Las lecturas de las misas de Cuaresma

APLICACIÓN A LA CUARESMALas lecturas bíblicas tienen una gran riqueza de sentidos. La liturgia, al escogerlas para determinadas fiestas o tiempos, nos subraya ciertas aplicaciones. Conviene fijarse en el sentido especial que motivó su elección, como base de la gran catequesis prepascual y bautismal.

Juan es el evangelista preferido de la liturgia, tanto en domingos como en ferias, desde media cuaresma hasta Pentecostés. Cada año se lee el domingo de Ramos la Pasión según el evangelista sinóptico que toque (Mateo el A, Marcos el B, Lucas el C), pero el viernes Santo, que es el día propiamente de la Pasión, los tres años se lee la Pasión según Juan.

MISAS DOMINICALES

En las primeras lecturas dominicales no hay que buscar “misas temáticas”, sino más bien una síntesis de la historia de la salvación, con sus principales personajes del Antiguo Testamento, siempre pensando en el misterio de la Redención: el pecado de Adán y Eva, (dom. I, ciclo A), Noé y el arca (I-B), Abraham (II. A, B, C), Moisés (III-A, B, C), Josué y la conquista de la tierra prometida (IV-C), David (IV-A), deportación de Babilonia (IV-B), la nueva alianza (V-A, B, C).

En cuanto a los evangelios, se ha respetado la tradición de presentar el primer domingo, en los tres ciclos, las tentaciones de Jesús en el desierto, y en el segundo la Transfiguración. Pero los más importantes son los tres últimos, que constituyen la parte más antigua e importante de la Cuaresma, con los tres evangelios joánicos de la samaritana, el ciego de nacimiento y la resurrección de Lázaro, que dan pie a catequesis sobre el bautismo como agua de vida, como iluminación y como vida nueva.

Estas tres perícopas son obligatorias para el año A y para las comunidades donde haya muchos catecúmenos, pero se pueden leer también los otros años y en cualquier iglesia. Los años B y C tenemos también perícopas de Juan (Nicodemo, el grano de trigo, la mujer adúltera), a las que se añade la lucana del hijo pródigo.

MISAS FERIALES

El leccionario ferial es independiente del dominical, pero lo complementa. Sin orden lógico ni plan sistemático o temático, conviene ver el conjunto para descubrir los grandes temas dominicales. La primera lectura, casi siempre del Antiguo Testamento, a veces se escoge porque en el evangelio se alude a ella.

Decía san Ambrosio que la Iglesia, en Cuaresma, se compone de catecúmenos y penitentes. La doble finalidad de la Cuaresma (conversión para llegar santamente a la Pascua, catequesis para recibir o renovar el bautismo) explica los grandes temas recurrentes.

Conversión o penitencia

Dios es misericordioso, pronto al perdón, pero su paciencia nos exhorta a convertirnos. De ahí las exhortaciones proféticas, las confesiones colectivas de los pecados y las enseñanzas sobre las exigencias concretas de la conversión.

La oración

Es, con el ayuno y la limosna, una práctica tradicional de este tiempo. Se nos invita a intensificarla y se nos dice cómo ha de ser.

El ayuno

Es el gran símbolo del tiempo cuaresmal, presentado como nuestra incorporación a los 40 días de ayuno de Jesús en el desierto, pero las lecturas insisten en las exigencias morales (ayunar de vicios, traducirlo en muestras de solidaridad) más que en la materialidad del sacrificio o privación.

Pasión

Si en las primeras semanas predominan los temas de la conversión, el ayuno y la oración, en las últimas se impone el tema de la Pasión, bajo diversas figuras del Antiguo Testamento pero sobre todo con perícopas de los capítulos 5-11 de Juan, sobre la actividad de Jesús en Jerusalén y las discusiones cada vez más tensas con los dirigentes judíos, que acabarán dándole muerte. Entre las primeras lecturas de figuras de la Pasión y estos evangelios, los salmos responsoriales se toman preferentemente de los llamados “salmos del justo perseguido”.

Catequesis bautismal

Siguiendo la pauta de las grandes catequesis patrísticas, se nos instruye sobre el bautismo y sus efectos con figuras o episodios del Antiguo Testamento o enseñanzas de Jesús. Hay también alusiones a ciertos ritos bautismales: exorcismos, unciones, enseñanzas del padrenuestro, enseñanza del decálogo, baño sagrado, etc.


TEMAS DE LAS MISAS DOMINICALES DE CUARESMA

Dom I.

Ciclo A

1. Gn 2-3. El pecado original. “Se les abrieron los ojos” (conciencia de pecado).
2. Rm 5. Por el pecado de uno vino la muerte; por la gracia de uno (Cristo) vino la redención.
3. Mt 4. Las tentaciones en el desierto: triple tentación.

Ciclo B

1. Gn 9. Alianza con Noé. El arca, símbolo del bautismo que nos salva.
2. 1 Pe 3. El arca de Noé era figura del misterio pascual y del bautismo.
3. Mc1. La tentación (global) en el desierto (breve). Entre los ángeles y las fieras.

Ciclo C

1. Dt 26. El credo primitivo de Israel: fe en el Dios que interviene en la historia salvando.
2. Rm 10. La profesión de fe en Cristo resucitado es lo que nos salva.
3. Lc 4. Las tres tentaciones. El diablo espera su ocasión.

Domingo II

Ciclo A

1. Gn 12. Vocación de Abraham, justificado por la fe.
2. 2Tm 1. Plan del Padre para salvarnos en Cristo.
3. Mt 17. Transfiguración.

Ciclo B

1. Gn 22. Sacrificio de Isaac, figura de la obediencia de Cristo hasta la muerte.
2. Rm 8. Dios entregó a a su Hijo por nosotros.
3. Mc 9. Transfiguración.

Ciclo C

1. Gn 15. Alianza y promesas a Abraham y su descendencia.
2. Flp 3-4. Nuestra transfiguración por la fe en Cristo.
3. Lc 9. Transfiguración.

Domingo III

Ciclo A

1. Ex 17. Moisés saca agua de la roca, figura de Cristo en la cruz.
2. Rm 5. La Pasión de Cristo, fundamento de nuestra esperanza.
3. Juan 4. La samaritana. El agua del bautismo nos da la vida.

Ciclo B

1. Ex 20. Moisés transmite el decálogo (rito catecumenal de la “traditio legis”).
2. 1 Cor 1. El kerygma: “Nosotros predicamos a Cristo crucificado”.
3. Juan 2. Purificación del Templo. Cristo resucitado es el nuevo Templo.

Ciclo C

1. Ex 3. Vocación de Moisés para liberar al pueblo elegido.
2. 1 Cor 10. Las maravillas del desierto, figura de los sacramentos.
3. Lc 13. Signos de los tiempos. La higuera estéril. Urgencia de la conversión.

Domingo IV

Ciclo A

1. 1 Sam 16. David, el “ungido” (Mesías, Cristo). Nuestra unción bautismal.
2. Ef 5. El bautismo, paso de muerte a vida, de las tinieblas a la luz.
3. Juan 9. Cristo, luz del mundo, da la vista al ciego. Iluminación bautismal.

Ciclo B

1. 1 Cron 36. La deportación de Babilonia y la repatriación: el nuevo Israel.
2. Ef 2. Injertados en Cristo por el bautismo, participamos de su misterio pascual.
3. Juan 3. Nicodemo. Cristo ha de ser levantado, como la serpiente en el desierto.

Ciclo C

1. Jos 5. Josué celebra la primera Pascua en la tierra prometida.
2. 2. 2 Cor 5. Reconciliación con el Padre por medio de Cristo: convertirnos.
3. Lc 15. El “hijo pródigo”. Misericordia del Padre. Reconciliación fraterna.

Domingo V

Ciclo A

1. Ez 37. Os sacaré de los sepulcros, os infundiré mi espíritu y viviréis.
2. Rm 8. Resucitados en Cristo, vivimos de su Espíritu.
3. Juan 11. Resurrección de Lázaro. El bautismo como resurrección.

Ciclo B

1. Jr 31. La nueva alianza en la sangre de Cristo, inscrita en los corazones.
2. Hb 5. Oración angustiada de Cristo al Padre, que podía salvarle.
3. Juan 12. El grano de trigo. “Mi alma esta agitada... pero para esto he venido”.

Ciclo C

1. Is 43. Dios hace algo nuevo: un camino por el desierto, ríos en el yermo.
2. Flp 3. Experimentar la fuerza de la resurrección de Cristo y sus padecimientos.
3. Juan 8. La mujer adúltera: “Yo tampoco te condeno. No peques más”.


TEMAS DE LAS MISAS FERIALES DE CUARESMA

Ceniza
jueves
viernes
sábado

Primera lectura

Jl 2: ayuno. - 2 Cor 5: conversión
Dt 30: los dos caminos
Is 58: el verdadero ayuno
Is 58: las buenas obras

Evangelio

Mt 6: ayunar para ser vistos por el Padre
Lc 9: tomar la cruz y seguir a Jesús
Mt 9: vendrán días de ayuno
Lc 5: conversión de los pecadores


I lunes
I martes
I miérc.
I jueves
I viernes
I sábado

Primera lectura

Lv 19: decálogo
Is 55: eficacia de la Palabra de Dios
Jon 3: conversión de Nínive
Est 14: oración de Ester
Ez 18: conviértete y vivirás
Dt 26: compromiso de la Ley

Evangelio

Mt 25: obras de misericordia
Mt 6: el Padrenuestro
Lc 11 el signo de Jonás
Mt 7: eficacia de la oración
Mt 5: urgencia de la reconciliación
Mt 5: la nueva Ley de Jesús


II lunes
II martes
II miérc.
II jueves
II viernes
II sábado

Primera lectura

Dn 9: confesión de los pecados
Is 1: exhortación a la conversión
Jr 18: complot contra el profeta
Jr 17: renuncia a vanas seguridades
Gn 37: José, víctima de sus hermanos
Mi 7: Dios es pronto al perdón

Evangelio

Lc 6: perdonar para ser perdonados
Mt 23: fraternidad cristiana
Mt 20: anuncio de la Pasión
Lc 16: el pobre Lázaro y el rico comilón
Mt 21: los viñadores matan al Hijo
Lc 15: el padre amoroso del hijo pródigo


III lunes
III martes
III miérc.
III jueves
III viernes
III sábado

Primera lectura

2 R 5: Naamán, figura del bautismo
Dn 3: confesión de los pecados
Dt 4: Moisés da el decálogo
Jr 7: infidelidad a la alianza
Os 14: exhortación a la conversión
Os 6 exhortación a la conversión

Evangelio

Lc 4: Naamán, figura de los gentiles
Mt 18: perdonar 70 veces 7
Mt 5: Jesús perfecciona la Ley
Lc 11: exorcismo (rito bautismal)
Mc 12: el primer mandamiento
Lc 18: oración del publicano


IV lunes
IV martes
IV miérc.
IV jueves
IV viernes
IV sábado

Primera lectura

Is 65: Dios renueva Jerusalén (Iglesia)
Ez 47: agua salida del Templo
Is 49: un tiempo de gracia
Ex 32: Moisés implora el perdón
Sa 2: complot contra el justo
Jr 11: complot contra el profeta

Evangelio

Juan 4: la fe del funcionario salva a su hijo
Juan 5: el paralítico de la piscina
Juan 5: el paralítico de la piscina
Juan 5: el paralítico de la piscina
Juan 7: quieren matar a Jesús
Juan 7: quieren prender a Jesús


V lunes
V martes
V miérc.
V jueves
V viernes
V sábado

Primera lectura

Dn 13: historia de Susana
Nm 21: la serpiente en el palo
Dn 3: los tres jóvenes en el horno
Gn17: las promesas a Abraham
Jr 20: complot contra el profeta
Ez 37: nueva alianza en la sangre

Evangelio

Juan 8: la mujer adúltera
Juan 8: Jesús, levantado en la cruz
Juan 8: quieren matar a Jesús
Juan 8: quieren matar a Jesús
Juan 10: quieren matar a Jesús
Juan 11: Caifás: conviene que muera uno...
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