La Iglesia de la cual se trata es la de la Institución eclesial: Papa, cardenales, obispos, Estado del Vaticano. No se trata del pueblo de los creyentes sino de la jerarquía eclesial. Los hechos son suficientes para demostrar y probar esa dependencia de esa iglesia al servicio del imperio. 

Todo empezó con el pacto del Papa Juan Pablo IIcon el presidente Ronald Reagan, en junio 1982, y el pacto del Papa Francisco con Obama. Pactos que comprometían la Iglesia, junto al imperio, en la lucha en contra de todas las formas de socialismo. Verdadera amenaza contra del imperio.  

https://www.pagina12.com.ar/diario/elmundo/4-262407-2014-12-21.html

La emergencia de países, en búsqueda de sus independencias y soberanas así que de una alternativa al capitalismo salvaje del cual sufren sus pueblos, fueron, rápidamente, identificados al comunismo de los tiempos de Stalin, en la ex URSS. Hasta el movimiento católico de “la teología de liberación” fue identificada a ese comunismo con todas las etiquetas que conocemos: marxista, dictatorial, anti-democrática, violenta y mas… 

En los últimos tiempos asistimos a la emergencia de un conjunto de países, latinos americanos, que desarrollaron un socialismo, calificado de democrático, humanista, cristiano y anti-imperialista. Fue el caso de Venezuela, con Chávez, de Ecuador, con Rafael Correa, de Argentina con Cristina Fernández y su esposo, de Daniel Ortega en Nicaragua, de Lula da Silva en Brasil, de Evo Morales en Bolivia, de Fidel Castro en Cuba, De Manuel Zelaya en Honduras y unos otros mas…. 

Todos fueron calificados de comunistas y fueron objetos de rechazo por Washington con la complicidad de la Iglesia institución.  Ante tal situación, no podemos callarnos. El papa Francisco, en su Encíclica Evangelii Gaudium,  recuerda, entre otras cosas, que no hay que confundir la ideología con los hechos. De la ideología se puede decir todo, que sea real o no, mientras que dejar hablar los hechos que componen la realidad  uno llega a conclusiones distintas de las proclamadas por la ideología. 

En general, Papa, cardenales, obispos del Continente se hacen muy discretos sobre las intervenciones de Estados Unidos (Imperio) que trata, por todos los medios ilegales, tales las sanciones para desestatizar pueblos y gobiernos.  Por otros lados se hacen también muy silencioso sobre las realizaciones que aseguran al pueblo un mejor vivir, tales la educación y la salud gratuitas, residencias mas saludables para las familias humildes. Se cuentan por millones esas nuevas residencias para el pueblo humilde. De eso, no hablan. 

Que la Revolución bolivariana, sandinista, boliviana, cubana etc. Uno puede entenderlo y discutirlo a base de los hechos que correspondan a las leyes del país. 

Parece mas cómodo por la oposición eclesial de juntarse a la oposición radical para hablar de “dictador” un Presidente elegido por su pueblo y reconocido por las Naciones Unidas. 

Una vez conocidos los pactos firmados, entendemos mejor el comportamiento, tanto del Vaticano que de las conferencias episcopales. Recién, el episcopado cubano hizo declaraciones sobre las condiciones miserables del pueblo cubano: ausencia de alimentación que no se explica, segun ellos, que por el gobierno. Ni una palabra en sus dos declaraciones sobre los efectos criminales del bloqueo económico de que sufre Cuba desde mas de 60 años. No pueden pretextar que el bloqueo tiene nada que ver con ese problema de alimentación. Hace unos días, una gran mayoría de los países de las Naciones Unidas votaron fuertemente para que se ponga fin a ese bloqueo criminal contra un pueblo que respeta su independencia y soberanía y que hace presente en muchos países para la ayuda humanitaria cumplida por  sus centenares de médicos. 

Tales comportamientos se encuentran en los distintos episcopadoo de A.L. y de las Carabies.  

Conclusión 

Si la Jerarquía se puso del lado del Imperio en su lucha contra el socialismo, calificado de socialismo. humanista, cristiano,  anti-imperialista, por sus autores, no quiere decir que el “Pueblo de Dios” piensa igual a ella.  La gran mayoría de los dirigentes de los países  emergentes son de fe cristiana y actúan conforme a la doctrina social de la Iglesia que condena el capitalismo salvaje y invita a encontrar alternativas para una economía mas humana y justa para todos y todas.

El  Papa Juan XXIII nos da una buena lección para servir mejor el bien comun del Pueblo

https://www.religiondigital.org/humanismo_de_jesus/Papa-Juan-XXIII-Socialismo-XXI_7_1840385968.html

Con todo mi respeto

Oscar Fortín