Es este el consejo que el jugador de básquet del Barça, Nikola Mirotic, dio a los escolanes de Montserrat el pasado 24 de noviembre. Después de escuchar, visiblemente emocionado, la Salve y el Virolai interpretados por la Escolanía, Nikola Mirotic, de profundas convicciones cristianas, se reunió con los escolanes, exhortándoles a hacer lo posible “para ser buenas personas”.

En una sociedad que no tiene ningún reparo en pisotear a los más débiles para poder triunfar y que busca la fama, el dinero fácil y el éxito, y además de una manera rápida, Mirotic transmitió a los escolanes la importancia “del esfuerzo en la vida” y también de “la familia”, para así crecer en humanidad.

El día siguiente de la visita de Mirotic, fue el presidente del Barça que visitó también a los escolanes de Montserrat. Joan Laporta animó a niños de la Escolanía, en la línea de lo que había dicho un día antes Mirotic: a ser generosos y solidarios. Los escolanes le pidieron al presidente del Barça un consejo de vida, y éste les respondió, muy sensatamente: “Es bonito poder dar y poder ayudar, y así seguro que eso os realizará como personas”.

Las palabras de Mirotic animando a los escolanes a “ser buenas personas”, están en la línea de lo que nos pide Jesús en el sermón de la montaña: “Sed, pues, vosotros perfectos” (Mt 5:48) o buenos, como dicen otras traducciones.

Este mandamiento de Jesús me recuerda una oración del P. Pedro Arrupe, que entre otras cosas dice: “Sed buenos: buenos en vuestro rostro, que habrá de ser distendido, sereno y sonriente. Buenos en vuestra mirada. Sed buenos en vuestra manera de escuchar: de esta manera experimentareis, una y otra vez, la paciencia, el amor, la atención. Sed buenos en vuestras manos: manos que dan, que ayudan, que enjuagan las lágrimas, que estrechan la mano del pobre y del enfermo para infundirles valor, que abrazan al adversario y lo animan al acuerdo. Sed buenos en el hablar y en juzgar. Sed buenos, si sois jóvenes, con la gente mayor; si sois mayores, sed buenos con los jóvenes”.

Los consejos que Nikola Mirotic y Joan Laporta dieron al os escolanes, es lo que  transmitir a los chicos que a lo largo de cinco cursos viven y se forman en la Escolanía. No es solo la música y las otras asignaturaslo que los escolanes estudian y aprenden, sino que más importante incluso que eso, es aprender a ser personas. Mejor dicho:“a ser buenas personas”, como les decía Mirotic a los escolanes. Se trata de aprender a valorar el esfuerzo, la solidaridad y la generosidad. Se trata de acoger al diferente y valorar el reto de saberse ayudar y de esta manera aprender también a convivir, para ser más humanos y para vivir más atentos las necesidades delos demás.

Este Adviento que ahora hemos comenzado y que nos prepara para la Navidad, es un tiempo propicio para aprender “a ser buenas personas”, como les decía Mirotic a los escolanes. Es también un tiempo (como lo demuestra cada año la Marató de TV3), para “poder dar y poder ayudar”, como les decía a los escolanes Joan Laporta.

El Niño Dios que viene a salvarnos, es el que, también hoy,nos dice: “Sed buenos del todo”.Solo así aprenderemos a cuidarnos los unos a los otros ya cuidar también el planeta.

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