Jesús, fuiste grande y, a pesar de todo ¡ Sigues siendo tan pequeño!

A todos perdonaba Por todos no era perdonado. ¡Y hoy sigue amando y perdonando!

No criticaba a nadie!

Y de muchos fue muy criticado.

Jesús, fuiste grande y, a pesar de todo ¡ Sigues siendo tan pequeño!
Jesús, fuiste grande y, a pesar de todo ¡ Sigues siendo tan pequeño!
El rincón del peregrino: Alfonso Olaz
04 mar 2022 - 13:25
descarga (1)
descarga (1)

Amaba a todos

A nadie dejaba indiferente

De muchos era amado

Y de no pocos calumniado.

A todos perdonaba

Por todos no era perdonado.

¡Y hoy sigue amando y perdonando!

A cualquiera le ofrecía su esperanza

Y muchos la tomaron

Con todos misericordioso.

¡Hoy sigue siéndolo!

Nos dio de su pan. Y nos enseñó a ganárnoslo

¡Una causa invencible para Vivir nos mostró!

Y Nos ofreció el Camino, la Verdad y la Vida

¡Y unos cuantos lo tomaron!

¡Ahora mismo sigue haciéndolo!

¡Nos enseñaste a ser humildes como tu madre lo fue!

Cómo ella te enseñó

Para que así Viviéramos en la Verdad

Y fuéramos libres como tú lo fuiste

¡Para andar en la Verdad!

¡Si necesitabas un consejo, una palabra amiga!

A cualquiera que quisiera se lo ofrecías.

¡Él, Te enseñaba a discernir!

Mirando lo que tu corazón ansiaba.

Para que los demás recogieran los frutos.

¡Todavía lo sigue haciendo!

¡No era de este mundo!

Pero Vivió y amo más que ningún hombre ha vivido y amado en este mundo.

¡ Y Continúa!

¡Oraba, estando largos tiempos con su Padre, para no perder su espíritu!

Se alegraba con Él

¡¡Qué conversaciones tenía!!

¡Siempre estaba en paz!

Era La Paz y transmitía lo que salía de su corazón

Para que nosotros lo hiciéramos nuestro.

¡No criticaba a nadie!

Y de muchos fue muy criticado.

No era egoísta

Ni comilón, ni borracho

No era perezoso, ni avaricioso

No fue egoísta, ni orgulloso, ni indiferente con el hombre, ni con las causas de la mujer.

¡Sigue siendo igual, no ha cambiado!

¡No le intereso los primeros puestos!

¡A nosotros nos interesa y mucho!

¡Vivió como pensó!

Fue coherente en su vida.

¡Nada dejó a la improvisación!

Incluso hasta la propia pasión y muerte.

¡Curaba a los enfermos!

A los desconsolados les daba el consuelo.

¡Hacía reír a los que no reían!

Hablar a los que no podían.

¡Vivir el perdón

A todos los que lo necesitaban!

Para que fueran misericordia

Y bendición para sus hermanos.

Los humildes se le acercaban

Los poderosos guardaban la

distancia social.

¡Con la Hermana naturaleza respiraba Felicidad!

Se recostaba debajo del gran árbol y descansaba como un niño.

¡Sabía acariciar a los animales, besar a las plantas

Imitaba los sonidos de las aves, como solo un Ser espiritual sabe hacerlo!

¡Cuando tenía hambre, comía de los frutos de los árboles o de lo que recogían sus discípulos entre las gentes de la comarca!

¡Y a pesar de ser el Creador de todo lo que veo y de lo que no llego a ver, tú te haces

pan, muy pequeño, para nosotros!

ResponderReenviar

También te puede interesar

Lo último

stats