La guerra híbrida que los EE.UU. y sus aliados han desatado contra Venezuela se ahonda más aun en tiempos de pandemia.Se violan descaradamente las leyes internacionales, garantes de la paz mundial, y tiene profundas implicaciones para la economía y democracia Latinoamericana.

Sanciones Ilegales 

Venezuela es un país asediado por los EE.UU. y sus aliados. Pretenden acabar con el gobierno legítimo y democrático del Presidente Nicolás Maduro. No tengan la menor duda: esta guerra no es para defender la democracia ni los derechos de los venezolanos/as. Es un vulgar intento de hurtar los inmensos recursos naturales de Venezuela: petrolero, oro, gas y minerales preciosos. Es indiscutible que Nicolás Maduro fue re-elegido el 20 de mayo del 2018 en elecciones transparentes, atestiguadas por más de 150 observadores independientes, en comicios donde se presentaron 6 candidatos opositores apoyados por 16 partidos de oposición, resultando que el presidente fue re-electo con más de 6 millones de votos, el 67% de los votantes. 

El asedio es un viejo instrumento brutal de guerra, tal como en tiempos medievales con la variante que hoy es un cerco económico, financiero, paramilitar, mediático, y diplomático. Su objetivo es no permitir entrada o salida de recursos, hasta que el hambre y la enfermedad de la población obliguen que se rinda o se tumbe el gobierno. 

El experto en Derechos Humanos de las Naciones Unidas, Alfred de Zayas lo ha dicho claramente:

“Las sanciones y bloqueos modernos son comparables a los asedios medievales... Las sanciones del siglo 21 tratan de doblegar a sus rodillas no una ciudad, sino un país soberano entero.”[1] Son un castigo colectivo y un crimen de lesa humanidad porque su principal objetivo es hacer sufrir a una población civil por razones políticas de dominación.

Venezuela depende de la venta del petróleo y depende enormemente de la importación de materiales básicos para su industria, alimentos y medicinas. Al no poder vender el petróleo, el gobierno venezolano perdió alrededor del 90% de sus ingresos. 

Esto ha creado enorme sufrimiento al pueblo venezolano. 

El asedio se lleva a cabo dentro del marco de una guerra híbrida no convencional caracterizada por: 

Primeramente, no es una guerra declarada, formal; es guerra sigilosa, disfrazada, con las ventajas de que así la nación opresora: esquiva cualquier regulación democrática interna pertinente a la declaración formal de guerra esquiva las leyes internacionales que rigen la conducción de guerra entre naciones.Segundo, la agresión se envuelve en algún razonamiento exagerado, falso: acabar con el comunismo, el terrorismo o el narcotráfico; y el favorito hoy en día: intervenir por razones dizque humanitarias para defender a una población a la cual no obstante, los poderosos están sometiendo a tortura económica. 

Las auténticas sanciones son las medidas multilaterales tomadas en conjunto por las Naciones Unidas. Lo que hace los EEUU es una burla: son unilaterales tomadas para el beneficio exclusivo de esa nación opresora bajo pretextos que ni ellos mismos creen. Por ejemplo: 

John Bolton, siendo Secretario de Estado, declaró que el objetivo de ellos en Venezuela es obtener el control de su petróleo.[2]El presidente Trump dijo, al estilo de un gangster, que no entendía porque no estaban en guerra contra Venezuela ya que “ellos tienen todo ese petróleo y están en nuestro patio trasero.”[3]El senador Republicano Richard Black admitió que los EEUU destruyó al bolívar a través del sistema bancario internacional e “hicimos de la moneda venezolana una chatarra y entonces les decimos “miren que malo es su gobierno que su moneda es chatarra”, pero no fueron ellos, sinonosotros que la volvimos chatarra”.[4]

EEUU pretende que sus medidas sean extra-territoriales, imponiéndoselas a otras naciones, sin importarle el estado de derecho de éstas. Son una amenaza profunda y siniestra a la soberanía de la nación-estado.

En Europa en el siglo 17, hubo 30 años de continuas guerras entre las naciones que estaba desangrando a Europa.  Estas cesaron en 1648 cuando se firmó la Paz de Westphalia donde se consagró el principio de la soberanía del estado-nación que establece que cada nación, grande o pequeña, tiene igual y exclusiva autoridad sobre su territorio y demás naciones no deben interferir en sus asuntos internos.  

Esta es la piedra angular de la ley internacional que aun hoy en día rige, consagrada en la Carta de las Naciones Unidas, entre otros instrumentos legales, que prohíben la intervención en asuntos domésticos de las naciones soberanas. 

Los EEUU y sus aliados violan las siguientes leyes que protegen la soberanía y el principio de no-intervención:

• Art. 2 de la Carta de las Naciones Unidas
• La Resolución 2625 y 3314de las NU
• Art. 19. Capitulo 4, de la Carta de la Organización de Estados Americanos (OEA)
• Art.7 del Estatuto de Romade la Corte Penal Internacional que considera sanciones unilaterales crímenes de lesa humanidad 

En marzo del 2014, el presidente de EEUU, Barak Obama emitió una orden ejecutiva declarando una emergencia nacional allegando que Venezuela era una amenaza “inusual y extraordinaria” a la seguridad de los EEUU. Provocó la risa del mundo. Cómo creer que el país de mayor poderío militar del mundo le temiera a una nación de tan poco poder como Venezuela? Cesaron las risas cuando se percibió que era una plataforma legal para que el presidente pudiese autorizar todo tipo de agresiones contra Venezuela, sin pedir permiso al Congreso. No presentaron evidencia alguna de cómo exactamente era que Venezuela amenazaba a los EEUU. Pero la evidencia no importaba para nada.

Trump utilizó este decreto de Obama para congraciarse con el significativo contingente de cubanos y venezolanos de extrema derecha que viven en Florida, y también favorecer las corporaciones estadounidenses.

Y así arremetió ferozmente contra Venezuela con: 

-          ataques paramilitares con ayuda de Colombia,

-          acusaciones de un inexistente narcotráfico

-          intentó asesinar al Presidente Maduro usando drones militares,

-          varios intentos de golpes de estado e invasiones de mercenarios 

-          multitudinario financiamiento de la oposición,

-          escases provocada de alimentos y medicinas,

-          apoyo al terrorismo de calle que dejaron muertos, heridos y daños millonarios a propiedades públicas, 

-          un terrible ataque cibernético a las instalaciones hidroeléctricas que dejaron al país en la obscuridad durante 6 días,

-          intentaron crear un gobierno y presidente alternativo en la triste figura del autoproclamado Juan Guaidó, sin elección o punto legal alguno, ni apoyo del pueblo.

-          Y asombrosamente Trump puso un precio a la cabeza del Presidente Maduro, tal cual como en los cuentos de vaqueros Oeste.

Pero han sido las armas económicas las que mas impacto han tenido.

1. Las sanciones unilateralesamenazan a todo banco, corporación, o industria que compre o le venda a Venezuela; el país no ha podido comprar alimentos ni medicinas internacionalmente. Solamente en el 2018 murieron 40,000 venezolanos/as y consecuencia directa de las sanciones. (Weisbrot y Sachs).[5] Estas medidas le han costado a Venezuela casi $200.000 millones.  ($200 billones).[6]
2. El ataque a la moneda, el bolívar, con la venia de bancos y agencias internacionales (rating), y la instalación de una valoración internacional falsa del “Dolar Today” prácticamente destruyeron al bolívar. Trataron de destruir la criptomoneda venezolana el PETRO, pero no han podido. Ese ataque al bolívar ha costado a Venezuela $105 billones.
3. Barreras a la banca internacional: El cierre de contratos de corresponsalía bancaria, la limitación sistemática e interrupción de las operaciones en bancos internacionales, cierre de las cuentas de instituciones financieras venezolanas, mayores costos transaccionales y comisiones bancarias; todo lo cual dificulta cualquier programa de desarrollo, socava la confianza de inversionistas y ha habido una fuga masiva de capitales.
4. El robo vulgar: Tal como los piratas de antaño, los EEUU y los bancos de Europa descaradamente han hurtado las cuentas y propiedades venezolanas en el extranjero, y al diablo con el respeto a la propiedad privada que tanto pregona el capitalismo. Los EEUU se apoderó de la compañía petrolera CITGO y millones en las cuentas venezolanas en bancos de EEUU. Y en estos días ejerciendo la piratería en alta mar, se apoderaron físicamente de un tanquero con petróleo venezolano, vendieron el petróleo y se quedaron con el ingreso.

Los bancos europeos, viendo esta piñata, no se quedaron atrás: en Portugal, Bélgica, Italia, y en Inglaterra; todos se robaron las cuentas venezolanas valoradas en $25 billones ($250,000 millones) incluyendo 31 toneladas de oro venezolano valorado en $1.3 mil millones en el banco central de Inglaterra. 

El gobierno lacayo de Colombia no se quedó atrás y le robó a Venezuela la industria fertilizante Monómeros, lo cual redujo la producción agrícola en un 50%, que representa entre 24 y 30 millones de toneladas de alimento para el pueblo venezolano. 

Y para rematar, Trump ha estado construyendo la muralla de infamia en la frontera con México con los millones robados de la compañía venezolana CITGO. 

Los dineros robados equivalen a: 

- 16 meses de producción nacional

- Venezuela hubiera podido liquidar la deuda externa entera de $110 billones

- o hubiera tenido con que pagar alimentos y medicinas durante 45 años.[7] 

Bochornosamente, los líderes de la facción anti-democrática de la oposición venezolana, títeres de una riquísima elite supremacista y racista de extrema derecha, fueron quienes han pedido las sanciones e incluso invasión militar contra su propio pueblo.

La Pandemia

Desde el momento del 12 de marzo 2020 cuando la OMS declaró la pandemia, el gobierno venezolano acató sus recomendaciones y un Comité Presidencial de científicos y médicos asesoran al gabinete en como enfrentar la pandemia: uso de mascarilla, distanciamiento social, quedarse en casa, uso de pruebas, seguir los contactos de los contagiados, etc.  

Pero la salud pública se fundamenta en los determinantes sociales de la salud, es decir, en el reconocimiento de que la salud de una población es multifacética.

La salud no se debe únicamente en una bacteria, un virus, una medicina o vacuna, sino en su gran parte en el modo en que una sociedad es capaz de proveer alimentos, educación, ingreso, empleo, vivienda, servicios médicos, sanidad, agua potable, equidad social y apoyo comunitario al individuo.

En fin, estos son los recursos y condiciones esenciales que conforman la calidad de la vida diaria de una sociedad.

La pobreza, tal como la salud, es también un fenómeno multifacético. No es simplemente la falta de dinero, sino la falta de una calidad de vida.  

Durante 21 años del gobierno bolivariano venezolano ha utilizado el ingreso petrolero para remediar 40 años de faltas de los gobiernos elitescos anteriores que enriquecieron a sus miembros a niveles inmorales, mientras pisotearon a su antojo los derechos humanos y dejaron a la población en la mas injustificada pobreza. Esta es la elite que hoy en día adversa al gobierno bolivariano. 

Con las inversiones sociales masivas de la Revolución Bolivariana se redujo dramáticamente el nivel de pobreza con programas de salud, educación, vivienda, medio ambiente, transporte, agua, seguridad alimenticia, producción agrícola, beneficios sociales y pensiones.

En una década se logró subir al país 7 escaños en el Índice de Desarrollo Humano de las NU. A pesar del daño de las sanciones, la prioridad del gobierno sigue siendo mantener a toda costa esas condiciones de vida.

Los beneficios de toda esta estructura se aprecian aún más hoy durante una pandemia. 

El Sistema Médico 

Con la ayuda de Cuba, desde el 2003 se estableció el sistema Barrio Adentro que proporciona servicio médico de calidad, gratis y comprensivo casi a cada barrio y aldea   El principio fundamental es que la salud es un derecho humano. 

 En el 2001 había solamente 1.9 médicos por 100,000 habitantes; hoy en día hay 19.

El pueblo venezolano no tiene que angustiarse por pagar por pruebas para Covid-19, tratamientos o cualquier  hospitalización. Hay hospitales y clínicas designados específicamente para pacientes con coronavirus. Y lo mas sobresaliente es que en un país donde el sector privado abiertamente adversa al sector público, ha habido gran cooperación entre los hospitales públicos (con 11,573 camas) y las clínicas privadas (con 4,760 camas). Todo tratamiento para Covid-19 en cualquier hospital o clínica, aunque sea privada, no le cuestan al ciudadano 

Hay además 4,000 camas en hoteles para aislar a cualquier persona con síntomas leves que no tienen donde aislarse.

Venezuela ha implementado una serie de medidas para enfrentar los impactos económicos de la pandemia:

-          Los bancos tienen que extender sin multa, plazos para pagos que se deben.

-          El estado ayuda a pagar los salarios de la pequeña y  mediana empresa.

-          Se prohíben los despidos.

-          Suspensión del pago de la renta domiciliaria por 6 meses y se prohíben los desalojamientos.

-          Salarios y pensiones se incrementaron

El gobierno distribuye, casa por casa, cajas de alimentos subsidiados a mas de 6 millones de hogares con al ayuda de miles organizaciones sociales.

La participación popular es el eje de la Revolución Bolivariana. Hay mas de 40,000 Consejos Comunales, 5000 Comunas, 5 millones de milicianos civiles, cientos de colectivos que ha sido crucial en la pandemia: instruyendo al pueblo sobre el Covid-19, promoviendo las protecciones necesarias, y ayudando a  quienes que necesitan ayuda. 

Además, hay 1,860 Casas de Alimentación que le dan comida a 372,000 personas necesitadas.

Muy importante es la plataforma digital (patria.org) donde 18 millones de venezolanos/as (de una población de 28 millones) voluntariamente han respondido los cuestionarios sobre el impacto del virus y las necesidades que tienen. Esto permite enfocar recursos hacia los individuos y comunidades mas afectadas, los cuales reciben visitas médicas, casa por casa, con la ayuda de 20,000 médicos venezolanos y cubanos.

-          Las fronteras son fuertemente controladas con estaciones médicas examinando a todos los viajeros. Desde abril, mas de 70,000 venezolanos/a han regresado a su patria, huyendo por la pandemia y el mal trato recibido en los países donde se fueron.

-          20,000 trabajadores y las fuerzas armadas regularmente desinfectan sitios públicos

-          Hay una campaña intensa de educación publica sobre como protegerse del virus. 

Solidaridad internacional 

El 18 de marzo, demostrando una vez su inhumanidad, el Fondo Monetario Internacional le negó a Venezuela un préstamo de $5 billones para cubrir gastos de medicinas y equipos médicos para combatir la pandemia que desesperadamente se necesitaban.  Y los EEUU criminalmente incrementaron las sanciones durante la pandemia.

En cambio, demostrando lo que realmente es la verdadera solidaridad internacional, Cuba, China, Rusia, Turquía, Irán, la OMS, la Organización Panamericana de Salud, la Cruz Roja, todos fueron a ayudar a Venezuela en estos momentos tan graves llevando las medicinas y los equipos necesarios. 

Por todas estas razones, Venezuela es uno de los países de Suramérica que mejor se ha enfrentado esta pandemia.

(Datos de John Hopkins para 2 de marzo 2021); tiene139,116 casos1,344 fallecidos4,917 casos por millón de habitantesY extraordinariamente, solo 47 muertes por millón de habitantes

Implicaciones del asedio contra Venezuela 

Lo que le han hecho a Venezuela da unas duras lecciones.  

1)    Mientras el dólar siga siendo la moneda preferencial de la banca y el comercio internacional, no habrá protección contra medidas económicas arbitrarias de los EEUU. Las naciones que han sido sancionadas (Venezuela, Rusia, China, Irán) ya están cooperando entre sí, utilizando otras monedas para sus intercambios comerciales. Las crypto-monedas han sido una la protección y son cada vez más significativas. 

2)     La banca internacional necesita ser mas fuertemente regulada para que no estén al servicio de las grandes potencias, ni puedan seguir robando a los gobiernos con los cuales están en desacuerdo. El robo de cuentas y oro venezolanos deben infundir terror a las naciones que tiene cuentas en el exterior. 

También por razones ambientales los bancos tienen que ser controlados.  En el año 2019, los bancos internacionales extendieron $2.6 trillones a compañías que están destruyendo los ecosistemas y la fauna silvestre.[8]

Por el momento, la banca internacional es un ente a espaldas de la democracia, de la soberanía, del medio ambiente y viola los principios de la propiedad privada tan ufanada por el sistema capitalista mismo. 

3)    Las corporaciones:Tienen un poder desbordado, ajeno a la democracia. Se les extienden los mismos derechos legales de una persona natural pero no se les hace responsable de violación de los derechos humanos de la persona, o sea son grandemente impune. En Venezuela las corporaciones internacionales han violado los derechos humanos del pueblo al participar en conspiraciones contra el estado y promover escases provocada de alimentos y medicinas. 

4)    La organización de los Países No-Alienados de las UN debe ser fortalecida; es la clave para llevar a cabo una reforma auténtica del funcionamiento de las Naciones Unidas, la cual ha sido severamente atacada y también manipulada por los EEUU.

5)     Las leyes internacionales debe ser fuertemente robustecidas para que se puedan realmente aplicar de modo que los países no estén a la merced del chantaje, presiones, y ataques de los poderosos. Las leyes son los únicos garantes de la paz mundial.

6)    La solidaridad y cooperación Sur-Sur así como la participación popular, sonclaves para enfrentar las necesidades verdaderas del desarrollo como la lucha contra la pobreza, el analfabetismo, y la enfermedad. 

La guerra contra Venezuela demuestran que si podemos enfrentar la opresión extranjera, manteniendo nuestra paz y democracia, con la activa participación del pueblo y  una verdadera solidaridad entre naciones.