"La mujer tiene un papel central y fundamental en la Iglesia sin que esto pase por el ministerio ordenado" Monseñor Jesús Vidal, responsable de seminarios: "La Iglesia no es una empresa que se mida por resultados numéricos"

Jesús Vidal
Jesús Vidal

"Pormenorizar más (las estadísticas de seminaristas) nos parece que puede distraer y se presta a comparaciones engañosas"

"Buscar la mejor forma de atender a las comunidades con los presbíteros de que disponemos, asumiendo nuestra pobreza y viviéndola, no con tensión, sino con la alegría de la fraternidad sacerdotal y la entrega al servicio del pueblo"

"La mentalidad clerical tiene mucho que ver con las luchas de poder por imponer un estilo u otro en la Iglesia"

"Por mi experiencia como rector, en un seminario no conviene hacer revoluciones, sino ir poco a poco, cada año algún cambio, de forma que se vayan asumiendo con profundidad en el proceso formativo. No se trata de cambios formales, sino de renovación formativa"

"El celibato es una vocación preciosa, llena de fecundidad y no apareja mayor dificultad que la de la fidelidad matrimonial"

Jesús Vidal Chamorro (Madrid, 1974) es el obispo responsable de los seminarios españoles. A pesar de ser de los obispos más jóvenes de España, ya fue rector del seminario de Madrid y, desde la atalaya de su experiencia, no teme ni magnifica la crisis vocacional española. Por eso, asegura que "la Iglesia no es una empresa que se mida por resultados numéricos" y, por supuesto, no cree que la solución al invierno vocacional pueda remediarse ni con el celibato opcional ("una vocación preciosa") ni, mucho menos, con el acceso de la mujer al sacerdocio: "La mujer tiene un papel central y fundamental en la Iglesia sin que esto pase por el ministerio ordenado".

El lema de este año, 'Padre y hermano como San José', está lleno de evocaciones para los futuros sacerdotes, ¿verdad?

Así es. Se ha buscado mostrar que los sacerdotes nacen del Pueblo de Dios. Somos bautizados y hermanos en Cristo. El sacerdote es llamado de entre los bautizados para ser imagen del Padre, a imagen de Jesús. Se subraya de este modo la figura de San José, un hombre sencillo, del pueblo, llamado a ser imagen del Padre para Jesús. Es decir, por un lado muestra que nadie nace siendo sacerdote; por otro, que el sacerdote está llamado a ejercer la paternidad en la Iglesia. Es la idea expresada en la conocida sentencia de san Agustín: para vosotros soy obispo; con vosotros, soy cristiano.

Dia del seminario

Llama la atención que no se hayan publicado las estadísticas de los seminarios. ¿Por qué no se hizo?

Se darán las estadísticas de los grandes números en comparativa, que son los que interesan de verdad: número de seminaristas menores y mayores, entradas, y ordenaciones en el año anterior. Creemos que con esto es suficiente. Pormenorizar más nos parece que puede distraer y se presta a comparaciones engañosas.

¿La Iglesia española se ha resignado ya a un número cada vez más exiguo de aspirantes al sacerdocio?

Creo que no se trata de resignación, sino de acogida de la situación actual de la Iglesia, que vive en un tiempo nuevo que no puede compararse con épocas pasadas. Es evidente que como obispos nos preocupa la atención de las comunidades parroquiales y la presencia de presbíteros que las acompañen, pero creo que el discernimiento ha de dirigirse en un doble sentido. Por un lado, buscar la mejor forma de atender a las comunidades con los presbíteros de que disponemos, asumiendo nuestra pobreza y viviéndola, no con tensión, sino con la alegría de la fraternidad sacerdotal y la entrega al servicio del pueblo; por otro lado, cuidar las familias y las comunidades como espacios en los que se genere un verdadero ambiente de escucha vocacional. La vida de cada uno es una llamada. Cada miembro del pueblo de Dios tiene una vocación. Nosotros sólo hemos de acompañarle para que la escuche y pueda responder.

Jesús Vidal
Jesús Vidal

Hay quien dice que la escasez vocacional es un signo de los tiempos. ¿Usted qué cree?

Creo que la palabra escasez es relativa. Si miramos a muchos países de misión daría sonrojo decir que tenemos escasez de vocaciones. La Iglesia no es una empresa que se mida por resultados numéricos. Es el pueblo de Dios que camina en este tiempo, dando testimonio de la presencia de Cristo en medio de nosotros. Y Dios mismo ha dado organicidad a este cuerpo con las distintas vocaciones, por lo que dará las vocaciones que necesitemos en cada momento. A nosotros nos corresponde generar una cultura vocacional. Y con las vocaciones sacerdotales, consagradas y de familia que recibamos de Dios, seguiremos anunciando el evangelio.

¿En España, se está rompiendo la espina dorsal al clericalismo, como pide insistentemente el Papa Francisco?

Creo que la Iglesia está siempre en camino de conversión. El clericalismo, como cultura, es una enfermedad que toma formas muy diversas y creo que siempre será una tentación en la vida de la Iglesia. La concepción sinodal de la Iglesia subraya que todos formamos el Pueblo de Dios y que los ministerios ordenados y la autoridad que implican ha de vivirse no como un poder, sino como un servicio a la unidad. La mentalidad clerical tiene mucho que ver con las luchas de poder por imponer un estilo u otro en la Iglesia. Hemos de salir de posiciones de confrontación y conflicto para vivir en la alegría de saber que estamos llamados a servir a la catolicidad, donde todos tengan cabida en el seguimiento de Cristo.

Seminaristas de Madrid
Seminaristas de Madrid

¿Se está aplicando a fondo la 'Ratio fundamentalis sacerdotalis' en los seminarios españoles o algunos todavía se muestran remisos a hacerlo?

En septiembre de 2020 fue publicado el Plan de Formación Sacerdotal para España titulado: Formar pastores misioneros. Un plan que se aprobó sin ningún voto negativo de los obispos. Esta es la primera prueba del deseo de los obispos Españoles de aplicar la Ratio fundamentalis institutionis sacerdotalis en nuestros seminarios. Ahora, una vez publicado el Plan de Formación es el momento de ir estudiando profundamente este documento en los seminarios, para que se haga vida y se puedan dar los cambios necesarios.

Pero, por mi experiencia como rector, en un seminario no conviene hacer revoluciones, sino ir poco a poco, cada año algún cambio, de forma que se vayan asumiendo con profundidad en el proceso formativo. No se trata de cambios formales, sino de renovación formativa. En la comisión sabemos que estos cambios se están dando con decisión. Por poner un ejemplo, un tercio de los seminarios de España, entre los que se encuentran los más grandes, han incluido ya la etapa propedéutica y se está muy contento con las primeras impresiones. Y otros muchos seminarios lo tienen previsto para estos próximos cursos.

¿A los seminaristas de hoy les cuesta más asumir un compromiso para siempre, como el sacerdotal, y el celibato que lleva aparejado?

Hoy encontramos un hombre frágil para vivir opciones permanentes y esto afecta al sacerdocio, a la vida consagrada y al matrimonio. El Papa Francisco se ha referido en diversas ocasiones a esta dificultad. Hemos de ayudar a los jóvenes a descubrir la belleza de una opción definitiva que no encierra la vida, sino que abre al joven a una inmensa fecundidad. Uno manifiesta la libertad cuando elige de verdad y para siempre. Creo que el celibato es una vocación preciosa, llena de fecundidad y no apareja mayor dificultad que la de la fidelidad matrimonial. El joven de hoy necesita que le mostremos confianza en que puede apostar acogiendo la llamada de Dios de forma definitiva y acompañarle en los procesos formativos al sacerdocio, a la vida consagrada o en el noviazgo para darles las herramientas que les permitan permanecer afianzados en la gracia del Señor.

Celibato
Celibato

¿Es usted partidario a corto/medio plazo del celibato opcional y del sacerdocio de la mujer?

Son asuntos distintos. Las Iglesias orientales han mantenido la antigua costumbre de ordenar a varones casados. Esta es una realidad cada vez más presente entre nosotros por la inmigración. La Iglesia latina, sin embargo, desde antiguo ha permanecido también en la decisión de llamar al sacerdocio sólo a aquellos que han escuchado la llamada a una vida célibe para una mayor configuración con Cristo Esposo de la Iglesia. Creo que es un camino que ha dado un inmenso fruto y no me parece que estemos ahora llamados a cambiar esta elección.

Por otro lado, sí que es una tradición constante en todas las Iglesias la elección del varón para el ministerio ordenado. Sería largo entrar aquí en las razones teológicas que sostienen esta elección. Creo que la mujer tiene un papel central y fundamental en la Iglesia sin que esto pase por el ministerio ordenado. La Iglesia no es una sociedad de poder, sino de servicio y en ella la alteridad de las diversas vocaciones permite que todos tengamos un lugar adecuado, de forma que el cuerpo se mantenga en un precioso equilibrio, tal como el Señor nos dejó indicado. El camino en el que hemos de seguir creciendo es el de la sinodalidad. Me parece que acerca de este asunto, el propio Papa Francisco ha sido muy claro.

Jesús Vidal
Jesús Vidal

¿Ante la actual escasez vocacional, España tendrá que seguir importando sacerdotes?

España ha sido un país tremendamente misionero que ha enviado un grandísimo número de sacerdotes a otros países. Ahora es la iglesia en otros países la que colabora con la iglesia en España. Estamos llamados a acoger e integrar a personas migrantes que han salido de su tierra buscando lo mejor para sus familias o huyendo de situaciones de violencia o penuria económica. Ahora viven entre nosotros y aportan mucho al crecimiento de nuestra nación. ¿Cómo no vamos también a acoger a sacerdotes que, por distintas razones, han venido a nosotros? La catolicidad de la Iglesia nos permite decir que entre nosotros nadie es extrangero. Para esto es también muy importante la comunión universal entre las Iglesias. Los obispos vivimos una solicitud universal por todas las Iglesias en comunión con el Santo Padre y espero que España pueda seguir enviando sacerdotes misioneros. El hecho de tener menos vocaciones que en otras épocas no debe disminuir la generosidad de nuestras iglesias.

El hecho de que los seminaristas de hoy sean 'nativos digitales' juega a su favor o en su contra?

La revolución digital es un hecho y Dios llama a jóvenes de este mundo, que están inmersos en el ambiente digital. No creo que en sí mismo sea un factor que juegue a favor o en contra. Me parece un rasgo muy positivo que los jóvenes que se acerquen a nuestros seminarios por haber escuchado la llamada del Señor sean jóvenes que viven en el mundo. Así lo fueron los apóstoles, a los que el Señor llamó en medio de sus ocupaciones. Como todo rasgo cultural, debe ser purificado en el tamiz del evangelio para que la respuesta del joven pueda dar un fruto abundante.

La revolución digital apenas está comenzando, por lo tanto es muy importante que los sacerdotes jóvenes conozcan a fondo esta cultura que nos rodea y que cada vez nos está configurando de un modo más fuerte en la raíz antropológica. También se ha de dar un proceso de inculturación del evangelio en la cultura digital y sin duda serán aquellos jóvenes, nativos digitales, llamados por el Señor y profundamente unidos a Él los más capaces para hacerlo en la nueva época que ya ha comenzado.

Jesús Vidal, con el Papa

Por una Iglesia mejor informada.
Solo gracias a tu apoyo podemos seguir siendo un medio de referencia.
Hazte socio/a de Religión Digital hoy

Etiquetas

Volver arriba