Cáritas Diocesana de Astorga, se suma el próximo domingo día 25 de Octubre a la Jornada Nacional de Personas sin Hogar que organiza Cáritas Española, junto con la otra organización agrupada en la Federación de asociaciones de centros para integración y ayuda a marginados (FACIAM).

Esta jornada servirá como reflexión para dar a conocer la realidad que existe en nuestra sociedad y denunciar la situación de las personas sin Hogar en el país.

En la diócesis de Astorga hay dos albergues uno en Astorga y otro en Ponferrada y otras actuaciones para atender a las personas sin hogar.

Concretamente en la ciudad de Astorga, existe "La Casita de San José", que recoge y atiende a las personas transeúntes, sin techo, ni hogar estable.

Según explica Juan Manuel Prieto Alvare, responsable de Casita de San Jose de Astorga, "la vivienda es un derecho humano  necesario para preservar la dignidad de las personas". "La pandemia que sufrimos nos ha situado ante una sociedad frágil, vulnerable, necesitada de defensa y protección frente al coronavirus ya que no tener casa significa inseguridad, riesgo o falta de higiene".

En este contexto, Cáritas Nacional y, por tanto, Cáritas Diocesana de Astorga, solicita a las Administraciones públicas una Ley estatal de garantía de acceso a la vivienda además de la promoción, rehabilitación y mantenimiento de un parque público de vivienda. Además apuesta por definir una estrategía de lucha contra la exclusión residencial y sin hogarismo y la paralización de los desahucios y desalojos con un alojamiento alternativo.

Nuestra Diócesis cuenta con dos albergues para atender a las personas con estas necesidades. En Ponferrada el Hogar del Transeúnte "San Genadio". En Astorga funciona "La Casita de San José", albergue de corta estancia, regentado por Cáritas Diocesana que, de lunes a viérnes da un servicio de manutención, ropero, lavandería, etc. y donde se acoge a las personas de forma integral. "Se les aconseja y orienta a que se dirijan a los albergues de larga estancia que Cáritas Regional tiene para una atención completa con profesionales que les puedan ayudar a normalizar su vida", afirma Prieto.

El número de personas que se atiende en la "Casita de San José" es de 387 anuales, de los cuales 379 son hombres y 8 mujeres, un 72% son españoles y 17% son de la Unión Europea, por lo que un 11% podrían considerarse extranjeros. "La mayoría estan comprendidos entre 40 a 65 años, por lo que podemos decir sin equivocarnos que el prototipo sería un varón, español, de media edad, con diferentes problemáticas: paro, problemas socio-sanitarios -tanto de comportamiento como patología de adicciones, trastornos psiquiátricos, de afectividad o comportamiento-", apunta el responsable de la Casita.

La financiación de este centro es posible "gracias al esfuerzo del Obispado de Astorga, Cáritas Diocesana y una subvención de la Junta".