Solidaridad y compromiso con los más vulnerables

La pandemia aumentó un 40% el número de personas en  situación de extrema necesidad.

Solidaridad y Compromiso

Queridos amig@s Colaboradores y Cooperantes  en la lucha por un mundo mejor:

El domingo pasado, mediante un mensaje urgente,  hablábamos de la necesidad de colaborar con la Cocina Económica de Gijón para distribuir más de 700 comidas diaras, porque para poder vivir, lo primero es comer. La pandemia aumento un 40% el número de personas especialmente vulnerables. Muchas gracias a las 101 personas que habéis leído el mensaje de WhatsApp y respondido a su llamada, incluidos dos niños que se pusieron de acuerdo para, juntos, hacer su aportación a esta urgente necesidad. Gracias también a los que estáis dando respuesta al correo de ayer y reenviando ambos comunicados a vuestros contactos.

Ayer hablamos con un nigeriano que estaba pidiendo en la calle. Nos manifestó que lleva 7 meses en España y que también acude a los servicios de la Cocina Económica. Nigeria, en Africa, es uno de los países más pobres del mundo. La Renta Media por Persona y Día es de tan solo 4,7 euros: para que nos sirva de comparación, en España es de 74,4 euros (datos de 2018). La diferencia es abismal. Los habitantes de Nigeria tienen un bajísimo nivel de vida y no les queda más remedio que emigrar para no morir de hambre.

Pero, qué pasa en el mundo? Qué hay detrás del coronavirus? En manos de quién estamos?

En el XL semanal nº 1711, 9 al 15 de agosto, se habla de Jeff Bezos, el más rico del mundo. Es el dueño de Amazon, que “ha construido un imperio sin precedentes en la historia del capitalismo”. “Es el vencedor de la crisis del coronavirus. Amazon aumentó tanto sus ventas que tuvo que contratar a más de 100.000 repartidores”. Su patrimonio anda por los 164.000 millones de euros. Quiere vender a todo el mundo, entrar en todos los hogares. Su asistente de voz que todo lo graba, accederá a nuestros datos de salud. Quiere poner mil satélites en órbita para facilitar las compras instantáneas. Ya tiene a 840.000 empleados. El valor de sus acciones casi se duplicó desde el comienzo de la pandemia. Tiene 600 millones de artículos a la venta en todo el mundo. Ya se hacen más búsquedas de productos por Amazon que por Google.

La pregunta que tantas veces nos hemos hecho: ¿a dónde nos conduce que cada vez hay más en menos manos y más manos con menos? ¿A dónde nos conduce la desigualdad cada vez mayor que hay en el mundo?

“La pandemia está acelerando ciertas tendencias ligadas a las nuevas tecnologías. Una es la devaluación salarial. Compramos más barato porque somos más pobres, pero también somos más pobres porque compramos más barato. Es el efecto Amazon, que empezó tirando los precios para echar a la competencia y que ahora amenaza los sueldos”. (Para más información sobre Bezos y Amazon, ver la citada revista)

Una última consideración: ¿Qué hay detrás de la marea de personas que en diferentes países niegan la existencia del coronavirus y la crisis sanitaria o atribuye la pandemia a un intento de manipular a los ciudadanos?

Se habla de la propagación de teorías de la conspiración y campañas de desprestigio y ataque a los gobiernos, a los científicos y a las instituciones sanitarias a costa del coronavirus y alentadas por una mezcolanza de grupos supremacistas, antisistema, de ultraderecha, seguidores de pseudociencias y movimientos “alternativos”.

Los gobiernos, los investigadores, los educadores, los profesionales de la salud,  los políticos y todas las entidades de incidencia social, tienen que estar muy atentos a hacer las cosas con rigor, con coherencia, con criterios razonados, con unidad de acción, con independencia absoluta de todo partidismo, para dar a la sociedad seguridad y confianza, un horizonte de esperanza y crear un clima de sana convivencia social, así como romper con la escalada cada vez más acelerada de desigualdad  e injusticia social, apostando por la igualdad, la justicia,  la solidaridad, la fraternidad, la unidad entre todos los seres humanos y toda la creación. Por ahí nos quiere llevar el Papa Francisco en coherencia con  el mensaje de Jesús de Nazaret, pero ni siquiera no pocos de “su casa” le hacen caso. Hoy hay más medios que nunca para hacerlo, pero hace falta voluntad política de todos los gobernantes y de toda la sociedad.

Faustino Vilabrille

faustino.vilabrille@gmail.com

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