¡Vamos, hermano, con ese gozo santo que da el servir a los pequeños

No hay tristeza mayor
que un alma sin amor,
en batallita diaria,
y en noche sin aurora.

¡Ay, sufrir sin entender
la moneda de Dios
tirada en el fango
del pobre,
¡su dignidad robada!

¡Sobrevivir
en lenta agonía,
como guadaña cruel
que corta la esperanza cada día!

¡Sin esperanza!
¡Sin el canto del jilguero!
Como fuente sin agua,
el aire sin color,
y el Sol,nuestro hermano, sin brillo.

¡Con la voz callada,
el rostro de Cristo,desfigurado,
el alma quebrantada
y el corazón,
¡hecho trizas!

Tú, Amor, que habitas en el alma,
¡te muestras tal cual eres,
allá escondido
entre los campos
de nuestro corazón
donde todo es don
y se recibe con agradecimiento!

¡Y Tú nos juzgarás, con mirada tierna,
por haber pasado de largo
y no haberte reconocido en el pobre!

¡Llegará el día en que el pobre se levante
y golpee la puerta de nuestra conciencia!

¡Padre!
¡Dame el corazón quebrantado del pobre!
¡La chispa primera de tu amor!
¡Hacer tu voluntad con gozo!
¡El valor para abrazarla!
¡La luz en esta lucha
para ser pobre entre los pobres!

¡Siendo pájaro libre de tu Evangelio!
¡Haciendo granero contigo,del Reino!
¡Compartiendo tu semilla
con todos los hermanos,
con el gozo de la creación,
con todo lo que has creado!

¡Padre!
¡Porque hay esperanza,cierta y clara,
por uno solo de estos pequeños
que ame como Tú amas!
¡Para amar y ser amado en ellos!

¡Porque es posible,
¡SÍ!,VIVIR EL EVANGELIO
cuando nos dejamos amar por los pobres!

¡Sin tener nada,
como el hermanito de Asís,
como el Cristo pobre,
como María,la Madre del Sí!

¡No caminamos solos
por esta senda gozosa
del Evangelio!
¡Pongamos nuestra tienda al aire libre,
sin temor a las fieras!

¡De tu Amor, para todos!
¡De todos,para tu Amor!
¡En esta tierra bendita
de lucha y esperanza,que renace cada día!

¡Porque en cada niño que nace
Dios nos regala un nuevo comienzo!