¡Quién soy yo! para calificar de error la decisión de una comisión nacida del sínodo declarando que, aunque la revisión histórica demuestra que las mujeres ejercieron el diaconado, falta el estudio teológico del asunto, dado que se considera un primer paso para el sacerdocio, cuya negativa a las mujeres ya es definitiva

No soy nadie, una mujer laica que ha luchado toda su larga vida para tratar de igualar el trato de las mujeres con los hombres, tanto en la sociedad como en la iglesia. Y me duele que nuestra institución no sea la abanderada de esta lucha. Al revés, a lo largo de los años añadió leña al fuego con descalificativos: éramos inferiores en inteligencia, de inmadurez perpetua, frívolas, charlatanas, amorales, tentadoras de Adán… Todas estas virtudes desembocaban en el deseo de Dios de una presunta subordinación femenina para evitar males mayores

Reconozco que este itinerario lo siguió también la sociedad civil, pero ha ido en algunos lugares del planeta, rectificando y dando protagonismo a las mujeres. No tenemos más que ver el número de presidentas y primeras ministras que van proliferando en los distintos países. Por eso me sorprende y me apena, que la institución que pretende seguir las instrucciones de Jesucristo, no lo haga. Sus primeros seguidores plasmaron, entre otras cosas, que en sus comunidades no podía haber diferencias entre amos y esclavos, judíos y gentiles, amos y mujeres. Las hubo y las hay, sin el más mínimo cargo de conciencia, pues llevan pateando el balón hacia delante y no tomando decisiones igualitarias, demasiado tiempo

Nos dicen que eran 10, los miembros del grupo que tomó la decisión, y que votaron siete en contra y uno a favor ¿Dónde estaban los otros dos? También aseguran que sólo han recibido 22 documentos que representan pocos países y no pueden considerar que son la voz del Pueblo de Dios. Estoy de acuerdo en este último punto pues si hubiera un referéndum en la Iglesia, ganaría abrumadoramente el no al diaconado femenino ¡Tantos años de inferioridad femenina han calado en las mujeres!

Me ha hecho gracia que la masculinidad de Jesús fuera un argumento en contra nuestra. Somos una sociedad visual y los galileos eran de raza blanca ¿Cómo reflejan a Jesucristo los varones de raza negra o china con su imagen? Jesús llama a Dios padre y nos hemos hartado de ver imágenes de un Dios con barba blanca que son las que han llegado al pueblo. ¿Se puede hoy afirmar, la masculinidad de Dios? ¿No fue necesario convertir a María de Nazaret en una diosa para compensar la falta de feminidad en el Creador?

Jesucristo luchó contra la sociedad y la jerarquía judía de su tiempo. Le costó la vida, pero creo no se arrepintió de lo que había hecho. Aceptó las leyes de su sociedad, como la esclavitud y que la Iglesia mantuvo como natural hasta mediados del siglo XIX cuando ya se habían levantado muchas voces contra ella. Y sin embargo tuvo entre sus seguidores a muchas mujeres, algunas tan importantes como María Magdalena que fue la primera persona a la que se apareció y a la que pidió que infundiera la buena nueva. La Apóstol de los Apóstoles la llamaron algunas comunidades primitivas

Las primeras feministas también lucharon por conseguir el voto femenino que iba en contra de la sociedad. Algunas fueron condenadas a la cárcel, pero perseveraron. Yo invito a muchas mujeres a seguir peleando por conseguir en la Iglesia el puesto que como seres humanos nos pertenece. En estos momentos de cambios enormes en la sociedad estamos a tiempo de configurar una comunidad de iguales. No cabe duda, que las ceremonias vaticanas con tantos cardenales, obispos y sacerdotes no juegan a favor de esta igualdad y contribuyen al vaciamiento de los templos. En estos en tiempos de adviento no podemos perder la esperanza. El nacimiento de un Niño en un pesebre, nadie habría pensado entonces que se convertiría en una fuerza capaz de cambiar a la sociedad