Una crítica al cardenal García-Gasco.
Creo que nadie puede pensar que el cardenal de Valencia es de los obispos con quienes no simpatizo. Acabo de decir, por ejemplo, que sus palabras en el acto del pasado 30 de diciembre me parecieron las mejores.
Uno de los lectores de este Blog me comunicó que los seminaristas valencianos tienen en Filosofía como texto un libro del controvertido jesuita Masiá. Supongo que no será el Manual de la asignatura sino un libro cuya lectura se recomienda. A efectos que no alcanzo entender.
En este caso, y por respeto a Don Agustín, hice lo que algunos me recomiendan. Contrastar las fuentes. Y llamé al arzobispado para que me confirmaran la veracidad de la información. Me atendió, amablemente, una persona con responsabilidad en la archidiócesis a quien le comuniqué la noticia que me había llegado. Rogándole que me la confirmara, en cuyo caso, le dije, no iba a hablar bien del cardenal, o me la desmintiera. No tenía ni idea de lo que yo le decía y quedó en informarse y contestarme. Yo le dije que esperaría algún tiempo y que si la respuesta era el silencio daría por buena la información.
Han pasado por lo menos diez días y no he recibido respuesta. Que bien sencilla era. Pues debo pensar que sí. Que se recomienda a los seminaristas un libro de Masiá.
Estoy seguro de que el cardenal no se mete en los textos que recomiendan los profesores de su seminario. Pero es el responsable del mismo y de sus docentes. Estos son nombrados por él. Pues si alguno de los nombrados recomienda a Masiá como lectura de los seminaristas Don Agustín anda algo despistadillo.
También pudiera ser que la persona en quien confía, nombrada también por él, para la información de la diócesis pues no sabe cumplir con su oficio.
Ya es pública la cuestión. ¿En el Seminario de Valencia se recomienda a Masiá? Si así fuere, Don Agustín, debería prestar más atención a su Seminario.