¡Maestro, no me elegiste por mi humildad, sino para que sea humilde!

Mostrar la alegría verdadera de la humildad del Padre. En la Vida verdadera del Espíritu Santo.

Para servir a todos, y no poseer nada.

Ni tu propia vida.

¡Maestro, no me elegiste por mi humildad, sino para que sea humilde!
¡Maestro, no me elegiste por mi humildad, sino para que sea humilde! | Alfonso Olaz
Alfonso Olaz
01 jul 2023 - 19:14
¡Maestro, no me elegiste por mi humildad, sino para que sea humilde!
¡Maestro, no me elegiste por mi humildad, sino para que sea humilde! | Alfonso Olaz

¡Maestro, no me elegiste por mi humildad, sino para que sea humilde!

¡Cada día me lo recuerdas!

Caminar como los menores

Y con Francisco de Asís

Acompañando a los niños del Evangelio, los predilectos de Jesús

Teniendo la cara limpia del maestro

Sin tristeza en la mirada

Con la sonrisa verdadera

Para servir a todos, y no poseer nada

Ni tu propia vida

Solo la vida en Jesús

¡Y el corazón de Padre!

Y con Él harás su Voluntad día y Noche.

El humilde nada busca

Su Yo ya murió en el Yo del Padre-

Y descansa de verdad.

Porque cada día

con los ojos virginales del niño

Que destellan tu amor

reciben la palabra en la mirada del Padre

En los acontecimientos de cada día

Y hacen lo que Él les demanda.

Todo es sencillo

Para el que confía en Jesús.

Como los niños del Evangelio.

¡Y así transcurre su vida

Del Evangelio a la vida

Siendo ya libre y dispuesto para todo...!

Mostrar la alegría verdadera de la humildad del Padre

En el Camino recto del Padre

En la Verdad del hijo prometido

En la Vida verdadera del Espíritu Santo.

Y si acaso te preguntaron por Él

responde siempre con su palabra, siempre con la palabra del Maestro

Que es humilde y da la alegría verdadera, la del Evangelio.

Y no busques otra cosa

Que lo ya recibido por Él

Y por Él y por TÍ

Da gracias a Dios siempre por ello.

También te puede interesar

Lo último

stats