Diario senti-mental 17

LLUEVE EN MONEGROS


Melancolía es la dicha
de estar triste (V.Hugo).


Llueve y llueve sobre seco
y mojado
en el desierto de los Monegros
sobre aliagas de esparto
y un incierto espanto
presidido por la virulencia
del coronavirus.
En un descanso la gente
sale de sus casas a la calle
calladamente
caminando sigilosa
en medio de una vida
encharcada
aterida de humedad y frío.

Llueve llueve sobre mi alma
arremolinada
enclaustrada en este viejo
claustro
donde cultiva virtudes antiguas
y nuevos vicios posmodernos
como la red de internet.
Una y otra vez replica la pantalla
y repica la campana
del virus
su interminable recuento de contagios
y muertos
a la espera de la vacuna salvadora
que la ciencia prepara a ciencia
incierta
y a conciencia pasada.

No por eso deja de llover
intermitentemente
dentro del corazón atribulado
y solo
en esta desolada soledad del desierto
de los montes negros
y su deserción.
Recuerdo aquí los viejos verdores
europeos
y sus viejas verdades grises
pero aquí siento un sentido
un sentimiento
el humus de una tierra sedienta
y sediciosa.
Que llueva pues y llueva
la Virgen de la cueva
que llueva sobre el campo
y sus madrigueras
sobre mi testa testaruda
y sus enredaderas.

Llueve tal y como aquí
vivimos
a trompicones y a salto
de mata
entre los arbustos y los exabruptos
la sequedad del aire
y el dulzor
de la lluvia en Monegros.
Pero esta vez el agua diluye
los perfiles
y agua mis intenciones
oscurece mi mente
y cae sobre mi pobre pecho
horadado
y mis piernas arqueadas
por el peso.
Pues la lluvia es mi llanto
proyectado
y el agua revertida de mi anhelo:
anhelo de un amor interminable
nostalgia de un amor intermitente
melancolía de un amor desangelado.

(Que en los Monegros el agua
desleída
se trasfigura en vino viejo).


DUELO DE SER


---El coronavirus ha puesto al hombre en su sitio: el lugar del hombre en el cosmos oscila entre el ser y el no ser.


---En medio de la negatividad: acordarse en la oscuridad de alguna lucecita de amor aún encendida (Dios,familia, amigos, proyección, suerte).

---Siempre hay algo o alguien a lo que agarrarse en situaciones-límite: incluso al propio límite como una frontera o frontispicio.

---Agarrarse al confín o finitud, a la contingencia o posibilidad, al huecograbado que deja el sinsentido: agarrarse al no hasta su defección o autonegación.

---Brindar por la vida contra la vida: y brindar por la muerte contra la muerte.

---La contractura de mi estómago me contrae el cuerpo, me roza el alma y se diluye en el espíritu.

---Escribir para paliar la angustia y poder decir: estoy aún aquí (da-sein).

---La ambivalencia de la vida y la muerte, del amor y de Dios: cuyo nombre es santo y terrible, según la propia Biblia.

---Lástima tengo de mi, por ser mi mal tan entero: muerte do el vivir se alcanza, para ganarte perderte (Teresa de Jesús).

---Compadecerse del sufrimiento ajeno como si uno no sufriera por sí o por otros: eso es de inconscientes.

---La filosofía se atiene a la razón y la psicología al corazón: por una psico-filosofía de la razón afectiva.

---Nuestro lenguaje discurre como un río dulce: hacia la mar salada del silencio.

---La actual decepción del hombre consigo mismo: y con el mundo.

---Como decía Shakespeare, cualquiera puede dominar su sufrimiento: menos el que lo sufre.

---Quizá el ciudadano de la ciudad es más sensible: y quizá el villano de la villa o pueblo está más curtido.

---El tramposo cae en su propia trampa: como el envidioso en su propia envidia.

---En España seguimos teniendo un hiato entre nuestro viejo Imperio y nuestra decadencia y poquedad.

---El amor pagano se paga y se apaga: el amor religado y misterioso se aviva como un cirio encendido en la oscuridad.

---La razón es ilustrada y desmitologizadora: el amor es romántico y misticoide.

---Según N.Cusa, el mundo es la explicación de Dios: y Dios la implicación del mundo.

---Por su parte el hombre según el Cusano es la infinitud finita o delimitada.

---La infinitud finita del amor: dios encarnado.

---Según E.Fromm, la clase básica o fundamental del amor es el amor fraterno.

---Nunca he sido torticero: solo y siempre ortizero.

---Mi indefinida saudade y melancolía, soledad y nostalgia.

---Me conturban las sonrisas celestiales de tantos creyentes: beatos.

---Voy marchando poco a poco hacia el otro mundo: otros van más deprisa o más despacio, y otros ni se enteran de su finitud (estos últimos son los infinitamente necios de la Biblia).


---Alguien me dice que no hable tanto de la muerte: con no leerme en paz, pues yo soy filósofo y mortal.

---La poesía mira la realidad sub-realmente y la traspone supra-realmente: toda poesía es surreal en este doble sentido.

---La filosofía pregunta qué es la realidad por el hecho trascendental de ser.

---En Heidegger la verdad dice descubrimiento: y la falsedad encubrimiento.

---Y lo que la verdad descubre frente a su encubrimiento es el ser-para-la-muerte: el cual es el cumplimiento del tiempo y de nuestra temporalidad.

---Nuestro ser comparece así entre el horizonte ocluido del tiempo y el espacio abierto del mundo: entre la necesidad o destino inmanente y la apertura trascendental.

---La lotería de la vida: lo que nos toca es destino, y lo que no nos toca libertad.

---Los bien-pensantes suelen pensar bien de ellos: y mal de los demás.

---El amor no es nunca a mi manera, sino a nuestra manera recíproca: y en el fondo a su manera.

---Tomar la realidad en positivo y en negativo: atraviesamente.

---Me ha caído en suerte el dolor y el amor: para que éste sublime o trasfigure aquél.

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