Francisco Pérez se negó a acudir a la jornada de las víctimas La nueva excusa del arzobispo de Pamplona: "Los abusos sexuales son un mal social, no solo de la Iglesia"

El arzobispo de Pamplona, Francisco Pérez
El arzobispo de Pamplona, Francisco Pérez

"Lo organizaron ellos, no contaron con nosotros y por lo tanto nosotros declinamos la invitación", fue la razón por la que la diócesis no acudió al encuentro de víctimas

Gema Varona, a los curas de Cartagena-Murcia: “Dentro de la Iglesia ese impacto es diferente, porque se produce además una traición de la confianza institucional y espiritual”

El arzobispo de Pamplona, Francisco Pérez, repitió este mediodía una de las excusas más manidas a la hora de responder a las acusaciones de pederastia contra la Iglesia católica. "Los abusos sexuales son un mal social, no solo de la Iglesia. Ocurren en muchos ámbitos".

"Es un pecado dentro de una sociedad convulsa, difícil" que "ocurre en muchos ámbitos, no solamente en la Iglesia", remachó el prelado, que insistió en que "la Iglesia se disculpa ante estas circunstancias, como siempre ha hecho".

Cuidar todos los ámbitos

"Tenemos que hacer las cosas pero sabiendo que es un mal social, no es un mal solamente de una institución sino de muchas instituciones que se está dando hoy en la vida social", apuntó, abogando por "ir a las raíces e ir curando todas estas cosas y previniendo de todo esto".
"Estamos en una sociedad donde tenemos que cuidar todos los ámbitos y en ese sentido la Iglesia está haciendo su camino y trata de hacerlo lo mejor posible", ha concluido.

El prelado, preguntado sobre la no asistencia de una representación del Arzobispado en la jornada organizada por la Asociación de Víctimas de Abusos en Centros Religiosos de Navarra, se despachó con un "la asistencia es libre", y otra lacónica respuesta: "Lo organizaron ellos, no contaron con nosotros y por lo tanto nosotros declinamos la invitación".

El arzobispo ha destacado que, en esta cuestión, "estoy siguiendo las pautas del Papa Francisco en todo momento" así como "los protocolos propios que nos da la Conferencia Episcopal española". Unos protocolos que, por otro lado, no se han modificado desde 2010.

Revictimizar a los supervivientes

Mientras tanto, en la diócesis de Cartagena-Murcia parece que se toman bastante más en serio la lucha contra los abusos. Así, la criminóloga y una de las mayores expertas en esta lacra, Gema Varona ofreció un curso de formación permanente para el clero, hablando a los sacerdotes murcianos sobre las víctimas, los procesos de revictimación y recuperación y cómo hay que "intervenir sin causar un daño añadido”.

La ponente ha explicado el gran impacto que los abusos sexuales sufridos durante la infancia o la adolescencia pueden tener sobre la persona y ha remarcado que las víctimas piden “verdad, justicia, reparación y apoyo”. También ha hablado de la victimización secundaria, el daño añadido a la víctima que puede producirse después del delito.

Gema Varona, a los sacerdotes de Murcia

La justicia restaurativa ha sido otro de los temas abordados. Una justicia que va más allá del concepto tradicional, que busca establecer encuentro y diálogo entre víctimas, agresores y otros agentes implicados para reparar el daño.

Gema Varona ha señalado que los abusos sexuales ocurren en todos los contextos de la sociedad, particularmente en el ámbito de la familia, pero también en contextos institucionales como pueden ser la universidad o la Iglesia. “Dentro de la Iglesia ese impacto es diferente, porque se produce además una traición de la confianza institucional y espiritual”, ha destacado.

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