Impresionante oración global auspiciada por el Papa para frenar la epidemia mundial "Queremos implorar misericordia para la humanidad, duramente golpeada por la pandemia del coronavirus"

“Queremos implorar misericordia para la humanidad, duramente golpeada por la pandemia del coronavirus”. La imagen es impactante. Un Papa inmensamente solo, en pie, desde su despacho, rezando, con un solo corazón, la oración más universal: el Padre Nuestro.

Junto a él, de forma virtual pero muy muy real, cristianos de todo signo, creyentes de toda condición, incluso incrédulos, acompañando a través de las redes y en otro rincones del mundo. El obispo de Getafe, por ejemplo, arrodillado junto al monumento al Sagrado Corazón de Jesús, en otra impresionante imagen desde el centro geodésico de España. Y que ser repitió en miles de rincones del mundo, en miles de templos, millones de casas, centenares de conventos. Todos, unidos, contra el maldito virus.

“Hoy nos hemos reunido, todos los cristianos del mundo, para rezar el Padre Nuestro, la oración que Jesús nos enseñó”, señala Francisco. “Como hijos confiados nos dirigimos al Padre. Hacemos esto todos los días, varias veces al día; pero en este momento queremos implorar misericordia para la humanidad duramente golpeada por la pandemia del coronavirus. Y lo hacemos juntos, cristianos de todas las Iglesias y Comunidades, de todas las edades, lenguas y naciones”. Una auténtica oración global, para una epidemia global.

“Rezamos por los enfermos y sus familias; por los trabajadores de la salud y los que los ayudan; por las autoridades, los organismos encargados de hacer cumplir la ley y los voluntarios; por los ministros de nuestras comunidades"

, clamó Bergoglio, quien insistió en que, como hizo María en la Encarnación, “nosotros también nos confiamos con plena confianza en las manos de Dios y con un corazón y un alma, rezando con un corazón y un alma”.