El Papa pide perdón a los indígenas canadienses: "Siento indignación y vergüenza"
Francisco confirma, como adelantó RD, que viajará "a sus tierras natales"
"La Iglesia está de su lado, y quiere seguir caminando con ustedes (…). Estaré encantado de visitar sus tierras natales, donde viven, sus familias. Me despediré de ustedes en Canadá, donde podré expresarles mi cercanía"
“No, sin una firme indignación y sin memoria, los problemas no se pueden resolver”, señaló el Papa, quien también admitió su “vergüenza, dolor y deshonra, por el papel que los católicos han jugado en todos los abusos, y faltas de respeto hacia su identidad, su cultura o sus valores espirituales”
“Siento indignación y vergüenza”. Rotundo, claro, sin ambages, el Papa Francisco pidió “perdón por la deplorable conducta de los miembros de la Iglesia” a los pueblos originarios canadienses, durante una emotiva audiencia en la que, además, Bergoglio confirmó la noticia -adelantada por RD- de que “estaré encantado de visitar vuestras tierras natales, en Canadá, donde podré expresar mi cercanía a ustedes y sus familias”.
Una audiencia con multitud de colores, de lágrimas, y también de danzas y expresiones antaño prohibidas por la “cultura colonialista de la asimilación” que rompió la vida de cientos de miles de indígenas canadienses.
“Todo esto es contrario al Evangelio de Jesús”, clamó Francisco, quien admitió su indignación “porque es injusto aceptar el mal, y aún peor acostumbrarse al mal como si fuera una dinámica ineludible”. “No, sin una firme indignación y sin memoria, los problemas no se pueden resolver”, señaló el Papa, quien también admitió su “vergüenza, dolor y deshonra, por el papel que los católicos han jugado en todos los abusos, y faltas de respeto hacia su identidad, su cultura o sus valores espirituales”.
"Lo siento mucho, de corazón"
“Pido perdón a Dios y quiero decirles de corazón: lo siento mucho”, rogó el Papa, acompañado del pleno de los obispos canadienses, quienes ya han emprendido un proceso de reparación frente a las atrocidades del pasado.
Fue más allá Bergoglio. “Es evidente que no se pueden transmitir los contenidos de la fe de forma distinta a la misma fe. Es terrible cuando en nombre de la fe se rinde un contratestimonio al Evangelio”.
“Necesitamos reconstruir una alianza entre abuelos y nietos, yo quisiera estar con ustedes allí”, proclamó Francisco, quien sostuvo que “la Iglesia está de su lado, y quiere seguir caminando con ustedes (…). Estaré encantado de visitar sus tierras natales, donde viven, sus familias. Me despediré de ustedes en Canadá, donde podré expresarles mi cercanía”. Aunque no especificó fecha, todo parece indicar que la visita se hará coincidir con el Día de los Abuelos, que se celebra el 26 de julio, tal y como adelantó Rd.