñó que se junta con 10 jóvenes, y de esos 10 jóvenes solamente hay una jovencita comprometida con una pertenencia cordial de la Iglesia plena, y otras chicas que se definen católicas pero con muchos conflictos en su pertencia a la Iglesia. Y el Papa dialogó y acogió con todos. No puso ningún ninguna condición"

"La Iglesia, dice el papa Francisco, en Amoris laetitia, no pretende reemplazar conciencias, lo que quiere es formar la conciencia. En la Academia queremos formar la conciencia para que cada laico, en las circunstancias concretas que le toca vivir, discierna qué es lo que tiene que hacer"

"Queremos evitar la instrumentalización política del fenómeno religioso que algunos grupos populistas de extrema derecha o extrema izquierda utilizan apostando por la polarización y el maniqueísmo". José Antonio Rosas, director de la Academia de Líderes Católicos Latinoamericanos, está creando en Madrid, de la mano del cardenal Osoro, un proyecto para exportar este experimento, validado en América Latina y respaldado por el Papa, en nuestro país, como punta de lanza de Europa.

"Ese es el desafío de los católicos en política. Es el desafío de trabajo en el cual nosotros queremos construir, educar y formar desde la Academia", apunta Rosas, quien señala a los políticos que buscan la confrontación y que, como VOX, van de católicos 'de toda la vida', y menosprecian al Papa, a los obispos, y al Evangelio. 

"Aquí, en Europa, hay otros desafíos. Están en un contexto de una guerra que es muy complicado. No es lo mismo, además, abrir la Academia en España o en Italia que en Francia o en Alemania. Va a ser un camino largo…". Aquí nos lo cuenta, antes de llevarlo, oficialmente, a Roma, donde este lunes y martes será presentado junto al cardenal Osoro, el secretario de Estado Parolin o figuras como Rodrigo Guerra o Rocco Buttiglione.

-Hoy nos acompaña José Antonio Rosas. Bienvenido a España.

-Muchísimas gracias. Siempre es un gusto venir aquí a religión Digital.

-Porque vas y vienes a este continente con frecuencia.

-No con la que yo quisiera, pero hemos empezado a venir de cara al crecimiento y expansión de nuestra Academia.

-Es el director de la Academia de Líderes Católicos. Iba a decir latinoamericanos, pero creo que tenemos que empezar a descartar este adjetivo y empezar a hablar de un proyecto mucho más global. Es una de las razones, también, por la que vas a viajar más al continente. Por esa apertura de la Academia de Líeders católicos a todo el mundo, especialmente a Europa; España, Portugal, etc. Cuéntanos un poco cómo surge esto.

-Hemos empezado la expansión de la Academia aquí, inicialmente por la petición que nos han hecho personas e instituciones de abrir la Academia en Europa. Y para ello, afortunadamente, estamos contando con la guía, el consejo y la dirección del cardenal Carlos Osoro, arzobispo de Madrid, quien ha aceptado asumir como presidente de la Academia de líderes católicos en Europa. Hemos constituido un consejo en el cual están presente varias figuras de España, Portugal e Italia. Está Rocco Buttiglione, exministro para la Unión Europea del Gobierno de Ialia, Paola Binetti, una senadora italiana, Consuelo Madrigal, exfiscal general de España, Luis Alfreso Díaz, cantautor argentino-uruguayo-español...

-Y bloguero de esta casa

-Además, que tiene un conocimiento muy fuerte, no solamente de españa, sino de toda Europa, y referente histórico andaluz con la música religiosa. Está Rodrigo Guerra, secretario de la Pontificia Comisión para américa Latina… Porque el cardenal Osoro, lo que nos ha dicho, es que quiere en Europa una Academia con raíces latinoamericanas, pero vocación europea. Le parece que la experiencia que hemos tenido en América Latina de esta novedad de crear un espacio de formación de católicos en la vida política en clave plural, como lo hace el papa Francisco, es una novedad que él quiere traer a Europa y que el frescor de la novedad de América Latina se expanda por toda europa, partiendo en España. Está también Francisco Ruidinho, que es director de un centro de estudios en Portugal. Y algunas otras personas más.

Entonces, el contexto es que estoy ahora en una gira por Madrid, por Portugal, por Roma, para arrancar las primeras semillas de la Academia. Tenemos la primera generación, que inicia, este sábado en la Universidad Francisco de Vitoria, que nos está acogiendo aquí, en España para partir con el primer curso de formación.

-Es curioso y de justicia restaurativa, si me lo permites, que sea América la que venga a cambiar el modo de hacer política. Porque hay cuestionamientos, formas de actuar y experiencias que vienen de otros lugares y que nos ayudan a nosotros, que creemos que lo tenemos todo sabido, pero que necesitamos también escuchar y ver otras experiencias y aprender de ellas. Es un poco el cambio de curso del río; antes parecía que de Europa y de España iba todo hacia Latinoamérica. Y ahora estamos aprendiendo a recibir experiencias y proyectos novedosos, como el vuestro.

-Así es. Nosotros no venimos con la idea de venir a enseñar cómo se hacen las cosas, sino a compartir la experiencia que ha funcionado allá en once países de América Latina y en los Estados Unidos, por cierto, desde el año pasado en la comunidad hispana de Nueva York y de Chicago. Queremos compartir la experiencia aquí, en Europa.

Pero aquí, en Europa, hay otros desafíos. Están en un contexto de una guerra que es muy complicado. No es lo mismo, además, abrir la Academia en España o en Italia que en Francia o en Alemania. Va a ser un camino largo…

-Aunque estamos hablando de un mundo global, las situaciones particulares son muy concretas. ¿Os preocupa la polarización que estáis encontrando?

-Hay un elemento clave, que es lo que nosotros queremos proponer con la Academia, y es evitar la instrumentalización política del fenómeno religioso que algunos grupos populistas de extrema derecha o extrema izquierda utilizan apostando por la polarización y el maniqueísmo.

El papa Francisco nos ha enseñado con toda claridad que el gran desafío en el que tenemos que centrarnos los cristianos en el mundo político es la polarización, el egoísmo, y no el comunismo o el anticomunismo. Y la Fratelli tutti es la clave que nos está dando coordenadas.

En América Latina, lamentablemente, hemos sufrido mucho de eso de partidos políticos que usan el lenguaje religioso, instituciones católicas, se acercan a obispos católicos con la finalidad de instrumentalizarlos para causas políticas.

El partido católico no va; se trata de que haya católicos en todas las opciones políticas. Y además, la política no la hacen ángeles, la hacemos seres humanos, entonces, no hay buenos contra malos

-Que dé la sensación de que la única manera de ser católico en la política es pertenecer a un determinado partido y que fuera de ese partido no hay salvación.

-Así es. El papa Francisco, en una audiencia que nos dio a nosotros en el 2018, que fue cuando él dio la autorización para fundar la Academia Latinoamericana de Líderes Católicos, dijo el partido católico no va; se trata de que haya católicos en todas las opciones políticas. Y además, la política no la hacen ángeles, la hacemos seres humanos, entonces, no hay buenos contra malos. Somos seres humanos con un montón de defectos, virtudes y cualidades, que tratan de hacer proyectos políticos, unos más legítimos que otros.

En América Latina hemos vivido eso. Lamentablemente se han prestado algunos grupos católicos muy radicales. Hay una alianza entre grupos integristas y grupos evangélicos muy, muy fanáticos. Lo vivimos en Brasil, para reducir, además, las consecuencias sociales de la fe a solamente dos o tres valores, que proclaman innegociables.

El problema es que esta gente no lee ni escucha el Papa. Preguntaron al Papa, en el primer año que fue electo, qué opinaba de los tres valores no negociables, dijo: ¿desde cuándo la Iglesia se reduce únicamente a tres valores en los que hay que trabajar?

Ahora estamos en Portugal, justamente para arrancar la Academia, y hablando con la rectora de la Universidad Católica de Portugal, me decía exactamente lo mismo: en Portugal han crecido movimientos populistas de extrema derecha que reducen todo a dos o tres valores. Y el tema de los migrantes, el tema de los pobres, y el tema de los excluidos está completamente a un lado.

-Yo creo que es una cuestión de acentos, de ampliar el foco y de considerar que ser cristiano, ser seguidor de Jesús no solo es defender esos principios, sino también muchos otros, porque la vida también está en los migrantes que mueren en el Mediterráneo. Este mar que vas a conocer mucho a partir de ahora. ¿Estás encontrando, en estas primeras tomas de contacto, el problema de la polarización en lo católico? Porque aquí cada vez nos cuesta más encontrar políticos que trasciendan ese blanco o negro, esa política de extremos.

-Leía la entrevista, hace unos días, de un líder católico cristiano europeo y él decía: "Somos una minoría, estamos excluidos, pero nos vamos a hacer valer y escuchar". A mí me parece que esa no es la palabra del papa Francisco. Esa concepción de que nosotros somos una pequeña minoría que está siendo perseguida y entonces tenemos que recluirnos y defendernos… es desesperanzada. No trata de descubrir lo bueno y lo positivo que tiene nuestro tiempo. La polarización en América Latina al interior del mundo católico ha sido muy fuerte. Frente a eso, lo primero que nosotros tenemos que entender es, como dice el papa Francisco en Evangelii Gaudium, que no estamos llamados a ser 'generales de ejércitos derrotados con cara de vinagre', solamente denunciando y diciendo todo lo negativo. No estamos para defendernos, estamos para anunciar y proponer nuestra mirada sobre la sociedad porque el evangelio es alegría.

-Y se encarna en una sociedad en un momento determinado. No podemos pretender vivir la misma sociedad de hace cuatro siglos.

-Así es, porque esto se encarnó. Eso es muchas veces el problema que tenemos; una fe desencarnada. Y queremos una fe medio angelical. Cristo se hizo hombre y asumió la naturaleza humana. Y el cristianismo se encarna en cada época, contexto y cultura determinada. Y nos tenemos que atener a eso. Y, por eso, sí hay que defender la vida y la familia, pero a mí no me gusta el término de la defensa. Hay que anunciar la verdad sobre la vida integral. Y la vida es desde la concepción hasta el término natural. Y anunciar la belleza de la vida; la belleza de la vida de los más pobres, de los excluidos, de las mujeres, independientemente de las opciones que tome cada uno en su en su vida personal. Defendemos la dignidad de la vida humana, independientemente de si la persona decide tomar el camino que creemos que es más correcto o no. Sus opciones personales de vida son independientes a nuestro compromiso con la dignidad humana.

-En España está sucediendo que hay muchos políticos de izquierda que "matan" por ir a hacerse la foto y encontrarse con el Papa. Y luego, la derecha que se dice católica, le llama 'ciudadano Bergoglio' y no quiere saber nada de esto.

-Ustedes siempre han sido muy valientes y, en ese contexto, he de decir que para mí es muy lamentable que haya gente en el partido Vox que se dice que defienden los valores católicos y el presidente del partido Vox denigre y menosprecia al papa Francisco con esa expresión del 'ciudadano Bergoglio'. Y ese discurso lo ha querido presentar en América Latina. O sea, si dicen que están comprometidos con el mensaje de la Iglesia, por lo menos lo que uno esperaría es respeto con el Papa y con los obispos. A mí eso, en lo personal, me irrita mucho. Y bueno, acabamos de de vivir la entrevista que dio el Papa en el documental, que es maravilloso.

'Amén: Francisco respnde', en Disney+
'Amén: Francisco respnde', en Disney+

Y que ha causado furor por aquí, tanto para bien como para mal. ¿Has podido verlo?

-Sí.

-Y qué te ha parecido?

-Me encantó. Porque el Papa nos da claves para dialogar con el mundo de hoy, con las juventudes. A las nuevas generaciones hay que escucharlas, y sin miedo a lo que son. Eso no significa renunciar a lo que nosotros tenemos que proponerle, justamente, a esta generaciones. Pero lo primero es que tenemos que escuchar y tocar la realidad. El cardenal Osoro a mí me encanta. Él dice que la primera exclusión de un católico hacia la sociedad es no mirar la realidad, no tocar la realidad porque me incomoda. Y el Papa nos enseñó que se junta con 10 jóvenes, y de esos 10 jóvenes solamente hay una jovencita comprometida con una pertenencia cordial de la Iglesia plena, y otras chicas que se definen católicas pero con muchos conflictos en su pertencia a la Iglesia. Y el Papa dialogó y acogió con todos. No puso ningún ninguna condición. Dialoga con los jóvenes como son. Y luego los gestos en la entrevista son maravillosos. La mirada de ternura del Papa que le da a la chica del camino neocatecumenal, cuando le dices' eres muy valiente, y no te asustes'. Con esa mirada miró a todos; a la jovencita colombiana que trabaja en un portal de pornografía, la miró con la misma ternura. Y yo creo que ese es el desafío que tenemos los católicos en la vida pública, mirar con profunda simpatía todas las realidades humanas sin, por eso, decir que vamos a renunciar a lo que nosotros proponemos.

-Estar presentes y escuchar, que es muy importante. Yo creo que lo fundamental de este documental fue que el Papa se prestó a escuchar sin esquemas previos. Sin saber exactamente con lo que se iba aencontrar ni lo que le iban a decir y sin escandalizarse. Porque cualquier otro jerarca, o cualquier otro católico de bien, al haber escuchado determinadas cosas, probablemente se hubiera escandalizado y se hubiera ido o hubiera pedido que se quitara esto. Esa sensación de no tengo que convencerte, pero estoy aquí para escucharte, a mí me parece que es una de las grandes revoluciones que hace, y que hace muy bien. También en el ámbito de la política, porque en el ámbito de la política seas o no creyente, una de las cosas que no se hacen, al menos en este país, es la de pararte a escuchar qué es lo que quiere la gente, en vez de venderle directamente un programa. Antes de hacer un programa tienes que escuchar lo que quiere la gente. Y en esto, el Papa da una respuesta que sirve de ejemplo para los que aspran a dedicarse a la cosa pública.

-Como tú lo dijiste, yo me pregunto por qué el líder político no se atreve a una entrevista fuera de su zona de confort. El Papa, para la entrevista ha tenido que salir fuera del Vaticano, a un espacio que no controla sin saber quiénes son las gentes con las cuales se va a reunir, coordinado por un director que se presenta como agnóstico, y dispuesto a dialogar con la gente como es. Ese es el desafío de los católicos en política. Es el desafío de trabajao en el cual nosotros queremos construir, educar y formar desde la Academia. Un liderazgo cerca de la gente. Muchos de los problemas que tenemos en América Latina con varios dictadores o gobiernos autoritarios es que se alejaron de la vida cotidiana de la gente. Cuando un político no usa los servicios públicos, no usa transporte público, perfectamente dice pues vamos a subirle 10 centavos un peso un dólar al transporte público y el que no pueda pagar, que se levante una hora antes y que use el el transporte en el horario Valle, en el horario no punta. Como él no usa transporte público, no sabe que la gente hoy día se levanta a las 5 de la mañana para tomar el transporte público y le está diciendo que se levanta a las 4. Eso fue lo que ocurrió en Chile; en Chile, el estallido social fue porque un ministro de Transporte hizo esta tontería. "Bueno, pues el que no pueda pagar el aumento, que es tan insignificante, que se levante más temprano".

José Antonio Rosas: "Estuve en El Yunque, fui jefe del Yunque. Y allí aprendí  lo dañino que es ideologizar la fe, manipularla con finalidades políticas"
José Antonio Rosas: "Estuve en El Yunque, fui jefe del Yunque. Y allí aprendí lo dañino que es ideologizar la fe, manipularla con finalidades políticas"

-Vamos a ir terminando. Pero dime cuatro o cinco claves que aspiráis que tengan estos jóvenes, chicosy chicas, que quieren ser líderes católicos en la política, también aquí en Europa.

-El primero, que su compromiso social parta del encuentro personal con Cristo y no de una ideología político social. Mucho menos de una doctrina o de un ideal. O sea, el compromiso público parte de nuestra relación personal con Jesús.

La segunda cosa a la que nosotros aspiramos es que haya una comunión profunda con la Iglesia, que es mucho más que la ortodoxia de lo que dice la letra. Comunión con la iglesia es sentir con el Papa y con los obispos. Sentir con la Iglesia comunión afectiva, efectiva y vital.

La tercera cosa a la que nosotros aspiramos es liderazgos auténticamente populares. Que sientan el camino con el pueblo, que estén cerca de ellos.

El cuarto, que comprendan que las consecuencias sociales de la fe no se reducen a dos o tres principios o valores.

Y por último, que tengan la capacidad de discernir la realidad reconociendo la presencia de Dios en la historia, en medio de las contradicciones que tenemos en la historia. Me parece que eso es fundamental en el perfil de liderazgo que nosotros tenemos. De otra forma, simplemente repetimos fórmulas o manuales que queremos imponerles en los demás, y reducimos todo a blanco o negro. Hablar de que queremos formar gente que aprenda a discernir la historia es saber que nosotros no queremos decirle a la gente lo que tiene que pensar. La Iglesia, dice el papa Francisco, en Amoris laetitia, no pretende reemplazar conciencias, lo que quiere es formar la conciencia. En la Academia queremos formar la conciencia para que cada laico, en las circunstancias concretas que le toca vivir, discierna qué es lo que tiene que hacer.

-Son objetivos muy ambiciosos, espero que tengáis suerte desde aquí ya sabes que os acompañaremos en el en el camino, si es necesario. Si lo queréis. Y si no también porque porque nos gusta mucho lo que hacéis y hay mucho evangelio detrás. José Antonio muchísima suerte a vosotros, a los líderes católicos en esta nueva andadura y esperemos ver los frutos pronto aquí en España, en Europa y en todo el mundo porque necesitamos hombres y mujeres que desde el evangelio también aspiren a cambiar la vida de la gente y a mejorarla. Muchísimas gracias por intentarlo y por seguir intentándolo siempre.

-Gracias a ti Jesús. Gracias a José Manuel. Ya son varios años que estamos caminando junto con ustedes, no solamente ustedes compartiendo las noticias de lo que hacemos, sino que hemos podido hacer actividades juntos y esperamos seguir haciéndolo.

-Seguiremos caminando, y ustedes lo verán aquí en Religión Digital muy buenas tardes.

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