La insignificante nadedad de algunas.

Un amable lector nos hace llegar unos enlaces con motivo de las enseñanza que se da en universidades católicas por personas de dudosa doctrina. En concreto se refiere a Isabel Gómez Acebo profesora de teología en ICADE. Y nos muestra lo que es la Asociación de Teólogas Españolas.

No voy a entrar a analizar las opiniones de esa señora ni los congresos anuales de la Asociación. Cuyos asistentes, por las fotografías que ellas mismas difunden, caben en un par de taxis. El que su dirección sea Universidad de Comillas, 3 no sé si es pura casualidad y tienen en esa calle su sede o si están en la misma Universidad Pontificia de Comillas. Tal vez alguien nos lo aclare.

Tampoco comentaré el enlace que hacen a una página abiertamente abortista y que se mofa de la campaña de los obispos en favor de la vida con el dichoso lince en el cartel. Me limitaré a algo mucho más sencillo. Apodíctico a confesión de parte.

Ellas mismas dicen que desde el 18 de noviembre de 2002 hasta hoy, es decir en seis años y medio, su página ha recibido 15.823 visitas. Las mismas que recibe esta torre en un solo día. Y no de los más movidos. No interesan a nadie. No las sigue nadie. Se autoalimentan a si mismas en una endogamia estéril y sin mañana. Pero tienen la habilidad de mostrarse como algo. Y hay bobos que se lo creen. Y hasta las temen. Siempre hay algunos que pican con los crecepelo.

Todo es una operación de bombos mutuos que es lo único que han sabido montar muy bien. Numerosas asociaciones sin el menor poder de conocatoria, con escasísimos socios y en no pocos casos repetidos. Y eso es lo que tiene asustada a nuestra jerarquía. Una insignificante nadedad.
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